-Desde el momento en que te vi pensé en lo perfecta que eres. La forma en que hablas de las cosas que te apasionan, la forma en que me miras, hacen que mi corazón se acelere.- Al oír a Ethan siento que esto no me puede estar pasando, desee tantas veces en que alguien de un buen corazón me dijera esas cosas y llegó el momento, llegó esa persona.
-Cuando te vi te odié- le digo riendo
-Lo sé- ríe conmigo
Nos quedamos bastante tiempo juntos mirando el atardecer, tomados de la mano y nuestros cuerpos juntos. Cuando anochece, con Ethan nos dirigimos hacia su coche. Es demasiado oscuro por aquí, no hay luces, sólo la de nuestros celulares. Me entra un poco de terror cuando veo a 2 vagabundos junto al coche de Ethan. Miro algo preocupada al hombre que me lleva de la mano, y siento su cuerpo tensarse junto a mío cuando él logra verlos.
-Disculpe- digo a uno de los vagabundos para que deje subirme lo más rápido posible al coche
-Hola, bonita- dice demasiado cerca de mí, y puedo oler el asqueroso whisky de su aliento. Al notar que no respondo, añade- ven conmigo- y me toma de un brazo demasiado fuerte.
Al sentir su mano apretando mi brazo me entra pánico, todo se detiene a mi alrededor y trato de buscar a Ethan por todos lados, hasta que noto que el otro vagabundo le golpea su bello rostro.
-¡NOOOOOOO!- es lo único que sale de mi boca
Siento como mi respiración se acelera, siento mis mejillas húmedas por las lágrimas y puedo notar como mi garganta se aprieta. Y sin darme cuenta un ataque de ansiedad viene a por mí. Me da terror ver a Ethan golpeado, trato de correr hacia él, trato de gritar pero no puedo. No logro reaccionar. Veo como gira mi alrededor y grito, grito todo lo que puedo. Han pasado minutos, mi garganta duele pero sigo gritando. Se me ha nublado la vista pero lo único que puedo hacer es gritar una y otra vez, hasta que no puedo ver nada y siento como caigo al suelo.