¿que has hecho conmigo?

Capitulo 33

Este fin de semana frente a la entrada del Gran Hotel un hombre estaciona su convertible, saca sus maletas y luego de entregarle las llaves de su auto al valet parking entra y se acerca al mostrador para confirmar su reserva.

Entró a su habitación, dejó la maleta a un lado y luego se tiró sobre la cama, esta era suave, las almohadas eran mullidas tanto que sintió que parecían nubes. El cobertor parecía de satin y era agradable al tacto y el colchón era tan cómodo que sintió que en él podría dormir 100 años y no querer despertar jamas.

Después de darse una ducha y pedir que le subieran un almuerzo ligero oyó que golpeaban a su puerta, cuando abrió para ver quien era su sonrisa fue lo que hizo que su corazón saltara de alegría. Ella estaba allí parada frente a él tan hermosa como siempre con su sonrisa que hacía que sus piernas temblaran.

-Hola extraño - dijo y se arrojó a sus brazos y lo beso con ansias - te he extrañado mucho.

-Y yo a ti hermosa.

La apretó fuerte en sus brazos y cerró la puerta tras él y la llevó en brazos hasta adentro.

-¿Como has estado? ¿Cómo está tu padre?

-Bien, el peligro ha pasado y mi padre ya está en su casa. Pero no quiero hablar de él ahora - ella jugaba con el cuello de su camisa mientras dejaba pequeños besos en su cuello y oía como el empezaba a respirar más rápido.

-¿Que tienes en mente entonces?

-Podríamos… no sé hacer algo más.

-Eres toda una diablita ¿Lo sabías?

-Hay algo en ti que me hace esto.

-Si claro como no. - dijo riendo y bajando una de sus manos por la espalda de la chica recorriendo despacio y besándola suavemente

-Lucas - susurró ella cuando el comenzo a besar su cuello y a sentir sus fuertes manos recorrer la curva de su cintura.

-Dime que no extrañaste esto, dime que quieres que pare y lo haré.

-No puedo, porque si quiero - ella lo tomó de las mejillas y lo obligó a mirarla - no tienes idea lo mucho que he necesitado de ti.

-Ya me tienes aqui y no me voy a ir a menos que tu me lo pidas.

Volvió a besarlo y esta vez se aferró fuerte a su espalda.

Lucas la levanto por la cintura y ella pasó las piernas alrededor de su cuerpo mientras él caminaba hasta la cama donde la dejó allí de espaldas y se acomodo suavemente sobre su cuerpo, se alejó un poco para contemplarla y luego volvió a besarla.

Finalmente cayeron los dos exhaustos después de haberse recorrido con sus manos y llenarse de besos, de extasiarse en el cuerpo del otro y pedirse entre besos y caricias no volverse a separar por tanto tiempo.

Mientras permanecían acostados abrazados en la gran cama del hotel, Cathe jugaba con su dedo en el pecho de Lucas mientras este de a poco comenzaba a quedarse dormido ella pensaba en cómo debía abordar el tema de su inminente presentación con la familia de ella.

-Lucas cariño, hay algo que tengo que decirte. - ella levantó la vista y el solo respondió adormilado - vamos despierta es importante - se deshizo de su abrazo y se sentó en la cama.

-Ok - dijo desperezándose - estoy despierto y atento, cuéntamelo todo.

-Bueno, para empezar mi familia es un poco… como puedo decirlo… peculiar.

-¿Y cuál no lo es?

-De verdad, esta noche en la cena no solo estará mi madre y mi hermano, también mi padre su esposa mi hermano mayor y mi cuñada.

-¿Cual es el problema?

-En cuanto a mis hermanos ninguno, y tal vez mi padre tampoco… pero mi madre - rueda los ojos - ella sabrá si mientes o quieres omitir algún tema. No quiero que te haga sentir incómodo y quieras dejarme por mi loca familia.

-Si de familias locas hablamos deberias convivir con la mia.

-Bueno tal vez un día podría conocerlos.

-Si, ya que he venido hasta aquí, pero es diferente.

-¿Por qué?

-Porque para que eso ocurra debería hablarles primero de Tyler.

-¿No lo has hecho aun?

-No he tenido tiempo, ademas no quiero abrumar al chico con tantos cambios, aun se ajusta a su cambio de vida, de escuela… es un niño pequeño.

-Te entiendo, hablando de eso ¿Por que no lo trajiste? Quería verlo, hasta le compre un obsequio.

-Y te lo agradecerá cuando lo veas.

-No me respondiste.

-Esta bien, no lo traje porque este fin de semana le tocaba  a Trevor. Pero seguramente podrá verse la próxima vez cuando cuando regreses.

-Es cierto, debo regresar, tengo pendiente lo del libro y Warren me mata si no lo veo esta semana.

-En ese caso podemos regresar juntos.

-Me parece una idea fantástica.

Más tarde ese día ella dejó su casa para ir a buscarlo así ambos llegaron juntos a cenar a casa de su madre.

-¿Estas listo?

-No, pero supongo que en algún momento esto debía suceder.



#5582 en Novela romántica

En el texto hay: romance

Editado: 11.05.2021

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