Carta 10

Querido, me estoy mudando

Pensé que un cambio de aires me haría sentir mejor.

Paso poco más de un año desde que mi hermana decidió irse, pero yo tendría que ir con ella porque obviamente, ella no puede viajar sola.

Estoy dejando mi trabajo, en estos últimos meses, hice muchas cosas que jamás imaginé: cometí errores que provocarían un despido inmediato, no llegaba a la hora y le gritaba a los clientes que me reclamaban cosas sin saber que habían pedido.

Odiaba ese lugar pero incluso sabiendo que iba a irme, no me pagarían mis salarios atrasados ni una recomendación escrita me darían. La jefa me dijo que era un buen elemento pero, ¿y qué? Eso no me iba a dar dinero.

Mi hermana no pudo pedirme que fuera con ella, cuando discutió con mis padres lo que estudiaría y en donde, ellos no querían dejarla. Estaban conscientes de que en algún momento, saldríamos de casa pero para ellos era mejor si salíamos casadas porque estábamos jóvenes para ir por nuestra cuenta.

Este año cumplo 25 años.

Desde el año pasado, comencé a sentirme tan mal que mi memoria ha sido afectada. Muchas cosas que hice en mi trabajo están poco claras, pero las lágrimas están allí. Al despedirme de mis clientes frecuentes, muchos lamentaban que decidiera irme pues mis trabajos eran buenos, rápidos y puntuales.

Mi hermano cumplió quince años y él recibió como regalo una laptop… Qué curioso, en algún momento pedí una para la universidad, pero no había dinero… Solo digo que el trato es distinto pues seamos honestos, él la usará para jugar videojuegos en línea y no para estudiar.

En fin, descubrí a dónde me voy a mudar y allí vive una amiga que te conoce bien. Ella sabe con lujos de detalles como me trataste y los mensajes que me enviaste. Ella me ha consolado bastante y aunque me escucha, ella también ha mencionado que si tu nombre vuelve a salir de mis labios, me golpeara.

Al lugar donde nos mudamos es el centro de la ciudad. No conozco ese sitio y cuando empezamos a recorrerlo, mi mami nos recordó que no estábamos de vacaciones y necesitamos empezar a trabajar pero para ayer.

Ella ha elegido un restaurante céntrico y yo me incliné por un taller de vestidos. Las personas que trabajan aquí son amables conmigo incluso la chica que trabaja en el mostrador coquetea conmigo.

No sé si soy bonita o ella está desesperada.

Mentí al decir que tenía novio solo para que me dejaran en paz, solo quiero ser colega de estos trabajadores no su amiga.

Estando en este lugar, estoy haciendo cosas que odio, pero necesito mi ingreso. Necesito dinero si quiero mudarme; mi cabeza me traicionó al exponer ese pensamiento en una plática familiar común. Obviamente, no estuvieron de acuerdo porque aparentemente estoy tan pendeja como para vivir sola que no es una opción.

Me sentí mal por no poder elegir lo que quiero para mi vida. Ellas no dejan de repetirme que no puedo quedarme en este sitio porque no me pueden visitar con frecuencia y al menos mi madre se sentiría mejor si no me fuera sola, pero mi hermana no quiere estar lejos de su madre por lo que quedarse más tiempo, no es conveniente. Ellas son muy apegadas.

Eligieron todo por mí, que después de ti, lamente todo lo que sucedió.