TU

Yo aprendí a reconocer el trabajo que he hecho estos últimos años. Aprendí a darme el lugar que me merezco, porque cuando tú no reconoces lo que haces y cuando mejoras la visión de tu persona, no tiendes a buscar atención, aceptación y la admiración de otros. Además de buscar por fuera un sentido de pertenencia, lo encontrarás en tu interior.

Muchas de las veces te darás cuenta de que solo importa tu opinión y sabrás que tú eres quien se tiene que aprobar.

Cuando te sientes de esta manera, el mundo se ve diferente, porque no tienes una visión negativa de ti mismo y también una visión diferente de las personas que te rodean.

Tus pensamientos dictan la realidad, así que cualquier cosa que veas en ti se esparcirá en tu vida. Así que, respetarte y amarte a ti mismo, aprenderás a tener una perspectiva más positiva y te ayudará a tener más optimismo.

Para la mayoría de la gente, el mundo es bastante aterrador, así que nos escondemos en nuestra zona de confort. Porque a veces no confiamos ni nos queremos lo suficiente para ver que tenemos todas las herramientas necesarias para crear una vida que nos haga sentir bien. Ya que las personas que se respetan a sí mismas, tienen confianza en sus habilidades y les encanta poner a prueba sus límites.

Las personas que tienen respeto a sí mismas tienden a tener mejor autoestima, lo que se traduce en más amor propio.