Esperando lo peor

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Baek miraba muy asustado las noticias todas más noches, odiaba llegar al apartamento y estar solo, se sentía muy mal, empezaba a tener problemas de sueño, tres semanas habían pasado y sin tener noticias, no sabía absolutamente nada, eso lo hacía sentirse peor, habían noches que se encontraba llorando, el gobierno anunciaba que se preparaban para lo peor.

Así que decidió ir a casa de MinSeok por esas semanas restantes, después del entrenamiento podrían ir a visitar a sus familiares si la guerra no estaba en auge, así que cruzaban los dedos que no, entre los tres se habían compañía, se sentaban a ver las noticias, para Luhan era normal ver a su primo y amigo con los ojos llorosos... Aún no entendía porque Sehun había dejado sus pertenencias personales con él, si no estaban en nada!

Luhan no podía llorar por alguien que no sabía que eran específicamente, así que se limitó a centrarse en sus cosas, su padre le pidió que volviera a china, pero Luhan no quería dejar a MinSeok solo, así que le propuso ir a china por unos meses a lo que MinSeok se negó, el quería estar allí para estar al pendiente de JongDae, de ninguna manera podría irse.

Los padres de MinSeok trabajaban de lleno en Australia por lo que no regresarían y peor con rumores de guerra, trataron de llevarse a MinSeok pero este se negó.

A MinSeok le dio ansiedad empezó a comer en cualquier momento y a tener problemas estomacales normales con la ansiedad, así que solo era hidratarse y descansar.

Un plan muy arriesgado realizado por el gobierno...

Eran los 80 y la natalidad había descendido estrepitosamente, cada vez serían menos los nacimientos en Corea por lo tanto necesitaban una forma de cambiar eso, muchos científicos y farmacéuticos se unieron en la creación que fue la más viable y económica del estado...

Buscaron los mejores candidatos para dicho experimento, el perfil sencillo, niños de 10 años en adelante, debían ser de estatura menos que el promedio, facciones finas, delgados, y que se viesen de cierta forma un tanto delicados, al tener a los sujetos de experimentación los padres debían firmar, no fue algo difícil ya que se maquilló como un tratamiento rutinario, se le llamo experimento multiplicación, se le dio luz verde y se fueron seleccionando los candidatos tenía sus restricciones... No debían saber su nueva habilidad hasta que fuera enteramente necesario...

Al cumplirse la cuarta semana en la base A1 el equipo médico se desplegó nuevamente, dando paso también a los estudiantes de quinto año en medicina, debían de tomar muestras de sangre y hacer un segundo perfil de cada uno de los cadetes, también revisar heridas, ematoma, y alguna otra irregularidad, debían estar en óptimas condiciones para las dos semanas finales...

Todo iba medianamente normal, haciendo filas, siendo revisados... Hasta que los ojos de kyungsoo se perdieron por un momento, su corazón volvió a reconocer ese rostro, esos ojos, esa sonrisa única y especial...

Desde primaria, viendo siempre a lo lejos, espiando si es posible, también en secundaria se hizo normal seguirlo... Tuvieron una que otra conversación casual todo ese tiempo y es que Soo los nervios lo atacaban y fallaba terriblemente al momento de hablar con JongIn.

Le fue difícil despedirse de ese moreno aunque no eran amigos, ni conocidos lo había observado y perseguido por años, al mudarse sus padres tuvo que dejarlo ir, fue su primer amor y para terminar de destruir todo un amor unilateral, así que no lo culpen por haberse perdido otra vez en su mirada... Rogó a cada estrella que podía y hablo hasta con la luna que le concediera volver a verlo, y allí estaba luciendo un uniforme militar y no podía negar que se veía increíble.

El amigo y colega de kyungsoo tuvo que traerlo a la realidad de una vez, era el médico asignado a ese pequeño grupo de médicos y estudiantes avanzados de medicina...

Doc. Lay: Soo que sucede, deja de perder el tiempo sabes que no podemos estar aquí por tanto tiempo así que no te duermas y apresurate!

Soo: si, doctor en jefe, perdón es que vi a alguien conocido.

Doc. Lay: al caso... Wow dime es ese chico del cual hablas cuando estás ebrio?

Soo: eh... Seguiré trabajando doctor en jefe...

Eran varios cubículos donde estaban tomando muestras y también haciendo revisiones superficiales, si alguno llamaba la atención debía referirse a uno de los médicos, Kyung rogaba internamente que no le tocará Jong, y es que si en tantos años nunca pudo hablar con él, ahora como estudiante de medicina y un hombre responsable y seguro de si mismo, menos capacitado para hacerlo.

Su suerte estaba de su lado, bueno ese lado que anhelaba tenerlo cerca, la cortina se abrió, teniendo los tubos listos, la liga de presión y la jeringa, para cuando su vista se posó sobre el paciente, era él... Era él... Y estaba frente suyo, palideció por un momento, pero trato de verse profesional fallando un poco en el intento...

—kim JongIn, cadete código ******?

—si, doctor... Do!?

Escuchar su apellido en labios del moreno lo ponían mal, un pequeño temblor lo invadió, quizá palideció un poco porque al ver su reacción Jong se puso de pie rápidamente temiendo que se desmayase.

JongIn tenía un labio partido y una ceja cortada, fruto de un combate a cuerpo, también tenía unas cortadas en el brazo y unos morados en el costado, Kyung debía hacer cambio de vendaje, curación y también revisar el daño en el costado, pero no sabía si podría salir vivo de eso!

Para aliviar un poco el ambiente, Jong decidió hablar con el doctor que lo atendía, comprendía por el color de su uniforme que aún era estudiante de medicina...