---Equipo distraer a Ruby---
Estando en el techo del Empire State, mirando todo la ciudad desde esa gran altura, los haca sentirse como los reyes del lugar o más bien una joven estaba muy emocionada por esa increíble sensación que su cuerpo poseía.
La pelicastaña, estaba mirando todo mientras su cuerpo se encontraba erguida en lo más alto, que parecía ser una entena lo único que le brindaba un soporte en el equilibrio central de su cuerpo.
Ruby: (Sonriendo, mirando hacia aquel punto azul que era el mar impresionante) Me sintió… ¡¡¡COMO LA REINA DEL MUNDO!!! (Estirando sus brazos hacia el cielo, brincando emocionada).
Leo: (Algo preocupado, estirando sus brazos hacia ella) Ten mucho cuidado, podrías caerte.
Ruby: (Mirándolo, con una sonrisa) ¿Qué dices? Si esto es maravilloso.
La chica seguía parada en aquel lugar, mientras brincaba y seguía su emoción sin ningún apoyo, pues ya había soltado el agarre con ese objeto que le ayudaba.
Por ese descuido, su equilibrio comenzó a ceder, al momento que una fuerte ráfaga de aire golpeo contra esa enorme torre de más de 86 pisos de alto, provocando que su agarre del techo cayera de golpe.
Haciendo que viera muy de cerca el suelo que se encontraba tantos metros de distancia. Pero una mano rápidamente la tomo del brazo, para que no cayera de esa altura. Llevándola con agilidad hacia él, sujetándola con fuerza y siendo aventados ambos hacia la antena que servía como pararrayos en días de lluvia eléctrica.
El chico mutante fue el que recibió el golpe en su caparazón y la cazadora, sobre su pecho se encontraba reposando, pues el miedo de caerse se hizo muy presente y más por su imprudencia, cuando se dio cuenta que estaba a salvo, levanto su mirada algo apenada buscando los ojos azules del quien le salvo la vida.
Ruby: (Algo agitado, mirando a Leo) Lo siento… Tenías razón… No debí haberme apresurado.
Leo: (Con una leve mueca de dolor) No te preocupes… Suele pasar cuando uno se emociona, Auch…
Ruby: (Preocupada, levantándose con cuidado) ¿Te… Te hiciste daño?
Leo: (Niega con la cabeza y sonriendo) Para nada, solo fue un golpe en el caparazón, eso es todo.
Ruby: (Agacha su mirada, muy apenada, apretando su labio) Te has lastimado… Por mi culpa… Lo siento. (Baja su mirada, con mucha tristeza en sus ojos).
Leo: (Le levanta el mentón para que pudieran verse a los ojos) Ey… Ey… Está bien, estoy muy bien. No me he hecho daño, solo fue un leve golpe. No pasa nada.
Ruby: (Se sonroja mucho al sentir las manos del mutante en su rostro) No quiero que nada te pase… Te hiciste daño por mí… Lo siento. (Ella traga algo de saliva y dejando salir un suspiro, lo abraza fuertemente posando su cabeza sobre el pecho otra vez). Perdóname…
Leo se sorprendió, al sentir el cálido cuerpo contrario contra el suyo, buscándolo, con tanta necesidad y aferrándose a él con suma fuerza, parecía que de verdad quisiera estar así de cerca con él. Rápidamente tomo la fuerza que necesitaba y le correspondió el abrazo, apretándola contra él y posando su mentón en la suave cabellera de ella.
Ese instante era uno de pura unión, sin decir palabras, solo compartiendo la compañía del otro, pues en un instante anterior, casi uno caía de ese gran edificio, cosa rara pues ella siendo cazadora, podría haber sobrevivido bien esa altura sin mucho daño, pero el de igual forma se preocupó por ella, pues no quería que se hiciera daño.
Siempre se lo había demostrado en cada instante, ella a veces eso le molestaba que la creyeran una frágil joven, pues era todo menos eso, siempre se lo repetía, pues quería ser capaz de proteger a quienes fuera que lo necesitaba como en esos viejos cuentos de hadas que le leían de pequeña.
Pero el hecho de que el quisiera cuidar de ella, no significaba que no la viera como alguien fuerte o de poca resistencia, no al contrario, sabía que admiraba su tenacidad, la forma de combate que ella tenía, siempre se lo decía y había una gran demostración.
Ella entendía que las cosas a veces son muy locas y difíciles y que por eso se necesitaba a apoyo de los demás, pero eso era algo que comprendía a la perfección.
¿Por qué le era tan difícil aceptar la ayuda de el? Y solo la ayuda de él. Pues no tenía dificultad para aceptar la de los demás.
Quería que él siempre la viera fuerte, independiente y muy tenas. Era tal vez un raciocinio muy extraño, pero esa era la verdad de ella.
Más sin embargo, cuando amas algo, de verdad, deseas cuidar de ello y protegerlo con toda tu vida, incluso si va en contra de la lógica racional.
Por eso el siempre buscaba cuidarla, protegerla de todo el mal que pudiera estar a su alrededor y la veía como un ser de cristal que se pudiera romper, la veía como su verdadero tesoro, que debía custodiar a toda costa sin importar el precio y lo había demostrado en tantas ocasiones antes. En algunos entrenamientos, en la guerra de la dimensión X y ahora aquí, en una caída tan poco probable que ella muriera.
Pero ella a veces, se mostraba demasiado terca a su modo, de siempre demostrar su fuerza física, que era testaruda y en ocasiones grosera, pues lo que quiera es ser reconocida como una cazadora fuerte.
Ruby, también deseaba proteger a Leo de lo que fuera que pasara, quiera cuidar de ese dulce mutante que le robo el corazón, ayudarlo en lo que fuera necesario, para que el pudiera seguir con vida, sin importar el precio.
Pero en muchas más ocasiones ella era la rescatada por él y solo una vez fue al revés, eso le ocasionó un leve conflicto en su interior.
Se dio cuenta que las veces que ella se puso en peligro fue por algo tonto, por su ingenuidad, por sus emociones y el por eso ponía su vida en peligro, se sentía mal por ese hecho, pues qué pasaría si el decidía sacrificar su vida por ella, solo para para que estuviera a salvo.
Se sintió muy mal de repente y sus lágrimas comenzaron a brotar suavemente, pidiéndole perdón más de una vez, pero el chico no comprendía el por qué lo estaba haciendo, le parecía que estaba exagerando un poco, las cosas no terminaron mal, estaban ambos bien, el solo recibió un leve golpe en el caparazón estaba acostumbrado a ello. Pero verla así, le hizo sentir mucha preocupación de repente.