Reclamada l Trilogía reclamada, libro 1

Prefacio

—¿Pretendes que cancelemos nuestras tradiciones porque vendrá una niñata humana? —Isaiah golpeó tan fuerte la pequeña mesa de café que se rompió.

Ahron observó imperito hacia lo que quedó de la mesa por un momento, dejó escapar un leve suspiro, luego devolvió sus oscuros ojos verdes hacia Isaiah.

—Definitivamente a Helen le molestará eso.

Isaiah estuvo a punto de lanzarse sobre su cuñado para destrozarle la cara de tranquilidad que siempre le predecía, pero no podía hacerlo, su hermana lo destrozaría primero y el resto de la manada seguiría.

—Ya deja de actuar indiferente, Ahron—dijo Owen, el hermano mayor de Isaiah. Y a diferencia de Isaiah, estaba casi tan sereno como Ahron—. Sabes lo importante que son las próximas fechas para los más jóvenes de la manada…

—¡Él lo sabe! —exclamó Isaiah—. No puedo creer que lo hayan elegido a él antes que a mí para ser el…

Owen levantó de forma cortante la mano en dirección a su hermano menor, sin embargo, prosiguió hablando en un sutil tono conciliador con su cuñado Ahron:

—No tenemos ningún problema en darle la bienvenida a la chica, pero por más que lo intentemos será imposible ocultarle la verdad sobre nosotros. Así que considéralo, Ahron, porque no estoy de acuerdo con que los chicos paguen por una sola persona.

Los Schmit eran la familia que siempre llevó el liderazgo de la manada IronFang, era normal que dos hijos de apellido Schmit fueran alfas al mismo tiempo, como Owen y Helen Schmit. Pero desde hace 20 años dejaron de ser una manada convencional. Ahron Beckham, un humano que se había casado con Helen, se volvió el nuevo alfa gracias a su inteligencia y astucia.

Ahron era un buen hombre que se ganó el respeto y cariño de los lobos, y al casarse con Helen fue convertido en un ser inmortal.  

—Consideramos a tu sobrina-nieta como parte de nosotros—prosiguió Owen—, pero ella debe hacerlo con nosotros también. De cualquier forma, si tú lo hiciste, ella también podría hacerlo.

Ahron quería creer que sería sencillo, pero él mismo se sorprendió bastante cuando supo que los humanos no eran las únicas creaturas en el mundo, por poco se separa de Helen. Pero él era un hombre decidido, y descubrió que su amor por Helen era más fuerte que su miedo a lo desconocido. Por lo que se halló rezando para que Grace no reaccionara tan mal como él lo hizo.

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Espero les divierta volver a leer esta aventura entre Dominic y Grace  (•ө•)♡

 

 

 




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