ADN licántropo
Angelic
🏹🏹🏹
En la noche bajo a escondidas a la cocina en busca de un bocadillo nocturno en la cena no había comido mucho pero ahora las tripas me suenan. Caminado delante de mi va mi fiel compañero Duque cubriendo mi boca con mi mano contengo una risa mientras bajo las escaleras de forma apresurada. Jugar al fútbol en la tarde sirvió para que desparejara mi mente y comenzara a ver las cosas sin tanto estrés. Todavía no había juntado el valor para hablar con Carter, pero debía hacerlo pronto no quiero lastimarlo de una forma peor.
Agudizando mis sentidos auditivos escucho el silencio de la casa y continúo caminando hacia la cocina donde enciendo la luz para prepararme un sándwich. En cuanto tengo todo listo guardo las cosas y antes de sentarme a comer saco una de las galletas de Duque.
- siéntate y te daré un premio - mi fiel amigo en cuanto vio la galleta se sentó moviendo la cola feliz, le entregue el premió que comenzó a comerlo acostado en el suelo de la cocina justo debajo de mis pies. Mordiendo el sándwich apoye mi espalda en el respaldo de la silla mirando el techo comencé a pensar en Carter lo que me diría si aceptaría mis palabras y luego paso por mi mente mi padre Steven hablar con el será todo un reto decirle que su alianza empresarial jamás se realizara puede que lo enoje un poco.
- te hace falta comer un buen trozo de carne - salto en mi sitio cuando giro a ver a Demian apoyado en el marco de la puerta con una sonrisa de lado. Hice una mueca de desagrado ante su comentario y continué comiendo mi sándwich de vegetales el entro y comenzó a sacar cosas de la heladera incluida carne. De forma rápida lo vi untar mayonesa en dos panes y comenzó a ponerle de todo a ese sándwich que cosa rara se me hizo agua la boca cuando le puso jamón y trocitos de pollo. - ¿quieres un poco? - aparte mi mirada cuando el pincho un trozo de pollo y comenzó a moverlo para tentarme a comer carne.
- no molestes con eso - muerdo de nuevo mi sándwich observando de reojo como se sienta a mi lado con su mega sándwich. ¿no entiendo como pude comer tanto? Duque bajo mis pies se estira para descansar mejor y viendo que Demian está a mi lado cierra sus ojos. Mi acompañante come en silencio dando grandes mordidas a su sándwich y ver la carne un poco roja me revuelve el estómago. Asqueada dejo mi sándwich y corro al lavado para vomitar lo poco de la cena y lo que comí del sándwich.
- ¿quieres un vaso con agua fría? ¿algo para el estómago? - pregunto Demian frotando mi espalda en círculos mientras yo escupía los últimos residuos ácidos de mi estómago. Abrí la canilla para que se lleve todo y enjuague mi boca para sacarme el gusto ácido de los jugos gástricos.
- estaré bien mi profesora me advirtió que me pasaría esto en algún momento - confesé comenzando a respirar con normalidad mientras serraba la canilla del lavado. Tome un trapo y algo de producto de limpieza para desinfectar el lavado y no le quede el olor a vomito.
- ¿Qué cosa te advirtió? - dejo de fregar para ver a Demian que estaba muy cerca de mi rostro, con mis mejillas rojas comencé a hablar.
- mi lado lobuno me está exigiendo carne y cada vez es más fuerte nosotras las cazadoras debemos ingerir carne porque nuestro ADN esta mezclado con el de los licántropos solo que no podemos cambiar como ustedes - agache la cabeza avergonzada ya que había confesado uno de los secretos más grandes de las cazadoras a uno de nuestros enemigos. Sé que Demian es mi mate, pero de todas formas estas cosas son secretas y no lo pueden saber nadie más que las cazadoras. - por favor no digas que te dije se supone que es un secreto de las cazadoras y ni siquiera sé por qué te lo confesé - muerdo mi mejilla interna por los nervios y la mano de Demian busca la mía entrelazándola y dejando un beso en mi hombro para luego susurrar en mi oído.
- no se le puedes ocultar nada a tu mate por que el amor verdadero muere con las mentiras y es por eso que no puedes tener secretos, así como yo no los podre tener contigo. Siempre que sientas que debes compartir algo con tu mate lo harás por que no resistirás ocultarle nada - su aliento chocando contra mi oreja hizo que cada parte de mi cuerpo se erizara por completo. Estaba tentada de girar y besarle, pero el gusto a vomito en mi boca freno cualquiera acción. - puedes hacer que esto que te está pasando acabe aquí me preocupas mi pequeña - sus palabras hicieron que sonriera como una tonta y asentí apoyando mi cabeza en su espalda.
- se cómo arreglar esto, pero tienes que prometer que no me presionaras y me dejaras ir a mi ritmo - rodeo mi cintura con sus fuertes brazos y escondiendo su cabeza en mi cuello comenzó a besarme. - por favor no... - estaba algo incomoda todavía no me adapto a esta nueva realidad y a pesar de que poco a poco mi relación con Carter tiende de un hilo yo todavía le quiero.
¿Cómo terminas una relación de cuatro años y que encima estas a punto de casarte?
Ese dilema es lo que me tiene pensando día y noche, haciéndome llorar por momentos por sentirme horrible por querer estar con Demian y no con Carter que siempre estuvo apoyándome cuando lo necesite. Y la que me metió en todo este lio no me habla la Luna me dejo sola desde el festival. Demian dice que volverá a hablarme cuando sea necesario que a veces a él también lo abandona durante mucho tiempo y luego regresa enseñándole las muchas cosas que aprendió cuando ella no le hablaba. Entiendo que debo esperar, pero yo no tengo tanta paciencia, mi naturaleza curiosa quiere saber ya que pasara que debo hacer.
#1588 en Fantasía
#948 en Personajes sobrenaturales
triangulo amoroso, amor complicado y doloroso, hombres lobo valius vampiros y red hood
Editado: 23.08.2019