El nivel del mar crece,
sus olas furiosas me ahorcan sin piedad
y no puedo recordar quien soy o donde estoy.
Solo recuerdo mi niñez
El tiempo me ignora,
no le importa lo que provoque
en mi vida y me siento mal
parado sobre el.
De las nubes llueven esquirlas de cielo,
la muerte impaciente se acerca más y más.
Estoy delirando, ya pienso en el suicidio.
¿Será esa la salida?
pero quizás sea el descanso.
¿Pero para que descansar?
Ya nada me importa, solo quiero flotar,
olvidarme, no responsabilizarme.
El mandato de los mayores me arrastra,
me succiona en el hoyo negro de lo normal.
***