Capítulo 2.4

-Bien, hay dos canciones, When I Was Your Man (Cuando era tu hombre)

-¡Uy!-ella se ríe y yo me contagio

-No te rías de las desgracias ajenas

-Ok, ok, no me voy a convertir en una cupido burlona ¿cuál sería la otra canción?    

-Someone like you (Alguien como tu)

-Auch-sonreímos-Bien, yo ahora veo cual pongo-sonrío

-De acuerdo-ella se va hacia su mamá y le dice algo que hace que sonría, de repente la música se quita y ella habla en voz alta

-¡Chicos! Vengan-los chicos se miran entre ellos-Quiero que bailen una canción muy hermosa conmigo, vengan por favor-ellos caminan sonriendo un poco tímidos hasta el centro de la heladería y veo como Muñeca coloca Someone Like You, los chicos se quedan estáticos mirándose unos a otros y gracias a no sé qué fuerza sobrenatural veo a mis cobardes amigos agarrar a las chicas con dulzura y empezar a moverse con seducción, sonrío y miro a Ariadnna para guiñarle un ojo pero veo como Sebastian le pide una pieza, me giro y tomo mi baso de refresco, necesito impedir que se siga metiendo en mí antes de salir lastimado pero entonces una mano toca mi hombro y yo sonrío, seguro que es mamá pero me sorprendo al ver a Ariadnna tenderme una mano-¿Me concedes esta pieza?-sonrío un poco aceptando su mano, vamos al centro de las pista improvisada y ella abraza nuevamente mi cuello sin dejar de mirarme con una hermosa sonrisa y eso más que nada me pone nervioso

-¿Estás intentando darle celos?-ella sonríe mientras niega-¿Entonces por qué no aceptaste su invitación?

-Me faltó algo por contarte-la miro ahora curioso y ella acerca aún más nuestros cuerpos haciendo que su boca quede a la altura de mi oído-Jacob me dijo que no debemos aferrarnos a las cosas que no podemos lograr-escucho como traga fuertemente-Dijo que si esas cosas están destinadas a ser, lo serán en el momento adecuado-ambos sonreímos-Dijo que él había podido ser mi amigo porque me había dejado ir, al menos temporalmente, y yo en verdad no quiero perder la amistad de Sebas, así que al menos, por ahora, creo que es momento de dejarlo ir-sonrío

-Eres una persona muy valiente ¿sabes?-ella sonríe

-Somos tremendos cursis-me río

-Ey cupido, ser cursis no es malo

-Sí, lo que digas-rueda los ojos y ambos nos echamos a reír

-No te pega ese tono para nada nena-ella se ríe y veo por el borde de sus ojos cae una pequeña gotita de agua

-A ti tampoco te pega el Nena-me río
-Puede que no, pero te hizo reír-seco el lugar húmedo y sonrío

-Sé que debes estar cansado de lo mismo pero ¿por qué somos tan cobardes?-suspiro

-El miedo nos domina nena-ella se ríe al escuchar el último término y yo la hago girar entre mis brazos sacándole una hermosa risa y la acerco nuevamente sin dejar de movernos al ritmo de la canción que a los minutos termina, me abraza fuertemente y yo a ella, nos vamos separando cuando vemos lo que jamás pensé que pasaría, Diana y Efraín se besan y no es un beso de amigos en ningún sentido, pero lo más sorprendentes es que los demás siguen su ejemplo y Ariadnna y yo abrimos nuestras bocas sorprendidos

-¡¿Se están besando?!-susurra Ariadnna emocionada quien le hace una seña a su mamá de que vuelva a colocar la canción y esta se ríe mientras lo hace y soy consciente de que los familiares sonríen de oreja a oreja mirando la tierna escena

-Eres muy buena en tu trabajo Cupido- le quito un confeti del cabello y veo como me mira con una enorme sonrisa y aletea sus pestañas conscientemente muy rápido haciéndola más atractiva y pícara de lo que ya es y yo sonrío-Pero permíteme una corrección-me mira curiosa-Ellos no se están besando-me mira ahora confundida-Se están comiendo la boca

-¡Ian!-me da por el hombro suavemente haciendo que me ría por tener tanto pudor

-Perdón, perdón-ella se ríe sin poder evitarlo cuando siento una mano tocando mi hombro, me giro y veo a el señor Alaric

-Permíteme robártela unos minutos-sonrío mientras poso la mano de Ariadnna en la de su padre

-Con gusto señor-me retiro del centro de las miradas y me pongo en modo observador, veo a los chicos sonreír mientras no se dejan de besar a cada dos por tres, pero mi vista se concentra en Ariadnna quien baila entre risas con su padre que al parecer le está diciendo el modo correcto del baile pero ella niega y coloca sus manos abrazando el cuello de Alaric tal como hacía conmigo y yo solo puedo sonreír.

-Estabas muy feliz allí-me giro hacia mi hermana

-Eyy, no noté cuando llegaste-beso su mejilla y ella sonríe

-Fue hace poco, ¿y que hay con ella?-la miro confundido

-¿Qué hay de qué?

-Vamos Ian, ella te atrae-sonrío

-Es hermosa ¿a quién no le atraería?-ella resopla

-Sabes lo que quiero decir

-No tengo cabeza para pensar en algo más que una amistad hermana, ya mi cuota de decepciones amorosas se llenó y vaciarla tomará unos cuantos años-ella sonríe

-Algo similar decían ellos-dice señalando a los chicos que no se dejan de abrazar y yo la miro curioso-Frederick decía que se tenía que concentrar en ganar la beca de deporte, Alex decía que no dejaría su lado mujeriego por nada del mundo, Efraín intenta complacer los estándares de sus padres para ser alguien en un futuro, Erick que supuestamente está concentrado en sus estudios-ella se ríe-Todos se han escondido por años tras esas pobres excusas, y míralos ahora, hermanito no sé cuál sea tu excusa pero recuerda que en el corazón no se manda y te advierto que no te quedes dormido, algunas no esperan tanto como esas chicas-besa mi mejilla y se va, y yo me quedo pensando en todo lo que me dijo ¿piensa todo eso por dos bailes con una chica? Dios, debo aceptar que Ariadnna me resulta hermosa y una persona encantadora pero de ahí a decirme que ya estoy enamorado de ella como lo están mis amigos hay un buen tramo. Sonrío apartando esos pensamientos de mi mente, solo disfrutaré y me divertiré. El ambiente no deja de ser festivo y alegre, al poco los invitados se van y mamá me da una mochila y la miro curioso.