Llegaron al aeropuerto y corrieron con la foto del niño y el ex esposo de Stephanie mostrando a cada empleado en la zonas de abordo ninguno supo darle una respuesta concreta, salvo por una azafata que dijo que vio a un niño y a un hombre esperando que su vuelo saliera y que oyó cuando el niño dijo que quería llamar a su mamá para avisarle y el hombre dijo que no, ellos fueron hacia el lugar que la mujer les indicó lo más rápido posible hasta que gracias a un policía pudieron lograr que no abordarán el vuelo, Trevor y Lucas casi pelean a puño limpio luego de que él defendió a Stephanie de su ex esposo cuando él se sobrepasó en su discusión con ella.
Gracias a la orden otorgada por el juez, ella obtuvo la custodia del chico y le impedía a ambos padres sacarlo del país hasta que se celebrará la audiencia de custodia.
Lucas acompañó a la mujer y al chico hasta la casa de sus padres, donde ella se había mudado nuevamente a pedido de su padre, y le prometió a Tyler llevarlo al béisbol el domingo.
Al regresar a la oficina aún seguía alterado por el altercado con Trevor y su dolor de cabeza había regresado, continuó trabajando hasta que llegó la hora del almuerzo, pero estaba tan metido en los casos que preparaba que se dio cuenta solo porque su secretaria vino a avisarle que saldría a comer y le dijo maternalmente que hiciera lo mismo, entonces recordó que debía pasar a buscar a Cathe por la revista, tomó su chaqueta y su teléfono y fue a buscarla. Cuando bajó al estacionamiento del edificio se encontró con Trevor esperándolo apoyado en su auto.
-¿Qué haces aquí?
-Lo que empezamos tu y yo no ha terminado, niño bonito.
-Yo creo que si.
-No. Tu me quitaste la oportunidad de estar con mi hijo.
-Eso lo has hecho tú solo. No debiste querer llevártelo así.
-¿Qué sabrás tú? No tienes hijos.
-Según Steph si, ella asegura que Ty es mio y sabes una cosa, viendo fotos de niño creo que nos parecemos mucho.
No debió decir eso, porque en cuanto al oír las palabras de provocación de la boca del rubio Trevor reaccionó propinándole un derechazo en la mandíbula a Lucas, este se tocó el labio y sangraba pero no se quedó quieto le devolvió el golpe, también le dio un puñetazo pero fue en el ojo, y allí comenzó la pelea, parecían dos niños peleando por su juguete favorito, un par de hombres de traje impecable bajaron del ascensor y vieron lo que estaba pasando y corrieron a separarlos, para su mala suerte era el Sr Balliant uno de sus jefes.
-Cooper ¿Me puede explicar que sucede?
-Terminamos algo que empezó hace mucho señor, problemas personales - se limpió la sangre del labio con el dorso de la maga de la camisa.
-Sea lo que sea que tenga que arreglar no creo que a puñetazo limpio sea lo más adecuado, usted es socio de la firma y creo que debe saberlo.
-Si sr, disculpeme.
-Y usted ¿Quién es? ¿Qué hace aquí provocando a mis empleados? Le ruego que se valla o llamaré a la policía.
-Descuide que mi asunto es con el Dr Cooper, pero ya lo arreglaremos en otro momento.
Trevor levantó su chaqueta del piso y se fue del lugar, Lucas fue hasta su auto pero a medio camino su jefe lo detuvo.
-Espero que esto no se vuelva a repetir.
-No se preocupe no será así.
Subió a su auto y se limpió la sangre de la cara pero era inútil le quedaron marcas, moretones y cortadas. Soltó un bufido estaba más que fastidiado y para colmo si ella lo veía se iba a escandalizar, aun así se limpio lo más que pudo y fue hasta la revista a buscarla.
Cuando llegó la vio parada en la puerta hablando por teléfono con el ceño fruncido y se preguntó qué le pasaría, ella al ver su auto le sonrió y le hizo una seña de que esperara, cuando acabó de hablar se acercó al auto y entro.
-Hola guapo - lo vio todo golpeado y abrió los ojos - o no tanto ahora ¿Que te paso?
-Nada una disputa ¿Como te fue?
-Bien, pero de verdad ¿Que paso?
Lucas tomó aire y le contó todo lo que había ocurrido desde que Stephanie llegó a su oficina muerta de miedo hasta que su jefe separo la pelea en el estacionamiento de la firma.
-Ya entiendo, no debiste provocarlo.
-Es que no se que me paso, creo que fue por lo que le dijo a Steph en el aeropuerto que reaccione de ese modo, te juro que yo no soy así.
-¿Así como caballero?
-No de provocar peleas, en realidad soy más de evitarlas, por eso soy abogado. - ella se sonrió y le acarició la mejilla pero él hizo una mueca de dolor.
-Pobre mira como estas. Vamos a casa y te curo.
-¿Sabes que me ayudaría ahora?
-No, dime.
El se acerco a ella hasta quedar a una distancia peligrosa de su boca.
-Uno de tus besos, dicen que lo curan todo.
-No se quien habrá dicho eso pero no creo que sea cierto.
-Con intentar no se pierde nada.
Ella sonrió lo tomó suavemente de las mejillas y lo besó despacio para que no le doliera más de lo que estaba.
El en vez de ir a casa de Catherine fueron a la suya. Lucas vivía en las afueras de la ciudad en una casa de dos plantas que había comprado cuando se mudó del departamento que compartían con Stephanie y la había restaurado completamente, también le había hecho varias modificaciones. Estacionó el auto en la entrada y le abrió la puerta a su acompañante, en cuanto entraron fueron recibidos por Roy el perro de Lucas que tuvo que sujetar con fuerza porque casi tira a Catherine al piso.
-Siéntate.
-¿A mi o a el?
-Tu, si estas de pie el te arrojará con fuerza.
Catherine miró con un poco de desconfianza al enorme animal que intentaba soltarse del agarre de su dueño quien hacía un esfuerzo sobrehumano para mantenerlo controlado. Catherine se sentó en las escaleras y él soltó al perro que como una gran masa de pelos negros fue hasta ella y comenzó a lamerle el rostro moviendo la cola.