- Un reencuentro espectacular ¿No lo creen? —pregunto Yoongi sonriendo— No esperaba que mis ojos fueran corrompidos de tal manera —hablaba mirando mal a la pareja— Pero si Namjoon está feliz, yo también.
- No niegues que quieres llamar a Hobie para contarle el chisme —hable mirando al pálido— Eres un chismoso, hyung.
- ¿Cuándo Jungkook aprenderá a respetarme? —pregunto mirando a los demás— Yo he sido tan buen amigo, como un padre para el mocoso y solo soy un chismoso para él.
- Ahora es el quien hace escenas dramáticas —susurre hacia Jimin.
- ¡Te he escuchado!
- Esa era la idea, genio.
Mientras evitaba los golpes de Yoongi, mi mirada viajo hacia Nam, quien sostenía la mano de Jin como si fuera la cosa más preciada y entendía que para él lo fuera. Se alegraba demasiado por su amigo. Sabía cuán difícil había sido la ruptura y aguantarse las ganas de verle o llamarle fue totalmente doloroso. Algo que una vez llegue a mencionarle, fue que se alegrara que no tuviera que ir a un cementerio a verlo, quizá era algo que servía de consuelo, aunque no había dicho aquello hace algunos años. Jimin se encontraba en total silencio e incómodo, no había tenido la oportunidad de hablar, luego de ser interrumpidos por Yoongi y sus gritos dramáticos, pero el pelinegro se veía al borde del colapso.
- Debo contarle a Hobie las buenas noticias —Yoongi saco su celular y empezó a marcar el número de su novio— Se alegrará demasiado ¡Podemos incluso celebrar por la nueva pareja!
- He tenido suficiente con lo de anoche —Jimin por fin hablo— No creo que pueda beber también hoy.
- Eres un flojo —Yoongi se quejó.
- ¡Hyung!
- ¿Qué? —pregunto con falsa inocencia— Era un comentario simplemente, no seas chillón, Kookie.
- Minie no está acostumbrado a beber, menos por días consecutivos —Jin miro divertido al pelinegro— Pero podemos planear algo más tranquilo. Puedo invitarlos al restaurante donde trabajo, podemos tener una sala privada, sería algo un poco formal.
- ¿Porque mejor no hacemos algo en mi apartamento? Algunas cervezas, comida, películas, como los viejos tiempo —sugerí algo inseguro.
- Me gusta ese plan —Jimin sonrió a mi dirección.
- Llamare a Hobie para avisarle —hablo saliendo de la habitación.
- Creo que debería irme —un avergonzado Jimin hablo sin mirarme a los ojos— Gracias por ayudarme anoche, Jungkook.
- No fue nada —respondí de inmediato.
- Espérame Minie, nos vamos juntos.
Mientras la parejita se despedía, Jimin nuevamente parecía algo incómodo.
- Te espero en la salida —dijo saliendo de la habitación.
- Te acompaño.
Sin duda estaba demasiado incómodo. Caminábamos al lado del otro, pero ningúno se atrevía a hablar. Recordaba el día anterior, en su primer encuentro había sido algo grosero, aunque no era su intención, pero así resulto. Quería disculparse, pedirle que volvieran a empezar, después de todo 8 años sin verse, era demasiado. Pero las palabras no salían y empezaba a sentirse algo ansioso.
- Me alegro por Jin hyung —Jimin rompió el hielo— Ayer se notaba algo triste, sé que tendrá mucho que contarme —los labios de Jimin se curvearon en una hermosa sonrisa— Justo ayer me comentaba que se había reencontrado con Namjoon hyung y hoy ya están juntos de nuevo.
- ¿Se reencontraron? —pregunte confundido.
- Si, ayer en el restaurante donde trabaja Jin hyung —comento con alegría.
Sabia por su amigo que se veía constantemente con el rubio ¿Eso era mentira? Al parecer en todo este tiempo, Jin no sabía que Namjoon le observaba ¡Namjoon era un acosador!
Debía preguntarle luego los detalles a su amigo, no quería decir algo que lo perjudicara, por lo que solo asentí ante las palabras de Jimin.
- Le pediré los detalles a Nam luego, por cierto, Jimin —era mi oportunidad.
- ¿Si?
- Quería disculparme por cómo te traté cuando nos encontramos frente al hospital —dije nervioso— No era mi intención, no era un buen día, realmente lo siento.
- No puedo negar que me sorprendió y me enojo mucho como me trataste, pero está bien, te disculpo —respondió sonriéndome— ¿Empezamos de nuevo? —pregunto deteniendo sus pasos y girándose hacia mi dirección— Wow tanto tiempo sin verte, Jungkook ¿Cómo has estado?
Me reí ante su ocurrencia, traté de borrar la inmensa sonrisa en mi rostro, pero fue en vano. Park Jimin me ofrecía su mano, sonriente accedí. Tocarlo nuevamente, fue como volver al pasado. Fue como un corrientazo que recorrió todo mi cuerpo, me hizo sentir vivo nuevamente, sentir el suelo bajo mis pies, me sentí el joven Jeon Jungkook de la universidad. Tocar a Jimin, fue como regresar a mi antiguo yo y no podía evitar sentirme feliz por eso.
- He estado esforzándome —respondí siguiéndole el juego— He estado bien, ¿Qué hay de ti, Park Jimin? Vuelves luego de 8 largos años ¿Todo bien?
Nos sentamos en una de las mesas de la discoteca, se encontraba totalmente vacío y quizá podían aprovechar que se encontraban solos, el precioso pelinegro sonreía, una sonrisa perfecta que me tenía hipnotizado.