Recuerdos Oscuros

Capítulo #14 (Destino incierto)

-Fueron pocos los momentos que compartí al lado de claris, pero fueron momentos que se eternizan en mis recuerdos. Volví a abordar el tren, este salio de la estación comenzando su marcha, muchas cosas daban vueltas en mi cabeza. ¿Diablos hasta cuándo tendre que llevar la vida de un solitario errante? Me pregunté distraído, mirando pasar los transeúntes mientras el tren se alejaba de la estación.

 

-Las horas pasaban tranquilamente en su devenir del tiempo, pero esto duró poco algo más allá de lo explicable comenzó a inquietarme de repente; trate de no prestar atención a mí, instintivo aviso de radar extrasensorial. Miraba a las personas que viajaban conmigo en el mismo vagón se veían tranquilas y despreocupadas; eso debía ser, a la falta de percibir sucesos extraordinarios, como quisiera ser como ellos, corriente y ordinario.

 

-Fue poco lo que pude desistir de mirar hacia la última silla del vagón de atrás; habría sido mejor que no lo hubiera hecho. Entonces, miré y ahí estaba, esa presencia sin rostro, aterradora y sombría, sosteniendo en su mano derecha un rostro pálido, gelido que parecía una máscara de muerte, su mirada era fija inexpresiva, fria. Al fondo de ella se podían ver un cielo gris con montañas rodeadas por niebla vaporosa y oscuridad eterna, parecían castillos viejos y abandonados. La mano izquierda de este ser, estaba cubierta por espinas aceradas en sus puntas. Sin duda se trataba de una presencia fuerte y tenebrosa; era la primera vez que veía a un ser así de monstruoso.

 

-Era la primera vez que veía un ser con este poder monstruoso; ninguno excepto yo, parecía notar la presencia del sombrio personaje; la verdad no se me hacia raro que sólo yo pudiera ver, sentir su imponente y aplastante presencia. Podía oír que me llamaba entre susurros, el rostro en su mano derecha movía lentamente sus labios como si no pronunciara palabra alguna. Sus ojos me miraban fijamente causando una sensación estremecedora que me obligó a marchar hacia él. No quería seguir escuchando esa voz torturando mis sentidos, pero por alguna extraña razón no me podía zafar de su dominante presencia.

 

--Kane, insubordinado de las sombras, renegado de la muerte, terror de los demonios parásitos que invaden los cuerpos de los humanos incautos. Crees que podrás burlar la muerte y evitar tu juicio para siempre. ¿Quién eres? ¿Por qué me hablas así? -Mi nombre no importa soy un eterno, un ser que vigila desde las sobras desde tiempos inmemoriales, soy el encargado de resguardar los pactos y reglas ocultas. Tú has osado usar la invocación, apesar de saber que esta prohibida para los mortales…

 

--Kane, hasta tú debes saber que en toda naturaleza existente, hay límites y reglas que no se deben rebasar; sin esperar consecuencias nefastas para la existencia del ser mismo. Ustedes los humanos nunca comprenden y siempre están tratando de desatar fuerzas que no controlan ni conocen, y estos actos son los que, los conllevan a su perdición y ruina.
--Estás, maldito y tienes muchos enemigos, conspirando, susurrando oscuramente tu nombre. Debido a tus actos has puesto un alto precio a tu cabeza; hordas y hordas de seres sombríos se pelean para reclamar tu

alma.

 

--Mis ojos se mantenían abiertos contemplando la figura de aquella presencia aterradora que me hablaba sentado en su sillón, su vestimenta era vieja y maltrecha parecía transfigurada.

--Nose quien eres, pero si no estas aqui por mi cabeza ¿que quieres de mi? -que te muestres más sumiso y respetuoso de las fuerzas que rigen las naturalezas desconocidas.

 

--¿Qué quieres que me arrodille ante ti?
Si es eso lo que buscas pierdes tu tiempo jamás me doblegaré ante ti porque yo, soy un sobreviviente que pelea para vivir. -Arrogante humano sabes que esa forma de actuar será la que te lleve a tu ruina. No quiero que confundas mi condición, no soy un carroñero de almas, pero cuida tu actuar tu arrogancia podría hacerme cambiar de parecer. Kane, tú realidad es que estás, maldito el infierno, reclama tú, cabeza el cielo desaprueba tus métodos y condena lo que haces, no creo que pueda haber redención para tu alma; nunca olvides eso.

--El ente desapareció entre ese paisaje infernal que parecía sacado de pesadillas, dibujando una sonrisa malévola en el rostro que sostenía su mano; debo reconocer que esa había sido una de las pocas veces que, he vivido una experiencia tan aterradora que me hizo estremecer de temor.

 

--¡Rayos! Pero que carajos fue eso, esto cada vez se pone peor nunca había visto a un ente como él, ni siquiera estoy seguro si es enemigo o un ser neutral. Quizás, sólo sea un maldito mensajero del mismo lucifer; ah Sin importar que me espera más allá de la desobediencia de los pactos; no permitiré que ningún engendro salido de los infiernos me intimide. Escudriñare y desafiare las entrañas escabrosas de esas dimensiones desconocidas, hasta que se me revele o encuentre la forma de librarme de mi maldición...



#3662 en Detective
#1853 en Novela negra
#2747 en Paranormal

En el texto hay: mistisismo, misterio paranormal, mistica

Editado: 09.08.2020

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.