-Me desperté en mi habitación a la mañana siguiente, bajé a desayunar y me encontré con mi abuela, y mis amigos, estaba un poco mareada y me dolía la cabeza así que iba apoyada contra la pared. Cuando me vieron, mis amigos vinieron a ayudarme y mi abuela me dio una aspirina, susurrándome a la vez que teníamos que hablar. Eso no podía ser bueno. Tras desayunar fuimos a dar un paseo y luego los acompañe a la estación. Nos despedimos y volvía a casa, conociendo mi estado decidí pasar primero a visitar a Jack-.
Hola. -Me recibió Ángel.
¿Quién es querido? -Preguntó Lucía.
Es Katherina. Viene a... ¿A qué vienes? -Me preguntó divertido y a la vez impresionado.
Venía a ver a... -Iba a continuar pero Lucía me interrumpió:
-Dile que pase, no la dejes ahí fuera que se debes estar achicharrando.
-Los dos nos miramos y os reímos. Luego me hicieron pasar a la cocina don Jack estaba desayunando y tomando una aspirina-.
Hola. -Me dijo.
Hola. -Respondí yo algo tímida.
Creo que tú, a pesar de ser menor que yo, eres la más fuerte de los dos. -Rió.
Sí. Pero no tiene gracia. Ayer cuando estabas allí tirado casi me da a mi algo, tenía miedo de haberte matado ya que no sé lo que hice. -Dije imitando estar enfadada.
Mmmm... ¿Y qué fue lo que desencadenó ese ataque? -Preguntó divertido.
Tú.- Respondí secamente.
¿Yo? -Y se hizo el ofendido.
Sí, tú. Arana estaba en la dimensión y cuando me atacaste, por cierto atacar por la espalda está muy mal, le diste a ella también y quedó inconsciente. Después de eso estaba arriba, en la burbuja, medio gritando y echando fuego, literalmente como pudiste comprender. -Dije con tono de superioridad.
Espera, volvamos a la parte en la que me viste tirado en el suelo y casi te da algo. ¿Te preocupabas por mí? Sería un bonito detalle por tu parte, pero un consejo, no lo vuelvas a hacer, si llego a estar fingiendo podría haberte ganado. -Dijo entre divertido y serio.
Punto uno. Sí. Me preocupaba por ti. Punto dos. Lo había pensado, pero vi como te daba la bola de fuego y quise arriesgarme. Y punto tres. Por si me lo preguntas, sí, volvería a hacerlo. -Respondí viendo sorprendida que su abuela y su amigo se habían ido-. Bueno. Tengo que irme ya, mi abuela me está esperando.
Tú siempre con lo mismo, vienes, me engatusas, y te vas. -Dijo divertido.
Jeje. Así soy yo. -Respondí, y... Acercándome a su oído, dije divertida y con algo de picardía:
Quizás deberías plantearte engatusarme tú también, así estaríamos en empate. ¿O quieres dejarme a mí todo el trabajo?
-Tras decirle eso me fui, presentía que iba a tener una larga charla con mi abuela, ya que Lucía insistió en acompañarme y no pude decir que no. Aun encima Jack y Ángel la acompañar para indagar que me iban a decir-.