Recuerdo... Nuestro amor

15 EMERGENCIAS

Se escuchó el disparo y todos en la casa se levantaron temiendo lo peor; Dana al no sentir a Alcides a su lado una angustia se instaló en su pecho, llegaron el grupo de guardaespaldas y se enfrentaron a los que estaban dentro de la casa y los hicieron huir; pero al encontrar a Alcides estaban muy tristes.

-. Traigan el carro debemos llevarlo a emergencias de inmediato - dijo el segundo al mando y todos se movilizaron, Dana vio la sangre y solo pudo llorar

-. Señorita por favor entre – uno de ellos intentó calmarla para que no viera lo ocurrido

-. Necesito ir con él – el chico no sabía que hacer

-. Debe cambiarse y al llevaremos con él – ella salió corriendo a su habitación

-. Dejen a un grupo cuidando a mis abuelos y hermanos y solo uno venga conmigo – ellos asintieron y ella fue con el joven que la había visto en ese momento, en el auto trataba de calmarse, pero eso le era imposible.

Llegaron y solo el dijeron que estaba en el quirófano, se sentó en la sala de espera rezando porque todo saliera bien y él volviera a su lado y entonces los recuerdos golpearon su mente

INICIO DE FLASHBACK

Estaba en la fiesta de las gemelas, compañeras de clases y un joven al invito a bailar, aunque en realidad era algo mayor que ella. Bailaron un mix que duró media hora y ella se sentía bien porque él sonreía y la miraba a ella a nadie más.

-. Al menos me vas a decir tu nombre – ella sonrió

-. Dana – le dijo al oído porque la música estaba muy alta

-. Encantado – le dio la mano y siguieron bailando, cerca de la una de la mañana ella ya debía retirarse y Alcides la detuvo en la entrada

-. Puedes darme tu número -  pidió y ellas se lo dio porque en realidad le había dado una buena impresión, se lo dicto y él le dio un beso en la mejilla de despedida.

El lunes durante el receso en el colegio se le acercaron las gemelas Sandra y Alejandra con una sonrisa extraña.

-. Amiga – la abrazaron y se sentaron junto a ella en el césped de la canchita de fulbito

-. Hola – mi voz fue dudosa

-. Conseguiste el número del chico más lindo de toda la fiesta – Dana se extrañó ya que le había dado su número; pero él nunca le escribió quizá solo era uno más para su colección

-. A eso – no quería recordar

-. Vamos, pásanos ese número – bien ahora ya entendía

-. Deberían pedírselo ustedes mismas porque al parecer ustedes lo conocen mejor que yo – ya sabía que ellas no casi la querían

-. Es que el simplemente nos evade – dijo Sandra desganada – solo cuando llamamos a un amigo en común es que él aparece en las reuniones

-. Lo lamento – ella suspiro – pero igual tampoco me ha escrito

-. En serio – ella sintió – por favor te prometemos que no lo vamos a molestar – se miraron ambas – mucho – sonrieron, Dana saco su celular

-. Revisen si gustan no me ha escrito así que de ningún modo tengo su número de celular – ellas sin pensarlo lo tomaron y revisaron, pero efectivamente no estaba

-. Si no te ha escrito – dijo Alejandra con tristeza – pero vimos que te pidió tu número y bailo solo contigo toda la noche

-. Quizá era par su colección – se encogió de hombros – me retiro – fue al salón porque ya estaba cerca de terminar el receso no iba a negar que esperaba que le escribiese, pero si no lo hacía daba lo mismo.

EN OTRO LADO

-. Alcides apresúrate – era Marco su socio y ex mejor amigo, él estaba por escribirle a la chica que conoció anoche en la fiesta era tan única no intentaba aparentar lo que no era.

-. Voy – se acomodó el saco y llego donde Marco y su abogado

-. Esta es nuestra propuesta- el abogado el dio uno papeles que el retiro de inmediato

-. Esta es la mía – él ofrecía el doble por la empresa ya que se había aliado con alguien peligroso, pero valía la pena… Marco tomó los papeles y al ver la cantidad sus ojos parecían querer salirse de sus orbitas

-. Acepto – dijo de inmediato a él nunca le importó el proyecto en realidad, solo lo hizo para estar cerca de la novia de su amigo y consiguió lo que quería

-.  Bien, firmemos – y así era dueño absoluto de su empresa y solo quedaba ver qué favor le pediría más adelante su benefactor.

Fue a su casa y se decidió a escribirle ya que era lunes y aun no era el medio día

<<Hola pequeña, soy Alcides tu pareja de baile de la fiesta del viernes>> envió el mensaje con duda porque cabía la posibilidad de asustarla, él le llevaba seis años o quizá más, espero, pero no había respuesta.

-. Idiota debe estar en el colegio – se golpeó la frente porque si era amiga de las gemelas aún estaba estudiando, se rio de sí mismo y espero revisando unos papeles para ver si le contestaba.

Cerca de la una de la tarde

<<Hola disculpa que recién te contesté estaba cambiándome para mis prácticas de fútbol>> esto lo tomó por sorpresa

<<Puedo ir a recogerte, quisiera hablar contigo de nuevo =)>> Dana sonrió porque él espera verla de nuevo

<<Terminó a las tres >> dejo su celular y fue a su entrenamiento

<<Entonces te veo fuera de tu colegio >> no recibió respuesta, pero se sentía como un chiquillo por volverla a ver

A las 2 y cincuenta Dana se encontraba duchándose y alisto su maletín deportivo, su mochila para salir; llevaba un polo de la institución una pantaloneta ceñida que dejaba ver sus muslos bien torneados y Alcides tuvo que tragar saliva ante la tentación porque se veía muy linda

-. Hola – ella llegó a su lado - ¿esperaste mucho?

-. No de echo acabo de llegar – eso era mentira porque estaba ya hace como diez minutos afuera esperándola

-. Bien – ella oreo su cabello ya que seguían cayendo gotas y eso haría que su brasier se transparentara en el polo que llevaba puesto - ¿De qué deseabas hablar conmigo?



#10053 en Novela romántica

En el texto hay: secuestro, guardaespaldas

Editado: 16.06.2024

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.