Me remuevo entre las sábanas al escuchar la alarma, que anuncia que es hora de levantarme, busco mi celular debajo de la almohada y en la mesa de noche aun medio dormida y al no encontrarlo me levanto rápido causándome un mareo, buscó el celular hasta que lo encuentro debajo de mi cama y apago la alarma que me estaba volviendo loca.
Me dispongo a ducharme y vestirme para ir a la universidad, peinó rápido mi cabello, cuando ya estoy lista solo ordeno las cosas en la mochila, incluyendo los trabajos y libros necesarios.
Bajo al comedor donde ya todos están listos, los chicos vestidos de traje para su trabajo y Jazmín y yo vestidas para la universidad, lo cual significa un pantalón y una camiseta.
—¡Buenos días! —saludo alegre.
—Buenos días —responden al mismo tiempo, sonrió y tomo mi lugar.
—¿Cómo les fue en su cita? —les pregunto a los chicos.
—Bien —responde Jazmín sonriendo, creo que recordando lo que pasó.
—Camily —me llama Ashton.
—¿Si? —pregunto.
—Recuérdame no volverte a pedir consejos amorosos —pide, yo hago un gesto de confusión.
—¿Disculpa? —digo al no entender de lo que me habla.
—¿Ella te dijo lo de los gatitos? —pregunta divertida Jazmín.
Y allí es donde entiendo que se refiere a la conversación de parecer un chico malo y luego uno bueno; eso hace que ponga una sonrisa divertida.
—No creí que tuvieras que recurrir a ese recurso —digo divertida —pero cuéntame ¿Qué sucedió? —pregunto y sonrió.
—Le dije exactamente lo que me dijiste, mientras ella bebía vino y eso hizo que se atorara y casi se ahogara —relata serio y como siempre yo, comienzo a reírme al imaginar la escena.
—¿Cómo se te ocurre pedirle consejos a Camily? —pregunta Jazmín —si ella nunca ha tenido una cita —comenta.
—¡Oye! —me defiendo —soy muy buena dando consejos amorosos, a parte, ya tienen una anécdota para contarles a sus hijos —comento.
—En eso tiene razón —habla por primera vez Connor —aunque el título de su anécdota sea "Casi mató a su madre en la primera cita" —dice riendo y todos los seguimos y comenzamos a reír también.
Nadie dice nada mientras vemos como nos sirven la comida, comienzo a comer tranquila, saboreando cada bocadillo, hasta que alguien que no disfruta de la paz y le gusta ver el mundo arder, habla.
—Creo que deberías entrenar más y comer menos Camily —comenta Ethan—porque ya pesas mucho.
—¡¿Te importa?! Porque en primero es mi cuerpo el que debo entrenar, no el tuyo, por lo tanto no te metas —digo enojada —y en segunda ¿En que te afecta que coma mucho? ¿Vas a cargarme o que? A demás tu no pagas lo que como —concluyó molesta.
—¡¿Por qué tienes que ser tan grosera?! Ahhh, pero si fuera Connor si te reirías ¿no? —dice molesto —de hecho la respuesta es sí para ambas acusaciones, porque pago parte de tu comida y por si no lo recuerdas yo te lleve a tu habitación ayer.
¡Mierda! Con razón no recordaba haberme acostado en mi cama y aun así desperté en mi habitación.
—¿Qué tiene que ver Connor en esto? A parte yo no te pedí que lo hicieras estaba muy cómoda en el sofá —digo tratando de defenderme, aunque creo que no funciona.
Ethan aprieta la mandíbula y sigue comiendo, yo solo bajo la cabeza y trato de seguir comiendo , ya que me da vergüenza ver que por mi culpa se haya creado un ambiente tan incómodo para los demás.
¿Cómo que Ethan paga lo que me como? Preferí no mencionar nada sobre el gasto porque no entiendo mucho de lo que se trata, pero pronto lo averiguare
—Camily, no podré llevarte hoy, sabes que entro hasta dentro de dos horas ¿verdad? Y necesito avanzar con un proyecto por lo tanto no podré ir a dejarte —avisa Jazmín.
—Esta bien —digo y sonrió.
—Puedes ir conmigo, tengo que ir a comprar algunas cosas —dice Connor.
—Claro, gracias —respondo.
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Así como Jazmín entró dos horas después de mi, también sale tarde, por lo tanto dicidí regresar a la manada caminado y así llevo una hora, estoy a casi llegando. Caminar me ayudó para reflexionar muchas cosas, una de ellas es que iré a hablar con Asthon para pertenecer oficialmente a su manada, pensé mucho esto puesto que le tengo mucho cariño a la manada Luz de Luna, ya que allí viven mis padres, algunos familiares, conocidos y también tengo recuerdos realmente lindos de mi niñez, así como malos y la mayoría involucran a Liam, el cual es el nuevo Alpha, y no quiero estar ahí cuando tenga a su lado a la nueva luna, no es que me importe, pero suelo ser muy emocional y se que me dolería.
También que en esta manada me siento feliz y la mayoría de las personas son amigables o al menos las pocas que he conocido, pues no salgo mucho.
Llega a casa como alguien que ha caminado durante una hora y bajo el sol, osea sudada, muy sonrojada y casi muerta, entro a la mansión y me apresuró a llegar a mi habitación y sin pensarlo entro a la ducha, cuando ya estoy bañándome no puedo evitar pensar que he sido un poco grosera con Ethan, pero él tiene la culpa, si él no hubiera sido tan grosero conmigo desde el principio yo no estaría a la defensiva siempre.
Si, la culpa es suya, sin duda alguna, pero ¿Debería disculparme? Porque después de todo el me trajo a mi habitación ¡Él me trajo a mi habitación! Que vergüenza ¿Y si venía roncando? Si, voy a disculparme para tener aunque sea un poco de paz.
Me disculpare luego de hablar con Ashton para cambiarme de manada.
Me visto y me dirijo al despacho de Ashton, paro cuando estoy frente a la puerta y toco suavemente.
—Adelante —escucho la voz de Ashton y los nervios comienzan a invadirme ¿Y si me dice que no? Abro la puerta y entró.
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Nota: ¡Holaaa! ¿Que les parece el capítulo? Me gustaría que me dieran comentarios constructivos o me dijeran en que puedo mejorar.