De promesas rotas y besos prohibidos

-Hey Maddie -escuché a Lucas mencionarme. - ¿Me acompañas después del trabajo por un helado?

-¿En serio? -le pregunte dudando - ¿no tienes que ir con Clary?

-Ella no está ahora, y Anne tiene tarea, quiero un helado y no quería ir solo, ¿vienes o no?

-Soy tu tercera opción -dije entrecerrando mis ojos, él se hizo el que pensaba y después me dijo

-Bueno, en realidad eres como la cuarta, olvide decir que Erick estudiaría con Anne y... se vería un poco extraño que saliera con Erick por un helado -dijo rascándose la nuca incómodamente, yo reí. 

-Bien, iré. -le contesté -Tu pagas. 

El rodó los ojos. 

-Bien yo pago.

***

-¿Recuerdas el día en el centro comercial en el que pensaron que eramos novios? -me dijo riendo y yo me sonroje un poco al recordarlo. 

-Lo recuerdo. -le dije ya riendo, escondiendo el ligero rubor que debía estar en mis mejillas - Que asco. 

Que mentirosa. 

-Jaja, yo siempre he sabido que te mueres por mi. 

-Oh por Dios, ya cállate. -le dije golpeando su hombro. -Además tienes novia

 -¿Lo ves? -reimos. -No puedes resistirte a mi. Recuerdas el día en el que te gané las carreritas y ... ¡oye aún me debes algo!

-¿Te recuerdo algo idiota? Fue el mismo día. 

-Cierto. 

-Eres un idiota. -sonreí

-Tu una niña tonta. -sonrió

Ambos nos quedamos en silencio mientras comíamos el helado. 

-Nunca me contaste en realidad lo que pasó con... Nick. Es decir se que te engaño es alguna manera pero... -Mi estómago se retorció al escuchar ese nombre, y varias imágenes de lo que había pasado pasaron por mi cabeza, cerré fuertemente los ojos, al notar como me puse tensa me dijo -lo siento, no debí preguntar. 

-Está todo bien. -el iba a decir algo y yo lo interrumpí. -Creo que puedo confiar en ti. 

Y le conté rompiendo mis barreras ante él, mostrando mis sentimientos,  presentándole lo que sufrí por un amor, haciéndome sentir tan frágil, sin poder evitar una que otra lágrima mientras le contaba mi triste historia de amor, él me abrazó, sentí su aliento en mi nuca y sus manos en mi cabello, oía su respiración y sentía el latir de su corazón en mi pecho, acariciaba mi cabello mientras me decía

-No llores más por ese estúpido que rompió tu corazón, ahora estoy aquí, no dejaré que te haga más daño. 

Irónico, por que el tenía a otra chica a su lado, una chica que no era yo. 

-¿lo prometes? -pensó un segundo en sus palabras.

-Claro niña tonta. 

****

Esta vez la reunión con mis amigos sería un poco diferente por que ni Anne ni Erick querían salir a ningún lado, así que propuse que nos viéramos en mi casa toda la tarde. 
Me sentía nerviosa de volver a ver a Lucas, no importaba donde o como lo encontrara, siempre lograba ponerme de nervios y hacerme sentir más que simples mariposas en el estomago. Me daba un poco de miedo darme cuenta de todo lo que el lograba causar en mi. Me arreglé casual, con ropa que me había comprado la última vez que obligué a Anne a ir conmigo al centro comercial, preparé un poco de dinero para pedir algo para comer y salí por algunas bebidas para antes de que llegaran mis amigos. 
Primero llegaron Anne y Erick y después llego Lucas, Clarissa no estaba en la ciudad y yo me sentía más cómoda así. 
Mi mejor amiga había hablado conmigo sobre mi gusto hacía Lucas, me dijo que si él era para mi, en algún momento nos encontraríamos. Un poco cursi, pero se que lo hace para protegerme. 
Todos querían pizza, así que eso fue lo que pedimos, jugamos un par de juegos de mesa entre risas y platicas, hasta que a Lucas se le ocurrió algo. 
-¿Y si jugamos Yo nunca nunca? 
Todos lo miramos y sonreímos, sonaba divertido.

-Excelente. -dije yo. - Iré por un poco de bebida.

-Mad, no creo que debas jugar con alcohol, tu nunca sabes medirte.

Lucas se rió junto con Erick. Sabia que Anne tenia un poco de razón, pero yo quería jugar.

-Puedo hacerlo Anne. -le aseguré y me dirigí a buscar un poco de licor. 
En los vasos serví un poco y empezamos a jugar.

-Bien yo empiezo. -dije- yo nunca nunca he besado a una mujer.

Lucas y Erick tomaron un trago. Esto iba a estar bueno.

-Yo nunca nunca he estado enamorado de dos personas a la vez. -dijo Anne.

Lucas bebió.

-Yo nunca nunca he tenido un amor imposible. -dijo Erick. 
Todos bebimos. Por supuesto. El alcohol en mi garganta me raspaba un poco, pero me gustaba su sabor.

-Yo nunca nunca he tenido sexo. -Esta vez fue Lucas el que dijo. 
Anne dejo el vaso en la mesa y yo dude entre tomar o no, no me gustaba recordarlo, aún así tome, sonrojandome un poco al bajar el vaso y tener la mirada de Lucas en mi. 
Unas rondas después podía sentir un ligero mareo, cada pregunta me resultaba muy graciosa, Anne, Erick y Lucas no se veían tan mal, me sentía muy estúpida por esto.