¿Es tu recuerdo lo que me está matando?
O tal vez ¿es lo que me mantiene viva?
Veo cada mañana tu sonrisa en mi mente,
imagino tu voz y siento tus manos acariciándome
lentamente. Así, con tu imagen dentro de mí,
me levanto y trato de vivir,
por eso creo que recordarte me llena de fuerza,
es por eso que en mi corazón permanecen atrapados
todos los instantes contigo. Congelo tu profunda mirada
y mantengo presente mi reflejo en ella, recuerdo tus manías,
te escribo todos los días esperando que estés donde
estés nunca me olvides. Recuerdo también el valor
con que un día me hiciste
prometer que aunque sin ti, viviría, vivo,
pero contigo en mi memoria, contigo en cada parte de
este corazón que se ha roto por tu adiós, contigo en
cada rincón de mi cuerpo y contigo hasta en los huesos.
Tú como el aire que respiro, eres el viento sutil que
mueve mis pestañas y es el recuerdo de tus besos
lo que en mi boca pone cada palabra.
Editado: 15.02.2019