"No hay malos sin razones", eso se puede creer en varios escenarios, pero si nos referíamos a RAZ HEIKS, no existían razones suficientes para tanta maldad.
Era el joven músico del violín, de la banda del colegio.
Ese sombrío chico llenaba de oscuridad aquella pequeña sala de música cada tarde, luego de la salida.
Sólo era él y una melodía raramente escalofriante.
El problema, es que nadie más notaba su apariencia inquietante. Sólo yo, de todas las personas en el colegio, era quien evitaba sentarse con él, en todo momento y lugar.
No podía ni pensar en topármelo en alguna calle solitaria 《varias veces tuve pesadillas de lo mismo》.
Siempre me pregunté porque sólo yo sabía que era un futuro asesino serial en potencia 《si es que no lo ha sido ya》.
Muchas veces creí, que tal vez estaba confundida y me imaginaba cosas, hasta fui al psicólogo por lo mismo.
A pesar de todo, no deje de notarlo a él, por sobre todas las personas.
Cuando él pasaba por los pasillos del colegio, era como ver a un muerto. No notaba expresiones o vida en su mirar.
Sinceramente, creo que nadie notaba lo sombrío en él por su atractivo, pero aún así, no había razones para no sospechar de él.
A lo mejor, yo seria igual que todos si no fuera porque es mi vecino desde que era un niño de 5 años.
En el año 2007, Raz llegó junto a sus padres a la casa de al lado. Yo estaba feliz, porque era muy enamoradisa, y aquel niño lucia bastante bien.
Poco tiempo duró mi enamoramiento, tenia 5 años, y aún así sabía cuando alejarme de alguien.
Aproximadamente en Febrero del 2007, osea a un mes de la llegada de aquel niño nuevo, yo me dirigía al patio de mi casa a buscar mi muñeca Alison. Cuando la encontré, vi a Raz con una mirada penetrante y con una concentración perturbadora hacia un vecino de nuestra edad, que vivía al otro lado de la calle. Raz no paraba de verlo mientras Josh jugaba con su hermano y con unos camioncitos.
Al principio, sólo lo encontré un poco extraño, pero para mí no fue más que ese momento.
Mi miedo comenzó a nacer, cuando a los dos días Mike, el hermano pequeño de Josh, había desaparecido.
Claro, al principio yo estaba triste por el pequeño Mike, porque no aparecía y todos lo estaban buscando, y se deducía que había sido secuestrado por alguien externo a la comunidad, ya que nosotros vivimos en un condominio bastante grande, pero lo suficiente seguro por la contratación de guardias a los alrededores. Por esta razón, el miedo era más grande, por que alguien externo se había llevado a un niño sin que nadie se diera cuenta.
La verdad, yo a esa edad, tenia derecho a no involucrarme y no pensar en hipótesis y seguir con mi vida luego, pero es que lamentablemente o afortunadamente 《aún no lo sé》vi algo, que me ha provocado pesadillas por años.
El día que los padres de Josh y Mike empezaron la búsqueda, yo vi como Raz traía en su mano el camioncito de Mike, y la forma en la que lo apretaba entre sus dedos, era tan inquietante que ni siquiera he podido olvidarlo luego de 12 años, más aún cuando Mike al día de hoy, sigue desaparecido.
Luego de aquel hecho, no he dejado de vigilarlo, día, tarde y noche 《Claro, sin que él pudiera notarme, nunca tan boba》, pero el miedo ha sido tanto, que ni siquiera celebro mi cumpleaños, por miedo a que él sea o el primero en llegar o el último en salir de mi casa.
Han sido años difíciles, pero si sigo viva, es porque he logrado descifrar, que la mejor forma de nunca alertar a un psicópata, es nunca decirle a nadie que creo que es un psicópata. La única persona que lo sabe soy yo, y no pienso decirle a alguien, por miedo a que aquella, se le escape y me ponga en aprietos.
Todos estos años he estado analizándolo, sé donde camina para llegar a casa o al colegio, conozco sus atajos y por ende, yo uso los opuestos.
Lo sé, todo suena como que aquí la psicopata soy yo, pero no, él es el extraño, aunque no lo parezca.
Nuestro colegio se llama "ROOWSTONE", tiene de primero básico a cuarto medio y hasta preescolar, y por ende, se pueden ver a chicos y chicas de todas las edades.
Ésto me causaba aún más miedo, no sabía que podría hacer Raz, contra niños indefensos, en sí, yo estoy en penúltimo año y aún así soy totalmente vulnerable a él.
Raz en el colegio no se molesta en aparentar ser normal, porque nadie lo nota. Por ejemplo, yo lo veo mirando fijamente a un chico de un curso inferior a él, talvez hasta por más de 10 minutos, y para mi eso es inquietante, pero ni aquel chico se da cuenta que es observado.
Yo me pregunto, ¿es aquel chico bobo? ¿O es que los chicos guapos nunca son considerados como psicópatas?
Hace una semana, Rose, una amiga desde el año pasado, me preguntó la razón de porqué no celebraba mi cumpleaños, por supuesto, tuve que mentirle. Además me mencionó, que tenía un amor platónico, y que era mi vecino, el famoso vecino 《el maldito vecino》. Estuve a segundos de golpearla, lo único que le pude decir, es que esperaba que se mantuviera como platónico.
Ella no me volvió hablar en todo el día, porque se ofendió conmigo por no apoyarla en su estupido romance.
Joder, como si no fuera de amigas ayudarte contra un psicopata.
Horrible fue mi sorpresa, cuando a la salida de clases aquel día, vi como Rose le entregaba una carta a Raz. No podía creer lo que veían mis ojos.
Lo primero que pensé fue en cómo tratar de moverme, porque en verdad que no podía mover ni un músculo.
Pequeña estupida de amiga que tenía.
Sacaba mejores calificaciones que yo, pero no podia escoger a un chico normal.
Mientras aumentaba mi vigilancia hacia Raz 《por obvias razones》, me percaté que un camión de mudanzas había llegado a la casa en donde vivía antes Josh, Mike y sus padres 《mis alarmas de problemas comenzó a sonar》.
Los vecinos nuevos, la dulce familia Tupp, incorporada por George (el padre), Sara (la madre), Lucas (el hijo de 18) y Valery (la hija de 17). Que horribles vecinos, tengo que decirlo, de seguro empeorarían mi vida con hijos de esas edades.
Editado: 15.04.2019