Fui por Thiago a su departamento y es que mi jefe estaba duchándose, bueno, mejor dicho está acabando de ducharse, no he esperado mucho así que fuimos directo hacia el apartamento de la señora Pops, luego de que ellos hablaran acerca del viaje de la señora Pops y los inversionistas que el probablemente esté seguros me di cuenta que lo que yo en realidad estaba pensando con respecto a los ingredientes estaba completamente equivocada, no hacía nada, solo lo necesario que es la azúcar, la mantequilla y los huevos; Con cierta dificultad y en contra de mi voluntad nos tocó que ir a Walmart en busca de lo que necesitamos que es la mezcla y otras cosas, no tenía idea hasta que la señora Pops buscó todo y pues nos iba explicando a ambos para que era su función.
En estos momentos estamos ahora sí, esperando a que el pastel salga del horno desde hace rato está allí así que en cualquier momento el pastel estará listo, es de chocolate gracias a la petición de Thiago.
— Huele delicioso — musita Thiago cerca del horno con el cuidado de no quemarse.
— No le falta mucho, ya está elevándose — le sonríe.
— Estoy emocionado y hambriento — sonrió al ver a Thiago ansioso por comer pastel, es todo un infante sin duda alguna.
Luego de unos minutos después el pastel estaba listo, Thiago está colocando la mesa mientras que la señora Pops lleva los platos y yo los tenedores, pero antes de irme a sentar junto a ellos, recuerdo que no hay servilletas así que me dirijo hacia la cocina por ellas.
— amor, creo que hace faltan los vasos — agrando mis ojos un poco al escuchar a Thiago llamarme así, de inmediato él se da cuenta de que ya ha metido la pata y una mueca se dibuja en su rostro.
— ¿amor? — cuestiona la señora Pops muy confundida y a la vez muy emocionada por escuchar una explicación. — ¿qué está ocurriendo? — esboza una gran sonrisa.
Me acerco a la mesa con los vasos y las servilletas con mis mejillas ardiendo y probablemente con cierto color en ellas.
— Pues..., somos novios — confiesa Thiago con una sonrisa mirándome con orgullo. En ese momento la señora Pops gira su cabeza mirándome con el ceño fruncido exigiendo a su vez que confirmara lo que salía por la boca de Thiago.
— es cierto — musitó. — somos novios. — confirmó esta vez a lo que Thiago ha dicho, aún ella sin decir nada me pongo a deducir que esta es shock ante tal confesión y es que la entiendo porque es obvio y lógico que a la mujer que conoces que por años estuvo diciendo que se iba a quedar soltera sin un novio es una sorpresa completamente difícil de creer. No es común que llegue diciendo que tengo un novio, al fin, muy en el fondo sé que a las personas que les confesemos esto no lo creerán, apuesto $100 que creerán que es una broma.
— ¿es enserio? — eleva una ceja. — Aún no es el día de los inocentes, para semejante broma — ruedo los ojos frustrada y cansada ante su confusión.
— Señora Pops, es cierto — habla esta vez Thiago. — hace como dos días que somos novios..., bueno, tres — sonríe feliz.
— ¿ahora sí va a creernos? — pregunto. Veo como suelta un gran suspiro aún sin entender la magnitud de la noticia, está allí sentada sin ninguna expresión simplemente hundida en sus pensamientos hasta que una sonrisa aparece en su rostro reflejando la completa alegría y emoción al saber que esto es real y no se trata de una broma.
— ¡no puedo creer aun lo que me están confesando! — exclama. — ¡estoy muy feliz por ustedes, sabía muy en el fondo que ustedes terminarían juntos! — sonríe, esta vez ambos nos unimos a su acto y es que no es la única que se emociona al confesar esto, yo lo estoy la reacción de los demás es la que me emociona y me alienta a decirle al mundo que estoy saliendo con el hombre que es mi jefe, mi vecino y que en algún momento llego a ser mi cupido, sumándole a eso, es el mejor hombre que pudo llegar a mi vida, es sin duda un caballero, guapo, sexy y sumamente risueño. Increíble de creer pero eso es lo que más me gusta.
— Es la primera en enterarse — confiesa Thiago, eso causó nuevamente una sonrisa en nuestra vecina.
— Gracias por la confianza — musita. — entonces, con más razón hay que celebrar con un gran pedazo de pastel. — suelto una risa.
En tal punto me siento tan liberada al haber expresado mis sentimientos, ahora veo que no es para nada difícil hacerlo, jamás creí que esto ocurriría. Estoy feliz es un hecho.
Mañana tenemos trabajo, Thiago decidió que es mejor ir ya que tenemos cosas que hacer, es extraño porque muy en el fondo deseaba que dijera algo como, "al diablo el trabajo, estemos juntos hoy", pero estaba muy equivocada al esperar eso; le doy la razón, tanto como él y como yo tenemos muchas cosas que hacer. Al terminar la tarde, salimos del apartamento de la señora Pops y es aquí donde me pregunto, ¿ahora qué?, supongo que es muy obvia la respuesta.
— ¿te veo mañana? — pregunto con una sonrisa, el asiente de la misma manera.
— no creerás que te irás en bus — comenta. — Estaré aquí a las 6:30 — demanda, ladeo mi cabeza asintiendo a su orden, veo como se acerca hacia mí recargando sus manos sobre mi cintura atrayéndome con un leve empujó hacia el, por inercia recargo mis manos alrededor de su cuello, haciendo pequeñas caricias en su cabello.
— ¿entonces? — pregunto con cierto atisbo de picardía junto con una ceja alzada.
— ¿dime tú qué sigue? — es su turno de elevar una ceja, tomó aire antes de poder rozar nuestros labios y acortar la distancia que hacía entre ambos, me sorprende la manera en la que actuó cuando estoy con él, sé que él ama eso y siento que aveces le sorprende que sea yo la que tome la iniciativa de besarlo. La descripción perfecta de sus labios son inigualables, la suavidad en su roce me impide separarme es sin duda magnífico y enigmática en la que nuestros labios se mueven y el amor que trasmiten, no hace falta palabras entre nosotros sólo el sentido de tacto entre nuestros labios.