Quien soy

CAMBIOS

Cuando la gente está en una relación, ya sea con su pareja, familiares o amigos, hay personas que se aguantan los maltratos, las mentiras porque constantemente están pensando “esa persona va a cambiar”, “es solo por el momento”, “la rabia se le va a pasar”. Y una vez más, pensando que nuestra pareja va a cambiar, que la familia nos va a apoyar, que necesitamos cambiar para que no nos juzguen [correcto: no nos juzguen ni nos critiquen] o que nuestros amigos no nos critiquen.

Tuve relaciones muy pesadas en mi vida, porque no veía en serio la herida que tenía desde pequeña. Sentía que necesitaba ese amor de otros porque no lo tuve en el momento en que más lo necesitaba y aceptaba cualquier tipo de amor.

Al paso del tiempo, piensas en que todos merecemos una oportunidad, lo cual está bien porque somos seres humanos y cometemos errores. Pero cuando lo sabemos aceptar y aun así lo cambiamos demostrándolo con las acciones positivas. Pero cuando constantemente estás con alguien y esa persona sabe el daño que te está causando emocionalmente, pero no demuestra ningún cambio y prefiere llenarse de mentiras disculpándose y tomando acciones que causan mucho más dolor, eso no se debe perdonar y debemos de pensar más en nosotros.

Saber que hay muchas cosas que tú cambiaste como para que alguien aparezca en tu vida prometiéndote las estrellas, y después cuando te das cuenta de la persona que en realidad es, te lastima mucho. Y tú le ayudaste, cambiaste todo por esa persona, hiciste cosas que en ningún momento se te hubiera ocurrido hacer… Esa persona no merece que le sigas dando más oportunidades y más darle el puesto de dañar más de lo que ya ha hecho.

Yo me encerré en mi propio cubo y me llegué a repetir varias veces ¿Por qué me permito esto?

Esa fue la pregunta que me hice y que me llevó a un proceso de sanación. Empecé a entender que no podía cambiar a los demás, pero sí podía cambiarme a mí misma. Empecé a trabajar en mi autoestima, a poner límites y a exigir respeto. Y, poco a poco, empecé a salir del círculo vicioso. Recuerda que tú vales mucho y mereces ser tratado con amor y respeto.

También me di cuenta del daño que me estaba causando el permitir que esto me pasara. Llegué a reflexionar las veces necesarias y, después de todo, la pregunta era diferente.

 

 

 




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.