Radiactiva

CAPÍTULO 5

El virus M

― ¡Baja del vehículo!—me ordena uno de ellos.

Él parece ser el jefe, ya que porta una distintiva placa en la solapa de su traje, todos llevan puesto el mismo traje en color negro, pero solo él tiene una placa con  las iniciales AVM, no sé lo que significan esas siglas, no tiene una descripción. Me baje del auto con las manos en alto mientras cuatro de ellos me apuntan con sus armas, una vez que me baje el líder y otro sujeto comenzaron a registrar mi camioneta.

― ¿Qué fue lo que viste ahí atrás?—pregunto uno de los que me apuntan, no sé qué decir, a sí que comencé a inventar cosas esperando que no se den cuenta.

―Yo solo iba pasando, mire el desastre y ya, solo eso—dije nerviosa

—Tú tomaste algo de una de nuestras camionetas―ni siquiera me lo están preguntando, él sabe  lo que falta y que yo lo tengo, pero no se lo daré, así que tengo que improvisar algo.

—Está bien, yo tome un maletín de una de las camionetas― de inmediato el líder se acercó a mí y me puso su pistola en la frente.

— ¿Dónde está?—pregunto molesto.

―Está en el asiento de atrás—respondí con miedo a que me dispare

Con una seña le ordeno a uno de sus hombres que fuera por él, el hombre subió a la camioneta y reviso la parte trasera, encontró el maletín, lo saco y se lo mostró al jefe, él de un golpe lo arrojó al suelo.

—No juegues con migo niña, yo no hablo de provisiones, hablo de un... solo dime donde está el maletín más pequeño, o si no te matare ahora—amenazo

― ¿Hablas de uno más pequeño y plateado que estaba dentro de un gran cofre negro?—pregunte

— ¡Si! ¿Dónde está?—pregunto alterado

―Yo no lo tengo, cuando llegue ya había unos sujetos registrando todo y ellos tenían ese maletín y una video cámara también—le engañe

— ¿La video cámara tenía una letra a un costado?—pregunto

―Sí

— ¿A sí? ¿Qué letra era?—trato de probar si digo la verdad

―Una gran letra M—respondí con seguridad para que me crea

Él me mira fijamente, como analizando lo que dije y pensando en si es verdad.

— ¿Hacia dónde se fueron esos sujetos de los que hablas?

Sentí alivio cuando me dijo eso, significa que me creyó.

―No lo sé exactamente, pero se fueron por esta misma carretera, y más adelante hay una desviación, no sé qué ruta pudieron haber tomado—dije un poco más tranquila

Él les indico a los otros que regresen a las camionetas y que le avisen a los demás, de inmediato los hombres subieron a sus vehículos y los encendieron, pero el jefe sigue frente a mí, ya ha bajado el arma pero yo todavía siento algo miedo, luego dijo.

—La AVM te agradece la información, pero no toleramos a los ladrones y ese maletín que tomaste era nuestro—señalo al maletín que ahora está en el suelo, el cual yo había tomado también y pensaba llevarlo a casa

Luego me dio un golpe con el mango su arma, fue tan fuerte que me dejo inconsciente.

 

Cuando desperté la noche ya ha caído por completo y me encuentro sola en la carretera, me levanté con unas punzadas en la cabeza, seguramente por el golpe, revise rápidamente mi escondite y por suerte la video cámara y el estuche siguen ahí, pero el otro maletín con las provisiones no, esos malditos se lo llevaron.

Me subí a mi camioneta y me dirigí a casa, quiero llegar rápido, no me gusta mucho viajar de noche, me pongo muy nerviosa, por eso trato de llegar a casa temprano.

Después de una media hora al fin llegue a la desviación que lleva a mi casa, justo detrás de varios árboles, la casa es algo grande, tiene  dos  pisos y es completamente de madera, no es una casa normal parece que fue construida con el fin de una casa de campo que solo usan para las vacaciones, para mí es perfecta. Tiene  una gran cocina, un comedor, una sala de estar, un armario bajo las escaleras y un baño, todo esto en la primera planta, arriba tiene  tres  habitaciones, con baño cada una, otra sala de estar y lo que parece  una pequeña oficina con biblioteca, yo paso la mayor parte del tiempo en esta habitación leyendo, y a veces solo dando vueltas en la silla del escritorio.

Deje la camioneta justo al frente, luego entre, deje mi bolso en la sala, estoy  muy cansada y solo quiero  tomar una ducha y dormir, antes de subir cerré muy bien las puertas y ventanas para evitar que entren  las personas o uno que otro zombie, luego fui a la cocina, tome unas galletas que tenía guardadas y las comencé a comer, deje mi chaleco en el armario y luego subí a mi habitación, la mía es la más grande de todas y la más bonita, creo que ahí dormía una pareja de casados o algo así, entre a la ducha y comencé a relajarme mientras el agua cae por mi cuerpo, cuando salí me mire al espejo, siempre lo hago para ver qué cambios tengo cada día, pero solo vi lo de siempre, mi cabello mitad blanco y mitad café, mis ojos casi grises y todas mis cicatrices, en especial la de mi hombro izquierdo la cual ya ha sanado, pero se tornó de color morado, pero no como un moretón, y también se notan algunas venas que sobresalen de un color azul brillante, sé que no es normal, pero no puedo  hacer nada más que ocultarla.



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En el texto hay: zombies

Editado: 29.12.2018

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