Capitulo 6. Dan Ágora

    —¿Quien está ahí?

    —Maia, ¡qué has hecho! —Gritó por dentro. Suspiro profundo y salió de detrás del árbol con las manos temblorosas. —Perdona, no quería molestarte, ya me voy—Dijo alejándose más.

    —Espera—Maia se paró dónde estaba y Dan se acercó a ella. —¿Cómo te llamas?

    —De cerca impresiona todavía más—pensó. —Em… me llamo Maia. Encantada—sonrió nerviosa.

Cerca del bosque, en la casita donde hacían las reuniones, seguían sin saber qué hacer.

    —El problema no es tan grande, miradlo por otro lado, no tienen ningún…

    —A propósito, Fredi, ¿qué relación tienes con ellos? —Preguntó Sol, interrumpiéndolo.

    —¿Qué? E-es complicado de explicar.

    —No me tomes el pelo, tenemos derecho a saberlo ya que eso repercutirá en nosotros, así que suéltalo.

  Siguiendo con Maia, estaba en el jardín de la casa de Dan Ágora. —Dime Maia, ¿Qué haces aquí? Estas en mi jardín.

    —Lo sé y lo siento, debería irme—en ese preciso momento, una pelota de futbol cayó del cielo y chocó contra Dan. —Dan, ¿estás bien?

Sus gafas se cayeron y por auto reflejo, Dan se giró de repente—Estoy bien, vete. ¡Vete!

    —Oye, Dan—la pelota seguía ahí pero no le hicieron caso.

    —Eh dicho que te vayas—siguió dándole la espalda. Maia vio que no vio sus ojos en ningún momento y las gafas seguían en el suelo. Empezó a andar hacia la puerta.

    —Dan… Eres un eyepow ¿verdad? —se paró en seco. —Yo también lo soy.

  Dan se quedó sin palabras, no se giró y Maia siguió hablando. —Escucha—se acercó un poco más. —Ya me preguntaba porque llevabas gafas en cada una de las entrevistas, tenía mis sospechas, ¿Cuál es tu poder?

    —¿Eres un eyepow? ¿De qué tipo? —preguntó sin girarse.

    —¿De que tipo? ¿A qué te refieres?

    —¿Eres una eyepow normal o una eyepow oscura?

    —¿Cambiaría algo? —Dan se giró, mirándola con sus ojos violetas. —No soy una eyepow oscura, pero yo creo que no cambiaría nada, ellos quieren libertad, vivir su vida con su normalidad, con sus poderes.

    —Ellos han matado a personas normales, ahora cada vez se escucha más todo este tema y la gente está más nerviosa, ya no saben en quien confiar.

    —Nunca han confiado en nadie, en general la gente es muy egoísta, tanto los humanos como los eyepow, en eso nos parecemos mucho.

    —Yo, a ver, ¿qué poder tienes tú?

    —Tengo telequinesis. ¿y tú?

    —Precisión.

*PRECISION: Habilidad o poder con la capacidad de mejorar la puntería y la precisión en cualquier objeto.

    —Por eso apuntas tan bien, no fallas ni una porque utilizas tu poder.

    —¿Qué hay de malo en eso? —Dan cogió sus gafas del suelo y se las volvió a poner.

    —No hay nada de malo, eso es lo que quiero que pase, eyepow que utilicen su poder para su beneficio sin causar daño a nadie. ¿no es eso lo que haces? ¿no es eso lo que nos merecemos?

    —¿Que pretendes hacer?

    —En primer lugar, quiero hablar con los eyepow oscuros, me gustaría que cambiase la forma de hacer las cosas, asustando a la gente va a suponer más riesgo para la paz entre ellos y nosotros.

    —¿Y después?

    —Necesitare toda la ayuda posible para poner fin a esta guerra sin sentido.

    —Está bien, me lo pensare

    —Perfecto, con eso me basta—miró su móvil al escuchar un sonido de un mensaje. —Perdona, tengo que irme, mis amigas me esperan en casa. Cogeré la pelota seguro que alguien la estará buscando.

    —Claro. Nos vemos—Maia se fue, dejó la pelota en frente de la casa y se fue.

    —Ya estoy aquí—Entró en su piso y vio a dos amigas. —Vaya, cuánto tiempo sin veros—Estaban sentadas las cuatro. Kelly, Iris, Jessica y Anna.

    —Sí, unos cuantos meses—Dijo Anna riendo, Maia se sentó a su lado y se unió a la conversación.