Quiero que Vivas!!!

Capítulo 4.3

-¿Qué hacen ustedes aquí?, esto es ilegal

-¿Y Ágatha dónde está?-Ariadnna mira hacia todos lados de la habitación pero no hay rastro de ella

-¿Quién?

-¡No te hagas el imbécil Raikol!-grito ya encolerizado, Ariadnna va hacia una puerta que debe ser el baño y detengo a Raikol que intenta impedir que ella entre, no se atreve ni a mover un músculo cuando lo amenazo con la mirada

-O dios, ven Ian-voy ante el tono urgente de Ariadnna y me alarmo al ver a mi hermana en el piso en un charco de sangre, intento tomarla en brazos pero Ariadnna me lo impide-No, no la puedes mover, debes llamar a la ambulancia y a la policía

-Ya, ya llamé a la ambulancia pero por favor no llamen a la policía, todo fue un accidente-mato con la mirada a Raikol y en ese momento sentimos las sirenas de la ambulancia

-Lo dejaré pasar pero solo porque fuiste mínimamente responsable y llamaste a la ambulancia

-Yo, yo, tengo una adicción con el sexo, es una enfermedad, perdona todo lo que le he hecho a Ágatha

-Si la respetas aunque sea un poco, la dejarás en paz-él asiente, llaman a la puerta y él va a abrir, muerdo mi labio frustrado, ¡se ve demasiado mal!

-Apártense por favor-los médicos empiezan a hacer lo suyo y yo paso mis manos por la cabeza

-Ven Ian, ven-Ariadnna me jala hacia ella-Estará bien, estará bien-yo la alejo, necesito que ella esté bien.

-¿A dónde se la llevan?

-¿Es familiar?

-Soy su hermano

-De acuerdo, puede ir en la ambulancia

-De acuerdo, Ariadnna, llama a mis padres por favor, no tengo ni el teléfono encima-digo mientras me subo rápidamente a la ambulancia
-Si por supuesto, tu ve y tranquilo, todo irá bien

-De acuerdo-los médicos le dicen el hospital apresuradamente y yo tomo la mano de mi hermana. Por favor, no puedes irte, por favor. Intento mantener la calma, ufff, ¿Cómo llegó a esto? ¿Qué carajos pasó? Llegamos al hospital

-Deberá ser operada, pero para eso necesitamos los permisos de sus guardianes

-Pero...

-Hijo ¿qué pasó?-mamá llega a mí como un rayo

-Mamá te explico después, ahora necesitas darle tu consentimiento para que la operen, se abrió la cabeza y parece que es urgente

-¡¿Qué?! Pero...

-Mamá, solo debes dar los permisos-ella mira a la doctora perdida y esta le indica que hacer, paso mis manos por la cabeza mientras veo como mis padres siguen a la camilla donde está Ágatha entrar en la sala de operación. No sé qué carajos pasa pero siento un escalofrío, miro hacia atrás y veo a, veo a Ariadnna, veo como toca sus codos mientras mira hacia el suelo. Ella vino, vino a pesar de lo mal que se siente cuando está en un maldito hospital, vino y está aquí a pesar de que se ve tan perdida, está aquí y yo no soporto estar más tiempo lejos de ella. Corro lo más rápido que puedo y la tomo entre mis brazos.

-Muchas gracias, muchas gracias por todo Ariadnna-la abrazo con fuerza y ella jadea

-Ian

-Mmm-huelo su cuello sin poder evitarlo

-No estoy respirando-la suelto un poco

-Perdón

-No, descuida, ¿estás bien?-siento su mano acariciar mi mejilla suavemente y eso más que otra cosa me sensibiliza

-Tengo miedo

-Eyy, no, todo irá bien ¿De acuerdo? ya verás-ella me sonríe tratando de animarme sin dejar de acariciar mi mejilla

-¿Te puedo pedir un favor

-Si, por supuesto-asiente sonriendo y sonrío un poco al ver como sus ojos brillan un poco

-Ve a casa y descansa, no quiero que pases más tiempo en un hospital

-No-ella me mira seria-No me voy a ir, yo, yo puedo soportarlo-me sonríe de repente-Soy valiente ¿recuerdas?

-Ariadnna no es necesario en serio, ya aquí estamos nosotros y... -ella me calla colocando su dedo índice sobre mis labios

-Pídeme otra cosa-la miro fijamente y veo en sus ojos que no va a cambiar de idea

-¿Puedes ir a ver cómo está mi mamá? Si voy yo seguro se va a poner a llorar y entonces yo también lloraré y...

-Ya, ya entendí, tú mientras siéntate un rato-me da un abrazo que me resulta muy corto y camina en su hermoso vestido blanco hasta mi mamá a quien envuelve entre sus brazos y está llora desconsolada en sus brazos

-Hijo ¿Qué fue lo que ocurrió?-miro a papá y suspiro contándole lo poco que sé, se lleva las manos a la cabeza frustrado

-Familiares de la señorita...-nos levantamos del tiro y vamos hacia la enfermera

-¿Cómo está mi hija?-pregunta mamá desesperada

-Señora la operación no se podrá llevar a cabo hasta que paguen al menos la mitad

-¿Y cuánto es el costo?-papá pregunta al ver que mamá se ha puesto a llorar en brazos de Ariadnna, la doctora nos dice un precio obsceno que nos hace tambalear en nuestros lugares y a mamá incrementar su llanto, no tenemos para pagar esa operación de aquí a unos cuantos años

-Descuide, el problema no es dinero-la enfermera mira a Ariadnna dudosa y está rueda los ojos-Haga que comiencen la operación, ahora el hospital recibirá el dinero, usted por lo pronto asegúrese que esa chica salga de ese salón de operaciones con vida ¿De acuerdo?-hasta la enfermera tembló ante el tono tan profundo de la voz de Ariadnna, asintió y se fue como había aparecido

-Oh dios ¿Qué vamos a hacer? No podemos permitirnos eso...-mamá exclama preocupada

-Ey, ya dije que no se preocuparan por eso-dijo Ariadnna seriamente-Debo hacer una llamada...

-No, no les pidas dinero a tus padres, sería una vergüenza-ella sonríe un poco

-No lo haré, este dinero es mío...

-Pero como...

-Luego hablamos, ahora debo hacer esa llamada-besa a mamá en la coronilla y se va, veo a papá abrazarla con fuerza y yo sigo a Ariadnna y no puedo evitar escuchar su conversación

-Nicolás, hola soy yo, cambié de opinión, ujúm, necesito que transfieras unas cifras a la cuenta de un hospital ¿Lo podrás hacer ahora? Es que es urgente, si por supuesto, muchas gracias ahora te paso un mensaje con los datos correspondientes-cuelga y veo como teclea algo rápidamente, termina y se gira para detenerse al toparse con mi mirada




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.