- ¿Eso te dijo? —la expresión de Taehyung era de total sorpresa y emoción— Es decir, se le notaba bastante, pero no creí que fuera cierto, ya sabes —me dio un leve empujón— Ojo de loca no se equivoca.
- ¿Quieres bajar la voz? —el pelinegro trataba de tapar la boca de Taehyung, quien se reía de manera ruidosa, llamando la atención de toda la cafetería.
- El director se lo tenía bien guardado —continuaba molestando y riéndose.
- ¡Yah! —Jungkook empezó a sacudir el cuerpo del castaño— ¡Deja de hacerme pasar vergüenza!
- Ya, ya —dijo soltándose del agarre de su novio y sujetando su cabeza.
- ¿Sucede algo? —pregunto mirando la acción el pelinegro.
- Si, solo me he mareado con todas las sacudidas que me diste —dijo levantando el rostro.
La expresión de Jungkook se deformo cuando vio como un líquido rojo bajaba por la nariz de su pareja, con sus ojos abiertos de par en par, rápidamente tomo un pañuelo y lo puso en la nariz del pelirojo. La preocupación fue tanta que dejo de escuchar sonido alguno, las miradas estaban encima de aquella pareja, todos curiosos, queriendo saber que estaba sucediendo.
- Por Dios, Tae —dijo mirando con preocupación a su novio, quien parecía querer desmayarse en cualquier momento— No te atrevas a dormirte, te llevaré al hospital ¿sí? Todo va a estar bien —hablaba con la esperanza de que Taehyung le respondiera— Estoy aquí contigo, vamos para el hospital, no te preocupes.
- ¡Jungkook! —Hoseok llego a su lado agitado— ¿Qué sucedió?
- Hyung —fue lo único que pudo responder— ¿Puedes llevarme al hospital? Ayúdame, necesito a Namjoon hyung, para que nos lleve —el rostro del pelinegro era de terror total.
- Aquí estoy —el morocho llego rápidamente— Entren, y sujétense bien.
Hoseok abrió la puerta trasera y ayudo a Jungkook a acomodar el cuerpo inconsciente de Taehyung, todos estaban preocupados, pero ninguno se atrevió a hablar, la adrenalina estaba corriendo por el cuerpo de cada uno.
- Señora Kim, estamos dirigiéndonos al hospital, Taehyung se desmayó —Hoseok se había encargado de llamar a los padres de Tae— Si, Jungkook está con él —dijo dando una rápida mirada hacia los puestos de atrás— Nos vemos en unos minutos, no se demoré en llegar, por favor.
Jungkook sostenía el cuerpo de Tae con fuerza, tenía sangre en su camisa, pero aquello no le importaba lo más mínimo, el cuerpo en sus brazos empezaba a sentirse frio y su corazón empezó a palpitar con fuerza, no tenía idea de lo que estaba sucediendo, estaba aterrado.
* * *
Su mirada se encontraba en un punto fijo de la sala de espera, parecía que habían pasado horas desde que se habían llevado el cuerpo de Tae, no había querido separarse de él, pero lo detuvieron a la fuerza. Los padres de Taehyung, se encontraban en peor estado, no parecía haber sido un simple desmayo, no quería pensar en cosas que lo hicieran preocupar más, la sangre es escandalosa, había escuchado de una de las enfermeras, pero entonces ¿Por qué no despertaba?
A sus dos lados se encontraba Hoseok y Namjoon, en ningún momento lo habían dejado solo, los tres se encontraban en silencio, ningún se atrevía a decir una palabra.
- Quisiera saber que sucedió —JunHo, el padre de su novio se acercó— Taehyung estaba completamente bien en la mañana, no estaba mareado, dijo que se sentía bien.
- Estábamos en la cafetería, hablando de cosas triviales y entonces empezó a reír de manera escandalosa, todos empezaron a mirarnos por lo que empecé a sacudirlo, pero todo era en broma ¡Lo juro! —Jungkook hablaba torpemente— Luego dijo que se había mareado y la sangre empezó a bajar por su nariz, solo corrí hasta que Nam hyung nos trajo ¿Qué tiene Taehyung? —pregunto mirando a los padres de su novio.
- No estamos autorizados para decirte eso Jungkook —dijo suspirando— Será mejor que esperemos a que Tae despierte, deberían irse a casa —miro a los tres— Gracias por traer a mi hijo, se los agradezco de corazón.
- No me moveré de aquí hasta ver a Tae —Jungkook sentencio.
- Nosotros tampoco —fue el turno de Hoseok.
Namjoon se cruzó de brazos y se recostó en la silla, ninguno planeaba moverse y Jungkook agradecía el apoyo de sus amigos, que a pesar que habían pasado un mes distanciados, ahí se encontraban, a su lado, como siempre.
Luego de aquella conversación, el silencio volvió a reinar en la sala de espera, las enfermas iban y venían, las horas pasaban con lentitud y la ansiedad de Jungkook empezó a notarse, su pierna se movía rápidamente de arriba abajo, sujetaba sus manos con demasiada fuerza, no aguantaba la espera.
- ¿Cuándo nos dirán algo de Tae? —bruscamente se puso de pie— Llevamos horas aquí ¿Por qué no nos dicen nada?
- Cálmate Kook, deben estarle haciendo chequeos, sus padres ya fueron a preguntar.
- Es mejor que te sientes, Kook, no hagas una escena aquí —la mirada severa de su hyung, lo hizo sentir peor.
- ¿Y si es algo grave? —pregunto al borde del llanto— Eso no puede suceder, Taehyung siempre ha sido alguien de buena salud, no se enferma con facilidad, lo saben ¿cierto? —limpiaba las lágrimas que bajaban por sus mejillas con brusquedad.