Capítulo 3.4

-Perdona por cómo te hablé, tú en verdad no solo eres una chica que ayudar, eres mi amiga también y no me gusta lastimar a nadie pero menos a mis amigos

-Pierde cuidado Ian, cuando el dolor nos sobrepasa decimos cosas hirientes a las personas que nos quieren-sonrío con tristeza-Sé de lo que te hablo

-Pero de cualquier modo

-Una vez le dije a mamá que ella tenía la culpa de estar postrada en cama-por fin posa sus ojos en los míos- Le exigí una explicación de porqué me tuvo que traer al mundo si era para morir en unos años-me mira sorprendido-Otra ocasión le dije que no coqueteara con el enfermero que se lo diría a papá

-Pero...-sonrío al notar su incomodidad

-Lo sé, es una idiotez, es solo ver a mi mamá con mi papá y saber que están perdidamente enamorados pero cuando uno siente dolor intenta que los demás sientan ese dolor pero a veces somos demasiado crueles-ambos suspiramos-Así que para la próxima que creas que el dolor está ganando la batalla acuérdate de estas palabras: Dañar no quitará tu dolor, abrazar lo eliminará completamente y si no tienes a quien abrazar, llama o ve a tu lugar seguro.

-¿Lugar seguro?-me mira confundido a lo que sonrío

-Miren-digo fingiendo sorpresa a una audiencia imaginaria- ¡Algo que Ian Brendi no sabe!-sonríe un poco, seco sus mejillas-Tu lugar seguro es esa persona con la que tu sientes que puedes ser completamente sincero sobre todos tus sentimientos y acciones y aun cuando estén mal sabes que esa persona no te juzgará, te apoyará y siempre te ayudará a ver la luz al final del túnel

-¿Cuál es tu lugar seguro?-sonrío y voy a responder pero el suelta una risa-Perdón, es una pregunta absurda, es Sebastian por supuesto-me río

-No-me mira sorprendido-Yo soy el lugar seguro de él, él puede contarme todo sobre sus dudas y problemas, sus relaciones pero yo no puedo decirle todo lo que siento-me encojo de hombros-Él no puede ser mi lugar seguro

-¿Y entonces quién es?

-Antes era Jacob-ambos suspiramos-Ahora es como una liga de mi psicóloga y mi madre, en ambas puedo confiar y sé que siempre me ayudarán a guiar mi camino pero tampoco puedo ser completamente sincera con ambas porque ambas me quieren demasiado, entonces, supongo que exactamente ahora, no tengo un lugar seguro-él sonríe

-Te propongo volverme tu lugar seguro si tú te vuelves el mío-me río

-De acuerdo-tomo su mano tendida y la jaloneó-Ya dejémonos de sensibilerismo y tomemos algo-se ríe mientras asiente, nos sentamos en el risco mientras merendamos en un silencio cómodo

-¿Ian quién haría algo como eso?

-Algún grupo de chicos pirados que odian la escuela-dice encogiéndose de hombros y lo miro dudosa-Seguro no pensaron que alguien podría resultar herido

-¿Y de dónde sacaron los animales? Son ratas y serpientes Ian, ese tipo de animales es difícil de encontrar en tanta cantidad como muestran esas fotos y en todo caso ¿para qué los soltarían en una escuela?

-En cuanto a la cantidad, no hay problema exactamente Ariadnna, por internet y en las pet shop se consigue de todo y en las cantidades que necesites, en cuanto a lo de la otra pregunta, tal vez solo eran unos chicos tontos que necesitaban unos días libres por asuntos personales y esa fue la única idea estúpida que se les pasó por su cabecita idiota-suspiro

-Sí, supongo que eso es

-Eso sí, no creo que la directora se quede de brazos cruzados, seguro encontrará a quiénes lo hicieron y si no lo logra te aseguro que no pasará una segunda vez

-¡Tan fuerte es la tal Tamara!

-Ujúm, muy fuerte, un día unos alumnos decidieron hacer una huelga porque la carne de las cafeterías sabía mal, Tamara cambió las carnes pero se prohibió que esos chicos volvieran a probar algo de la cafetería, supuestamente fue algo acordado entre las familias de los chicos y la directora pero bien sabes que detrás de eso se encuentra la amenaza y el chantaje

-Buff, suena horrible-suspira

-Y ese incidente no es nada-mi teléfono suena y veo que es mamá

-Hola mami

-¡Cielo! ¿Dónde estás? Vi en el teléfono lo que pasó en tu escuela

-Oo, estoy con Ian, me está enseñando un poco más de Denver

-Oo, es un alivio, ¿los chicos están bien?

-Si mami, todos están bien

-Qué alivio, ¿en verdad estás bien?

-Si mami, en verdad lo estoy

-Qué bueno-se escucha un suspiro de alivio-Bueno te dejo, cuídate por ahí amor

-Si mami por supuesto-cuelgo y miro a Ian-Se enteró de lo de la escuela

-Entonces mamá está a punt...-nos reímos cuando su celular suena, me río cuando mantiene una conversación casi por no decir idéntica a la mía, cuando cuelga me mira sonriendo-Cosas de mayores-sonreímos y cuando miro el teléfono me sorprendo al ver que son la una de la tarde

-¡Dios!

-¿Qué pasó?

-Son la una de la tarde-sonríe

-Sí, el tiempo aquí pasa muy rápido

-Pensé que era más temprano-sonríe

-¿Qué es lo que te gustaría conocer de Denver?-me río

-Bueno, yo tengo una lista aunque es de Jacob, quiero cumplirla-él sonríe

-Entonces que te gustaría cumplir primero de esa lista-sonrío

-Ir al cine y ver el Origen de los Guardianes o Titanic-sonríe

-¿Y cuál prefieres tú?-siento mi rostro calentarse

-¿Guardianes?-sonríe y levanta su palma a lo que lo miro confusa

-Ahora es cuando debes chocar las manos-me río mientras choco mi palma con la suya

-Se siente extraño-se ríe

-¿Nunca habías chocado palmas?

-Hace rato que no lo hacía

-Bien, creo que es hora de llevarte a casa, por la tarde debemos ir al cine-lo miro sorprendido

-¿Me vas a llevar hoy?

-Ujúm-sonrío al ver cómo me guiña un ojo, al poco estamos montados en la moto cuando su teléfono timbra-Hola mamá, ¿pasó algo?-me tenso al momento-Oh por supuesto, ya voy para allá

-¿Pasó algo malo?

-No, es solo que dos camareras faltaron y como mi hermana no está mi mamá necesita ayuda, te dejo en tu casa y voy a la mía