ANONIMA POV'
Viernes – 09:57AM
El amor es….
Es…
Es...
Es una mierda, una hermosa pero al final mierda. Nunca me había gustado nadie, bueno si, pero no por más de una semana.
Pero llegó él a poner mi pequeño mundo de cabeza.
él, con su sonrisa encantadora y su pequeño hoyuelo que se le hace cuando sonríe, me encanta su cabello desordenado y el aire despreocupado con el que siempre anda, lo inteligente que es, lo sociable y único. Nunca siquiera he escuchado rumores de que ha estado con muchas chicas, o si lo ha estado ha sido fuera de la academia.
Suspiro pensando en la carta que le deje en su casillero antes de venir a clase de biología y observo a Lucas cuatro sillas a derecha, ni siquiera me voltea a ver, me duele mucho eso. Pero ¿Qué puedo hacer cuando nunca nos hemos dirigido una mirada?, Hoy le comenté -en la carta- que el Domingo iban a inaugurar una Discoteca, la verdad aquí entre nosotros solamente; la discoteca la inauguro yo. Porque es mía, obviamente otra persona la administra, yo lo único que hice fue pagar la para que lo pusieran lo mejor posible.
En mi mundo, el dinero lo es todo. No puedes estar con alguien que no sea de tú misma clase social. Los estudiantes becados de aquí, antes que pusieran las reglas inquebrantables eran muy Humillados, pero ahora no lo hacen claramente, porque te suspenden 15 días y ¿Quién quiere ser suspendido por esa razón? Obviamente, nadie; es mejor evitarse problemas.
Mi familia, es una de esas familias que no se meten con nadie que no tenga millones de dólares en una cuenta de banco, o al menos tres empresas gigantes. -ruedo los ojos-. Nunca pude sociabilizar bien, nunca pude tener una amiga porque todas las estiradas que me rodeaban lo único que hacían era presumir lo que tenían, una vez tuve una mejor amiga; ella no era rica, ella no tenía millones de dólares, ella no era famosa. Pero era mi amiga y eso era lo que me importaba, eso fue solo hasta que mis padres se dieron cuenta, y nunca más la volví a ver.
Siempre he tenido todo lo que quiero, pero nada de lo que necesito.
Quiero que Lucas me conozca, como soy, no por lo que tengo. Por una vez quiero experimentar eso que le llaman “el efecto mariposa”, sin dinero de por medio, solo; él y yo. Porque si, cuando digo dinero de por medio ahí también están mis padres y sus millones incluidos, ellos no quieren que su hija este con alguien que no sea millonario, y todos los millonarios -o la mayoría de ellos- son muy superficiales, no he conocido ninguno que me tratara como su novia, siempre me tratan como el trofeo que tienen y quieren presumir.
Suspiro y decido dejar de pensar en la asquerosa vida amorosa que he tenido, mejor es prestar atención a la clase.
Al finalizar la clase, espero -como siempre cuando me toca Biología- a que todos salgan -incluso Lucas- cuándo veo que sale del salón, lo hago yo también con la esperanza de que se de cuenta de mi presencia pero…
Nada.
Ugh, a veces me dan ganas de pegarle una nalgada y decirle; “Oye papito, ¿tan despistado eres que ni siquiera te das de cuenta que soy yo la de las cartas? Porque Ufff, ya no aguanto más que me ignores” y lanzarme a besarlo sin más….
Suspiro imaginado me eso. Pero después recobro la compostura y se me pasa.
Cuando llego a mi casillero de reojo veo a Lucas leyendo la Carta sonriendo, y sin quererlo sonrió yo también, cuando veo que guarda la carta en uno de sus bolsillos, yo hago el disimulo que estoy viendo el horario, y cuando pasa junto a mí alcanzo a escuchar algo de su conversación;
—…¿Has oído de la nueva discoteca que abrieron, pensaba invitarte ¿Qué dices? Dicen que van a ir la mayoría de las chicas...— yo suelto un bufido cuando escucho a su mejor amigo decir eso, pero me doy vuelta cuando escucho su respuesta—Si, lo oí. Si estaba considerado ir…
Y sin pensarlo, suelto una risita nerviosa.
Oh. My. God.
¡Va a ir!
((…)). ((…))
Desde ese momento me imagine cómo sería mi encuentro con él, pero no pensé que lo que vería el día de la fiesta y tampoco pensé que me destrozaría el corazón.
Suelto un sollozo recordando…
((…)). ((…))
Domingo 08:59PM
—¿Estas segura de querer ir a esa Discoteca? Porque por algo le pagamos a Jesús, para que administre ese lugar… —Escucho a mi madre tratando de persuadirme para no ir a la Discoteca, ella sigue hablando pero no lo presto atención.
Estoy tratando de escoger algo que ponerme pero no tengo nada, Bueno si tengo, pero nada me gusta ¡Maldición! Creo que engorde un par de libras. Oh. Por. Dios. Lucas me va a decir gorda, comienzo a hiperventilar pensando en lo que pasará
Mejor me…—¿Estas bien?—pregunta mamá
—Si má, estoy bien. Solo un poco nerviosa, es mi primer negocio ¿Qué esperas?—Suelto una risita, rasándole a Dios que me crea y se lo creyó
—Owww, bebé. No te preocupes ya verás, eso se va a llenar no te preocupes, nuestra familia siempre tiene la suerte de que todo lo que hagamos sea exitoso—me comenta más siendo arrogante, que dándome ánimos. Suspiro.
Eso me pone más nerviosa de lo que ya estoy.
10:20 PM
A pesar de que el negocio ha sido todo un éxito, y está tan lleno que haré dinero, como para no trabajar en tres meses. Pero no me interesa tanto esa parte.
—Ya llegó el jovencito que nos dijo, señorita— Me dice uno de mis guardias personales— ¿Alguna orden?
Yo sonrió inevitablemente.
—Si, déjenlo pasar y a todos los que vengan con él y comuníquenle a todos que todo va por cuenta de la casa— Mi club es exclusivo, solo entras si pagas con anticipación, pero yo no quiero que Lucas pague nada, todo lo que el consuma va por cuenta de la casa, osea por mi cuenta.
Mi pecho se llena de orgullo, porque estaba pensando que no se iba a llenar tanto, y que sólo iban a venir solo cincuenta personas, pero esto supera cualquier pensamiento que tenía. Estoy vendiendo alucinógenos por no decir drogas, – y no, mi familia no vende drogas- esta idea fue mía, ya que a los adolescentes -la mayoría- les gusta consumir a veces estas cosas, en fin. Solo espero que Lucas no llegue a consumir eso, porque sino estás preparado puede con solo un trago de eso en tu bebida, embriagarte hasta perder tus sentidos.
02:43 AM
Salgo al primer piso a buscar a Lucas, le pregunto a uno de mis guardias y me responden que está en el segundo piso. Antes de subir paso a la barra y me tomo dos shots, ya con un poco de alcohol estoy preparada. Me demoré dos horas y medias en casa tratando de escoger algo bonito y que me gustara pero al final no encontré nada, -lo irónico es que tengo el armario lleno de ropa de toda clase- y decidí ir a una boutique y demoré como una hora y media, cuando llegué al club no pude salir inmediatamente porque, tenía que quedarme arreglando papeles y firmando acuerdos y cosas confidenciales.
Y con eso hacia esperar a Lucas, y darme cuenta sí de verdad me estaba esperando a mí.
A si que me animé y subí al segundo piso.
Busqué a Lucas y lo localicé en la pista de baile media vacia, -No tanto- porque casi todos estaban abajo.
Me dirijo hacia el y me limpio el sudor de las manos en mi short, todos se me quedan viendo pero yo solo lo quiero a él.
Cuando estoy a punto de tocar su hombro y decirle quién soy escucho las palabras que me romperían el corazón en mil pedazos.
—¿Quieres…? ¿Quieres ser mi novia? — ¿Escuchan eso? Es el sonido de mi corazón rompiéndose. La chica responde inmediatamente—Si.
No espere, ni me quedé a escuchar más, es suficiente.
Pensé en…¿Qué? ¿Reclamarle? Si ni siquiera me conoce ¿Darle una cachetada? Me tacharían de loca ¿Gritarle? Nunca hemos hablado.
Y ¿Lo peor? Aún con todo y el dolor que estoy sintiendo, me gusta. ¡Lo odio! Maldición.
No me doy cuenta de que me estoy limpiando las lagrimas con las manos y cuando choco con Jérome y siento un líquido encima de mí.
Asco.
Con el corazón roto, humillada, y con mi dignidad por el piso. En mi propio club.
((…)). ((…))
No he sabido nada de Lucas, pero cuando lo vuelva a ver me voy a escribir un par de cosas.
Porque él le rompió el corazón a Rosalie Clifford y eso no se va a quedar así.
((...)). ((...))