-¿Ethan?- pregunto un poco nerviosa
-El mismo- responde con una sonrisa brillante.
Me siento algo nerviosa al estar a su lado, no debería pero no puedo evitarlo. Es bastante guapo, es ese tipo de chico que viste con chaqueta de cuero y pantalones ajustados. ¿Será un chico malo como el de las novelas?, no puedo evitar mirar sus grandes tatuajes. Tiene uno en el brazo, es un reloj con un tipo de rosa, este cubre su brazo derecho. Otro en la mano izquierda, es un tipo de cruz. Por último tiene uno debajo de la oreja y es el que más me llama la atención, es una frase escrita en chino. Ethan es más alto que yo, y eso que yo lo soy bastante.
-¿Cómo estás, Lizzy Bennet?- pregunta resaltando mi nombre
-Bien, ¿A qué se debe eso?- pregunto con curiosidad
-¿El qué?- responde riendo
-Mi nombre, ¿Por qué lo dices así?- digo en un tono bastante desagradable pero no pude evitarlo
-Por Lizzy Bennet- lo miro confusa- ¿De orgullo y prejuicio?
-Oh, claro. ¿Lees?- le digo en un tono más sarcástico, es muy raro ver a chicos que lean novelas y sobre todo que lean novelas clásicas
-Claro que sí. De hecho, Orgullo y Prejuicio es una de mis favoritas. Ayer iba a hacer un comentario respecto a eso cuando dijiste tu nombre, pero no venía al caso.
Pongo los ojos en blanco y pregunto con enfado:
-Ah pero, ¿Preguntar si tengo novio si venía al caso?- me sonrojo al instante, <<no puedo creer que me pase esto ahora>>
-Pues, yo creo que sí Lizzy Bennet- se me acerca y me pregunta más bajo- ¿De quién fue la idea?
-De mi padre- respondo blanqueando los ojos- Es director de cine, lee muchas novelas, y una de esas es su favorita. Me gustaría decir que solo fue casualidad, pero no es así
-A mí me gusta, puedo ser tu Sr. Darcy- exclama con un poco de galanteo y se aleja hacia la entrada.
Bueno, esto me confirma que ayer sí estaba coqueteando. Me he acalorado y tengo las mejillas de color carmesí. Trato de relajarme un momento y me dirijo, otra vez, a la jodida terapia. No puedo creer que siga viniendo. Supongo que hoy contaremos más a fondo los que nos ocurrió y porqué estamos como estamos. He contado la historia tantas veces, a distintas personas, distintos profesionales, y aun así no siento que me haya desahogado por completo. Siempre hablo sobre mi hermana y su enfermedad, pero nunca he hablado sobre mi ex novio, Jeremy. Él fue realmente agresivo a lo largo de nuestra relación, siempre que hablábamos me decía una y otra vez que era mi culpa. Siempre se hizo la víctima, y todos le creyeron a él. Nunca tuve pruebas para demostrar lo contrario. Ha pasado más de un año de esto y me sigue atormentando. Mientras él tiene otra relación, mientras él es feliz; yo me hundo cada día más en la miseria.
Al entrar al salón en donde hacen la terapia veo menos personas que las del día de ayer, creo que tampoco les gustó estar acá. Pero, veo una nueva. Es bastante guapa, y está sentada al lado de Ethan. Mientras me siento lo más lejos posible de él, Isobel habla:
-Buenos días, me alegro de verlos de nuevo. Hoy hablaremos sobre esos traumas que nos persiguen. Quizás tome más tiempo pero da igual. Les recuerdo que este es su espacio y hablen todo lo que quiera, nosotros los escucharemos atentamente- asegura con una sonrisa- Creo que eres nueva- dice mirando a la chica que está al lado de Ethan, y esta asiente.- Me gustaría que te presentaras por favor.
-Hola- dice la chica un poco nerviosa- Me llamo Lexie Fell, tengo 20 años y estoy aquí porque mi hermana tiene un trastorno depresivo. Me gustaría saber ayudarla, sé que varios de aquí pasan por lo mismo, y disculpen si les molesto o les molestan mis palabras, pero de verdad quiero ayudar a mi hermana.-termina de hablar y está llorando desconsoladamente. Entiendo a Lexie, mi familia ha averiguado de muchas formas como ayudarme, pero esta es mi lucha, necesito aclarar mi mente sola, necesito poder decir algún día <<Lo logré, logre salir de ese agujero, y lo hice sola. Encontré mi propia luz>>, hasta el momento se me ha hecho demasiado difícil decir esas palabras, hay momentos en que me he rendido, o momentos en qué desearía apagar todo y salir de manera fácil, pero aún no he podido lograr aquello ya que nunca estoy sola en mi casa, siempre hay alguien para poder detenerme, lo he intentado y he estado a segundos se hacerlo, pero siempre me detiene algo, o alguien, y confío en que mi hermana me dice del más allá que aún no es el momento.
Han pasado unos largos minutos e Isobel trata de consolar a Lexie. Me agrada Lexie, es bonita o <<bonita>> le queda corto. Es pelirroja, que hace que sea bastante llamativa, es alta y delgada, tiene unas grandes curvas y se viste bastante bien.
-Muy bien, empezaremos la sesión de hoy- al oír esto, de inmediato me pongo nerviosa. Esto es una tortura. Una larga tortura, siento que nunca termina y se me hace más incómodo cuando miro a Ethan y él ya me está viendo. Creo que se viene una larga jornada.