Capitulo 07

—¡Pasenme la maldita botella de cerveza! —gritó mi prima.

—¡Ya deja de tomar, Alice! —le regañó Lily.

En eso se han basado estos ultimos minutos, Lily y Alice peleando porque una quiere seguir bebiendo y la otra desea que ya se duerma, por otro lado, Ethan y Luke estaban que saltaban como locos mientras sostenian una botella de vodka en sus manos. Yo, yo estaba como tal aburrida sentada desde mi cómodo sofá, viendo como esos idiotas hacen estupideces, me reía por cada paso que daban, pero el único inconveniente que había era ese terrible olor a alcohol que estos tenian.

Suspiré.

—Esto es peor que salir de compras —gruñí, Lily se acercó a mi y refunfuñó. Vaya, ver a Lily sobria no es algo que estoy acostumbrada a ver, es más, hasta me da escalofríos.

—Odio tener que cuidar a unos críos —se quejó.

¿Cuidar? Ni siquiera los estaba viendo, esos idiotas estaban destrozando la casa.

—¿Críos? —observé a los borrachos —Alice ya es mayor de edad, Ethan y Luke igual, no hay críos solo tres idiotas que para su edad no saben tomar adecuadamente —sonrió con su mirada en la nada, ¿Qué estará pensando esa loca?

—Tienes razón, en fin, ¿Deseas un vasito? —preguntó mi queridísima hermana enseñandome un vaso de cerveza, el cual negué repetidas veces. ¿Acaso planea emborracharme y dejarme tirada como esos idiotas? Qué patético.

—No gracias.

No tengo pensado terminar borracha, aún peor sabiendo que hay tres borrachos más en mi casa, son capaz de romper todo lo que ven, y Lily, ella de seguro se irá a su habitación dejándonos en la sala, vaya mierda ¿no? Es increíble como estos no aprenden a tomar.

—¡Vamos!, no seas aburrida, un vasito no te hará nada —achiqué los ojos, ¿mi hermana intenta enborracharme?

—¿Qué planes, Lily? —enarqué una ceja.

Suspiró.

—Intento deshacerme de ustedes e ir a la pizzería más cercana —admitió. Qué plan más ... ¿Planeado?

—Que directa —susurré.

—Lo sé, bien. Entonces, ¿te unes a esos borrachos idiotas o me acompañas a por una pizza? —me levanté del sofa y caminé hasta la puerta, volteo y veo la expresión de Lily, la cuál mostraba confusión.

—Apurate, tengo hambre —ordené mientras la escuchaba gruñir.

—¡Yo debería estar diciendo eso! —protestó.

—¿Vienes o no? —abrí la puerta y salí de esta.

—¡Hey Emma! —la escuché gritar mientras salia de la casa e intentaba llegar a la distancia en la que yo me encontraba.

Suspiré.

—¿Por qué esos tontos no aprenden a tomar adecuadamente? —pregunté histérica —¿Es seguro dejarlos a esos tres solos? —me dirigí a Lily.

—Quizá ... —abrí mis ojos.

—¿Quizá? ¿Y si destrozan la casa? 

—Ellos limpian.

—Buen punto.

Caminábamos hasta la pizzería que quedaba a dos cuadras de nuestra casa, creo que fue un error dejar a esos a cargo de la casa, Lily dijo que si hacían algo, ellos hirían a limpiar, pero ¿seguro que ellos harán eso? No confío en esos, mucho peor de Ethan, ese idiota ni es capaz de .... ¡Demonios! ¡Aún falta realizar el maldito proyecto! ¡Maldición! ¿Cómo pude olvidarme de eso? Y ahora, ahora ya es muy tarde, mañana a temprana hora obligaré a ese imbécil.

—Llegamos —anunció Lily ingresando al lugar.

Todas las mesas se encontraban ocupadas, ¿Y saben por quiénes? Desgraciadamente, toda la facultad había venido casualmente a comer en este mismo lugar, a la misma hora, ¡Diablos! ¿Saben que significa eso? ¡Eso significa que ese maldito estúpido de Taylor se encontraba con ellos! Genial. Se nota que en el más allá, el universo me ama.

¡Al diablo con el jodido universo!

Nos sentamos en una mesa cerca de la salida y pedimos a la mesera la cena, estar en este lugar me incómoda, ya que siento constantemente la penetrante mirada de Taylor, ¿Acaso ese chico no podría ser más guapo? Es jodidamente atractivo y eso no ayuda a poder olvidarlo, ¡Joder! ¿Por qué tenías que aparecer en este momento?

—¿Emma, estás bien? —preguntó mi hermana, giré a verla encontrando su mirada con la mía, si, yo de estúpida no dejaba de observar a Taylor.

—Si, no pasa nada —hice una pausa —Aunque ... ¿Qué harías si ves a ese chico que te rompió el corazón y luego sale huyendo?

—¡Pues le daría su buena paliza!

—Genial —me acerqué hasta la mesa donde se encontraba Taylor, mientras sentía como Lily me miraba confundida, caminé hasta su asiento, no dejé pasar el hecho en el cuál los demás que se encontraban sentados con él me miraban fijamente, ignoré esas miradas y me acerqué a Taylor.

—¿Emma? Qué casua ... —no lo dejé terminar porque mi puño aterrizó en su nariz, todos abrieron su boca sorprendidos mientras me mataban con la mirada, especialmente, esas asquerosas porristas.

—¿Otra vez? ¡Estás loca, mujer! —gritó este sujetando su adolorida y roja nariz.

—Lo siento, necesitaba hacer eso —me dirigí a mi hermana y agarré la comida, la cuál ya había sido entregada a Lily. Salimos de ese lugar y caminábamos de regreso a casa mientras respiraba profundo, se sintió tan bien darle ese puñetazo a ese tipo, una parte de mi se liberó, pero de igual manera quiero darle otro golpe.

—¿Qué fue eso? —habló Lily.

—¿Eso? Tu dijiste que lo hiciera.

—¡No exactamente eso! Espera ¿Fue ese sujeto el que te rompió tu pequeño corazoncito? —rodé los ojos.

—No tiene caso seguir hablando de ese tipo.

—Vaya, hace dos años, ¿verdad? Ha cambiado mucho —apreté los puños.

Mi hermana conoció a Taylor, ya que lo llevaba a casa para realizar las tareas, al igual que para salir, este me venía a recoger, y pensar que todo fue una maldita broma manda todo a la mierda.

—Ya te dije que no sigas hablando de él —repetí.

—Claro, tienes razón. En fin de cuentas, ya tienes a Ethan, ¿verdad? —me atoré con mi propia saliva al mismo tiempo que sentía mis mejillas rojas, ¡Maldición! Esto va empeorando.