He perdido el tiempo,
Dispuesto a buscar en la calle
Aquello que me faltaba y no hallé,
Pues en mi estaba el placer,
De encontrar lo que ansiaba,
Sin esperar más el tren,
Que dicen que pasa y no para
Y que convierte el hoy en ayer.
Ahora lo entiendo y sigo cayendo
Por pecar de tonto, de ingenuo,
En un lugar donde no es el mío
O eso me grito desde dentro,
Desde ese vacío que no encuentro
Y no lleno por estar descontento.
Todo es un puzzle que se arma
Y no amaina el placer de la palabra,
Más el lujo de la verdad,
De la persona sincera,
Es el que prevalece a mi lado
Mientras tantos otros se alejan.
El día a día es un trabalenguas,
De verdades inciertas,
De mentiras serenas,
De personas "cercanas" y ajenas
Que se van y llegan
Cuando no les interesas.
¿Qué será de mí?,
preguntaba a mi amigo,
Hace diez años en un frío pasillo.
Juntos seguiremos luchando,
Respondo ahora, en verso,
recordando,
Esta amistad de instituto
Que la vida me ha dado.