Querida Anónima:
Sí, yo te he escrito a ti, anónima.
Me parece realmente inútil e innecesario el mantener tu identidad en secreto, si así lo quieres llamar.
Vamos, ¿es tan difícil venir y decirme “Hey yo soy la chica de las cartas”? No lo creo.
Anónima, quisiera llamarte por tu nombre, incluso, me atrevo a decir que quisiera escuchar tu voz.
Soy muy impaciente, no podré esperar mucho tiempo a que me digas quién eres.
Piénsalo, tal vez nos iría bien a ambos.
Te quiere:
-Jack (tu querido crush).