¿que si creo en el amor?

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Capítulo 5

SABRINA

Acababa de llegar a casa, Steven ya se había ido, estuvimos hablando un rato en mi porche pero decidimos despedirnos ya que era tarde, entre a casa y subí por las escalera despacio para no hacer ningún ruido, pase por la habitación de mi madre y la puerta estaba medio abierta, me asome, estaba profundamente dormida, me dirigí a mi habitación y me tumbe en la cama mirando hacia el techo, no puedo creer que haya aceptado ir a cenar a la casa de Ethan, no sé si merece que lo llame por su nombre en mi mente no es porque me crea más que él o nada por el estilo, es solo que mi mente era el único lugar donde podría estar a salvo de sus insultos y groserías, era el lugar donde podría mantener al margen a Ethan Brown pero por lo visto ya ni ahí, sé que suena infantil pero no quiero que haga parte de mi vida y por el simple hecho de pensar en él ya lo hace, y eso es lo que no entiendo me trata de la peor manera y aquí estoy yo con mis pensamientos dirigidos a él, tonta, no quiero darle importancia pero no lo puedo evitar y por más que él se porte como un burro conmigo yo más me siento atraída, parece que me gusta que me ignoren y me insulten por ayudar, soy una masoquista, no entiendo que es y no me gusta, o tal vez sí, pero de lo que si estoy segura es que Ethan Brown tiene que salir de mi mente, por ningún chico iba a llegar bajo y a perder la cabeza y él no iba hacer la excepción, y más sabiendo que me aborrece en todos los sentidos, lo que no entiendo, nunca le hecho nada malo, solo ser amable y ayudarlo no creo que eso sea un delito, pero al parecer para él si lo es.

Tome mi teléfono y vi que tenía una llamada perdida, no la había escuchado estaba en vibrador, era un número desconocido, me plantee llamar para saber de quien se trataba, pero al final decidí que no, si llamó volverá a hacerlo, y ahora tenía cosas que hacer, como que colocarme mañana para la cena. Abrí mi armario saque unas blusas y algunos vestidos y me dispuse a escoger, luego de 30 minutos probándome ropa, estaba entre un vestido de encaje azul rey y una blusa rosa con unos vaqueros altos, con el vestido azul puesto me dirigí al espejo y en ese instante solo pensé en lo que ese color significaba, y me odie en ese momento por pensar en él, porque cuando me veo al espejo y veo el azul intenso solo puedo pensar en sus ojos, no me gusta esto para nada, así que me quite el vestido con rabia, y me decidí por el look más casual. Me coloque un pijama y me dirigí al baño para lavarme el rostro y los dientes, quite la alarma, quería dormir más, me fui a la cama apague la lámpara y caí en la oscuridad absoluta, mis ojos poco a poco se cerraron.

Me despertó el ruido de mi teléfono estire mi mano para tratar de tomarlo de la mesa, lo tome con dificultad mire la hora eran las 2 de la mañana y el mismo número que antes me llamo

-Hola –mi voz sonó ronca-nadie respondió–Holaaaa-volvi a decir pero nadie contesto, me senté en la cama, y me quite el teléfono de la oreja y puede ver que no habían colgado-¿Hay alguien ahí?-dije y luego sentí el sonido que indica el fin de la llamada, ok… eso fue raro ¿quién te llama a las 2 de la mañana y no contesta? Coloque de nuevo el teléfono en la mesita, y me volví a acostar pensaría en eso mañana, hoy tenía mucho sueño.

 

Estaba en el mar abierto completamente sola, de nuevo, siempre lo mismo, esto ya me iba a enloquecer, de pronto a lo lejos vi lo que parecía ser un bote, “por fin” dije y me dispuse a nadar hasta haya, estaba bastante lejos y sería bastante agotador, pero la desesperación de salir y llegar a tierra firme era más fuerte que cualquier cansancio, nade con cada musculo de mi cuerpo, lo más rápido que pude, luego de unos minutos estaba más o menos 10 metros del barco, y como lo había predicho estaba cansada, había alguien en él, me detuve un instante para descubrir que era Ethan, él estaba en el bote esperándome, con una sonrisa en su rostro de esa que me sacaba de quicio pero la cual adoraba, no sabía porque estaba el aquí y lo que menos entendía era que podía ver….podía verme, me estaba indicando que llegara hasta él, sus ojos penetraban profundamente en los míos, y sentí que todo el cansancio desaparecía, y ya no estaba perdida en el mar, lo estaba en sus ojos.

 

Desperté algo aturdida por lo que acababa de soñar, acababa de soñar con Ethan y él …. Dios, el podía ver, estaba en mis sueños y eso era lo que no comprendía ¿Por qué soñaría con Ethan Brown?, me quede pensando en eso por un rato pero un ruido en la puerta me saco de mis pensamiento

-¿Estas bien cariño?-pregunto mi madre con el ceño fruncido, estaba arreglada y se veía muy hermosa

-Sí, mama estoy bien, solo es un mal sueño-dije con una sonrisa para quitarle importancia




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