Camino por los pasillos que conforman la universidad en completo silencio, la tristeza se refleja en mi rostro y es casi imposible ocultarla, no me atrevo a saludar a nadie y a los que ya conozco siento que los molestaré si me acerco a ellos. Todos estudiamos medicina pero nos hace falta más tacto humano para darnos cuenta de quienes, al igual que yo, son cautivos dentro de sí mismos.
Apartada de todos, así me encuentro, y se me es imposible pensar en los Estados Unidos y sus "películas", esas donde siempre el protagonista es solitario y de muy pocos amigos, con aquella depresión por lo mismo, pero es que parece que nadie se da cuenta de lo que sucede.
No me acerco a hablar con nadie porque no confío en mi misma, y aunque estoy con personas me sigo sintiendo presa, es como si algo importante me hiciera falta y no entiendo que es, pensaba que eran mis amigos que me hacían falta, ellos se quedaron en otra zona de la universidad, pero hoy me di cuenta de que no es eso.
Me sentía sola por más que estaba con ellos, solamente uno de mis amigos nota mi tristeza y mis incomodidades, solo uno de ellos, ni siquiera IronMan nota que no me siento bien. A veces me pregunto si saltar al vacío sería la única manera de dejar de estar en cautiverio