¿Cómo puede ser de que sólo por observar a una persona sientas una atracción hacia ella?
Eso, fue mi caso…
Quizás no recuerdes el día en que nos conocimos.
O tal vez sí…
Primer día de preparatoria, tú ibas saliendo del pasillo de la escuela
Yo iba entrando
No sabía cómo te llamabas o en que semestre, bachillerato y en que turno te encontrabas.
Vi a un chico alto, sus ojos y cabello son castaños, cejas pobladas, carismático, esa sonrisa, fue lo que más me llamó la atención.
Dirán es el típico chico perfecto que todos los escritores describen en los libros
Pero...
En realidad, tú eres así…
Al llegar casi a la misma distancia en la que te encontrabas, te detuviste, pensé que me estabas viendo, que me sonreíste, te iba a devolver la sonrisa, hasta que vi que no era a mí a quién le sonreías, sino a tu amigo que venía detrás de mí, lo esperaste y después se fueron juntos a la cafetería.
Seguí caminando, en busca de mi nuevo salón.
No sabía en donde sentarme, ya había alumnos en el aula, pero a nadie conocía, sólo a una chica que iba conmigo en la secundaria, pero nunca fuimos tan amigas.
Entre al aula, decidí sentarme en la primera fila, en el segundo lugar, prefería estar cerca de la puerta, nunca me gustó sentarme en la última fila porque eso quería decir que todos me verían recorrer todo ese trayecto, nunca me gustó llamar demasiado la atención.
Me parece que ya nadie faltaba de mi salón, estaba lleno, entró el profesor de la asignatura de álgebra, comenzó con su clase haciendo preguntas y si no sabías contestarle te decía de como podías haber llegado hasta aquí, literal te decía idiota delante de todos.
Idiota
Pasó el primer día, no te volví a ver…