La video llamada con Franchesca había finalizado, tuvo que ocupar su mente distrayéndose con alguna película de romance, eran sus favoritas después de todo. La imagen de Jungkook se le vino a la cabeza, los años habían hecho de lo suyo y el pelinegro se encontraba demasiado guapo. Dudaba que existiera una posibilidad de encontrarse nuevamente con él y esperaba que no sucediera, sino tendría que comprarle un boleto de avión para que pudiera venir a visitarlo.
La noche llego y con una buena ducha termino por irse a la cama, necesitaba visitar a su padre, saber si le dejarían salir mientras aprobaban la cirugía y quizá quedarse en su antiguo hogar por unos días.
* * *
Los pasillos del hospital estaban totalmente vacíos, Jimin se encontraba un poco confundido por el escenario donde se encontraba, en las paredes del pasillo se encontraban pegadas fotografías de la universidad donde había estudiado, mientras más avanzaba las fotografías habían cambiado a retratos de personas, hasta toparse con un pelinegro con ojitos de bambi, Jungkook.
Las fotografías resaltaban su hermosa sonrisa, sus ojos tenían un brillo especial y juro perderse en aquellos ojos.
Una foto en específico hizo que se detuviera, frente suyo había una fotografía suya. El Jimin universitario, delgado, de tez blanca y sonriente. No me consideraba una persona fotogénica, pero en aquel retrato, se veía bien. Sonreía tímidamente a la persona que le había fotografiado y fue difícil recordar la persona que sostenía aquella cámara.
- Soy buen fotógrafo ¿Cierto?
Una voz hizo que Jimin brincara en su sitio, se giró bruscamente hacia el dueño de aquella voz tan profunda. Paralizado fue poco, el pelinegro se quedó frente al pelirrojo que yacía frente suyo.
- ¿Taehyung?
- Hola Jimin —hablo sonriente.
Confundido se quedó en silencio ante aquel saludo, el sueño estaba siendo demasiado realista y eso empezaba a asustarle un poco. Miro la hermosa sonriente de Taehyung y sintió como su pecho se oprimió un poco.
- No entiendo que sucede —hablo nervioso el pelinegro.
- Quiero pedirte un enorme favor —el pelirrojo mantenía una sonrisa en su rostro— Quédate al lado de Kook.
* * *
Sus ojos se abrieron rápidamente y la luz del sol lastimo un poco sus ojos, debía decirle a su hyung que ponga cortinas más oscuras. Sin duda un sueño demasiado realista, no recordaba haber sido fotografiado en la universidad y menos por Taehyung, suspiro levantándose de la cama, eran las 7 de la mañana, tenía tiempo antes de ir al hospital.
Miro su celular por si tenía mensajes, solo Franchesca diciéndole que estaba viendo los vuelos para agendar un día, ella juraba que iba a ganar la apuesta. No respondió el mensaje, dejo el celular en la cama y se dirigió al baño. Había obtenido la costumbre de bañarse cuando recién se levantaba de la cama, así podía seguir su día sin pensar en tener que ducharse luego y le rendía mucho más el día o eso creía él.
- ¡Jiminie, estoy en casa! —la voz de su hyung se escuchó.
- ¡Estoy duchándome ya salgo! —grito en respuesta.
Rápidamente se puso una camisa y una sudadera del mismo color, el blanco siempre había sido su color y la mayoría de sus prendas eran de ese tono. Se miró al espejo un momento y al aprobar su rostro salió del baño.
- Traje el desayuno —su amigo se encontraba tomando café en el comedor— Ya está todo organizado, ven y acompáñame.
- ¿Cómo estuvo el trabajo? —pregunto acomodándose al lado del mayor.
- No me creerás lo que sucedió —Jin hablaba en tono serio.
- Me asustas…
- Me encontré a Namjoon en el restaurante —hablo mientras bebía un poco de café— La situación más incómoda de mi vida, Jiminie. Quería esconderme, salir del restaurante, pero no podía —explico luciendo agobiado— Lo tenía a unos metros, mirándome fijamente.
- Nunca me dijiste porque terminaron, te hacía mucha ilusión salir con él.
- Luego de la muerte de Taehyung, Nam cambio mucho —empezó a relatar— No fue el Kim Namjoon del que me enamore y a pesar de que cuando nos separamos seguía amándolo, no podía continuar con él. Fue ponerme a mi primero, sé que lo tuvo que pasar demasiado mal por la muerte de su amigo, alguien como Taehyung no era algo fácil de procesar, trate de entenderlo, Jiminie te juro que trate de apoyarlo, pero verlo perderse así mismo… No pude quedarme para ver cómo se destruía el mismo.
No supo que responderle a su hyung, quien miraba el desayuno frente a él con la mirada perdida. Ellos también se habían distanciado, Jin hyung era alguien que siempre se esforzaba por los demás, no podía imaginar todo lo que llego a sentir durante la ruptura, además de que había sido consciente de como paso de un crush a ser una pareja, creía que iban a durar muchos años juntos, pero tristemente no fue así.
- Siento mucho no haber estado ahí para ti, hyung.
- No —negó con una sonrisa triste— Debido a todo lo que empezó a suceder, me aleje de ti y terminamos perdiendo contacto por años. En parte fue mi culpa, me sentía agobiado por todos los problemas y alejarme fue un escape. Me siento bien ahora, es decir han pasado muchos años. Pero verlo ahí, mirándome con esa estúpida mirada, queriendo acercarse a mí, me dejo…