Querido Owen:
Al mirar tus ojos de un hermoso tono gris quedé completamente flechada por ti, no porque tengas un físico excepcional (que lo tienes) no porque tengas una voz tan hermosa y masculina. Me centré solo en tus ojos penetrantes que me decían a gritos que tenías un oscuro secreto.
Que me decían a gritos que tu ibas a ser mi nueva historia y comencé con estas palabras:
Querido Owen.
No te diré quien soy, tampoco te daré pistas sobre mí, mucho menos terminaré cada nota con un Att: El amor de tu vida, porque no lo soy y no diré que estoy enamorada de ti, pero si empezaré y terminaré cada carta con lo que salga de mi corazón.
Editado: 01.03.2023