Capitulo 57 (El Recuerdo Dorado)

---Flash Back---

Estaba aún en las alcantarillas, pensando en mil formas de lograr una cita con ella… Cuando escuche unos pasos y decidí seguirlos…El chico azabache, siguió los sonidos de esos pasos, que se detenían de vez en cuando y volvían a andar, pero parecía que en el mismo lugar, lo cual comenzaba a inquietarlo, pero no daría marcha atrás, así que saco su palo de hockey, que trae con el siempre, por precaución, en fin caminaba por ese túnel completamente oscuro, hasta que al dar la vuelta sabía que allí se encontraba la persona que hacia tal ruido.

Colocándose de espaldas contra la pared de ese lugar, escuchando con claridad, todo el sonido que provenía de detrás de él, estaba listo para enfrentarse cuando…

-Esto es muy molesto… (Suspiro) Deberé guardar distancia con ese tonto o… Descubrirá lo que siento… ¡¡¡ESTÚPIDO RAPHAEL!!! ¡¡¡¿POR QUÉ TIENES QUE SER TAN COOL?!!!-

-Él es el tipo de chico perfecto para mí… Es un imbécil… Pero… es un muy lindo imbécil… (Gruñe) Porque me gusta Raph… Ni siquiera yo lo entiendo-

-No es humano… Pero eso ni siquiera me importa… No cambia lo que siento. (Ríe suavemente) Debo estar loca ¿No?

Al escuchar esa voz pronunciando esas palabras, el chico se quedó petrificado, sabía perfectamente quien era la dueña de ese sonido tan melodioso para sus oídos, apretó su arma, con ambas manos, de igual forma su labio inferior fue mordido, para callarse lo que sentía, cerró los ojos, suspirando, estaba retrocediendo paso por paso con suavidad para no ser descubierto, pero como se sentía, no presto muy buena atención a su retirada, un charco de agua que pudo evitar antes, no se lo permitió en esta ocasión, al pisar sobre este hizo un sonido de chapoteo suave, pero suficiente para ser escuchado.

-¿Quién anda allí?- (Se escuchan los sonidos de sus guanteletes activándose).

Comienza a caminar en dirección de aquel ruido y lo que divisa, la dejo sin palabras.

Casey: (Levantando las manos con una sonrisa arrogante en su cara) Muy bien me has atrapado.

Yang: (Mirando al chico algo confundida, mientras guarda sus guanteletes) ¿Qué estás haciendo aquí?

Casey: (Sonríe y cruza sus brazos por detrás de su cabeza, caminando hacia ella) Solo estaba dando un paseo por las alcantarillas, es muy relajante, (Ríe) Si sabes evitar los lugares con un olor asqueroso.

Yang: (Mirándolo con cuestión) Gracias… Lo tendré en cuenta.

Casey: (Sonríe y la pasa de largo mirando el lugar) Y tu ¿Qué haces aquí? (Se gira a la chica) Aunque creo que tengo una idea.

El lugar era una conexión de varios caminos de alcantarillado, con muchas salidas, pero se notaba que tenía algunas quemaduras en el concreto o más bien manchas de fuego que quedaron, estaban por todos lados.

Yang: (Sonríe, posando sus manos en las caderas) Ja, solo vine a practicar un poco, en la guarida debo tener más cuidado, pero aquí puedo salirme un poco de control.

Casey: (Tocando una pared, con su mano derecha, dándole la espalda a la rubia) ¿Por qué tendrías que salirte tanto de control?

Yang: (Lo mira algo confundida y nerviosa, pero trataba de calmarse) ¿A qué te refieres?

Casey: (Sonríe dejando escapar una risita) Acaso… ¿Alguien te pone de nerviosa?

La rubia, lo mira con los ojos por completo abiertos, pues de sorpresa, sin duda este chico la había escuchado mientras hablaba de lo que sentía y preferiría no darle vueltas al asunto, siempre había sido completamente franca de lo que pensaba o sus emociones, aunque decirle al chico de banana roja sus sentimientos no era una opción viable, pero si este joven de cabellos negros y dentadura faltante de enfrente la oyó, no podría hacer nada más que hablara.

Yang: (Sonríe débilmente con la mirada fija en el) ¿Existe un inconveniente de que así sea?

Casey: (Sin girarse para verla, su mirada bajo, mordiéndose el labio inferior) No para nada… Solo que me hubiera gustado mucho que yo fuera quien te pusiera así…

Yang: (Suspira, cruzando sus brazos enfrente de sí) A veces las cosas no salen como uno espera… Pero no me disculpare por eso.

Casey: (Con la mirada perdida en el vacío) No quiero una disculpa tuya… Solo quiero saber…

Esta estando intrigada por lo que le fuera a decir, sin bajar la guardia, lo miraba inquiridoramente, con su posición de brazos cruzados, sabía perfectamente que siempre tiene que estar preparada para lo que sea que pase… Un corazón dolido es peligroso, cualquier cosa podría ocurrir.

Casey: (Apretado los puños, marcando un signo de tristeza, girándose hacia ella) ¿Por qué el?, ¿Por qué tuviste que enamorarte de Raphael?, ¿Por qué?

Yang: (Algo sorprendida, por el semblante de ese chico) Me escuchaste antes ¿Verdad?, Si fue así tienes tu respuesta.

Esta comienza a caminar lejos del joven, para salir de allí y no dar más explicaciones, pero es detenida por el propio chico impidiéndole el paso, se sorprendió por su velocidad y mas no darse cuenta, esos sentimientos le estaban afectando y la hacía sentirse molesta consigo misma.

Yang: (Lo mira con firmeza en los ojos) Casey… Apártate de mi camino.

Casey: (La encara con un rostro serio) No, hasta que me digas ¿Qué vistes en él? ¿Qué yo no tenga?

Yang: (Suspira, desviando la mirada) Es algo muy complicado… No tengo tiempo ni quiero explicar todo, así que mejor dejemos todo esto.

Casey: (La mira a los ojos enfrentándola) No, no es complicado… Solo dime, ¿Cómo él pudo conquistar tu corazón? Aun el siendo solo un mutante… (Desvía la mirada molesto, apretando los labios) Yo soy… Un humano, como tu… Y aun así escogiste a Raphael… (La mira directo a los ojos) ¡¡¡ÉL ES SOLO UN MUTANTE Y SIEMPRE LO SERÁ!!! (Enojado sin pensar sus palabras) ¡¡¡ÉL ES SOLO UN MONSTRUO QUE NO PUEDE SER DIGNO DE…

No consiguió terminar su afilado comentario cuando un golpe con gran fuerza se estrelló contra su cara, provocando que pierda el equilibrio un poco y retroceda para tratar de recuperarlo.