Capítulo 6

La luz del sol se filtra por la ventana y me cubro con la sábanas ante la incomodidad que me genera ésta. Quiero dormir más, pero parece una misión imposible. De pronto, comienzo a escuchar unos villancicos muy cerca de aquí, por lo que me tapo los oídos con ambas almohadas; sin embargo, esto no funciona como quiero.

_ Si escucho otro villancico, creo que voy a explotar_ digo para mí mismo abriendo los ojos con cansancio, al percatarme de mi entorno me levanto de golpe dándome cuenta que no estoy en mi casa y no sé donde estoy.

Dada mi reacción tan brusca, comienzan a llegar a mí los recuerdos del día anterior_ el viaje, la tienda, el carro, Rud, sus abuelos, la fiesta_ luego de unos segundos y con la mente más clara, me levanto con pesadez para ver por la ventana de donde viene la música.

Al asomarme, observo en la casa de al lado a un grupo de aguinalderos cantando villancicos en la puerta de los vecinos. Al terminar, estos les entregan una canasta; el grupo se despide y cruza a la casa de enfrente, supongo que a hacer lo mismo.

Agotado física y mentalmente me alejo de la ventana, busco algo de ropa en el armario y voy al baño para realizar mis necesidades. Una vez listo, bajo a la cocina encontrando a todos sentados y desayunando.

_Buen día_ digo al entrar

_Buen día cariño, ¿cómo dormiste?_ dice Mary acercándose a mí y dándome un abrazo, el cual recibo con una mueca que disimulo de inmediato.

_Bien y ustedes.

_Yo dormí de maravilla_ contesta Nick, mientras que su esposa le sirve jugo

_Yo igual, después de todo lo que comí, ¿quién estaría infeliz?_ le sigue Rud con una taza de café en las manos.

_Y ¿estan emocionados por el juego de hoy?_ nos pregunta Nick

_Claro que sí, llevo todo el año esperando este día_ exclama Rud emocionada_ y tu Jas, también vendrás

_No, creo que…

_ Nada de eso muchacho, tienes que ir_ dice Mary llegando con un plato de comida y poniendola frente a mí_ Ahora coman para que no se les haga tarde_concluye con expresion seria.

_Yo que tú le hago caso_ dice Nick con una mirada cómplice para después lanzarle un beso a su esposa, la cual lo atrapa y coloca la mano en el corazón, luego se lo lanza de vuelta con una sonrisa.

_Bueno, si ustedes insisten_ carraspeo un poco incómodo con la escena, acto seguido me concentro en mi plato ante la risa ruidosa de Rud, quien contemplaba todo en silencio hasta hace unos segundos.

De pronto, antes de que pueda probar algo el timbre suena haciendo que todos dejen de hacer lo que hacian, se ponga de pie y caminen de prisa hasta la puerta dejandome confundido, al asomarme veo de que se trata por lo que me quedo en mi sitio y empiezo a comer unas galletas. Al sentir el sabor de estas, recuerdos del pasado nuevamente vienen a mi recordándome la comida de mi abuela, sin esperarlo los ojos se me aguan y tras pestañear un poco observo su imagen vívida frente a mi, sonriendo y acariciando mi mejilla. Al ver su gesto levanto la mano para tocarla pero….

_¡¡¡JAS VEN A VER!!!_ grita Rud, haciendome desviar la mirada por unos segundos, al volverla al frente mi abuela ya no está.

Rápidamente me limpio las lágrimas, me calmo un poco y me encamino hacia la puerta. Mientras camino voy escuchando nuevamente los villancicos de esta mañana.

_Ellos son el coro del pueblo_ Susurra Rud una vez llego hasta ella.

Al cabo de unos minutos, el grupo termina su interpretación y Nick les entrega un paquete envuelto en papel de regalo; posterior a esto entre los tres felicitan y agradecen al grupo. En ese momento, todos se voltean a verme, por lo que repito su acción y también los elojio; lo hago porque, aunque ya no me gustan los villancicos, tengo de admitir que cantan bien.

Concluido esto y tras su partida, todos regresamos a la cocina. De inmediato, mi mirada se posó en el asiento junto al que había estado sentado anteriormente, pero ya no había nada. Un poco decepcionado, terminé el desayuno y, junto a Rud, salimos deprisa hacia la plaza.

_Si todo el pueblo participa en esta actividad, ¿por qué tus abuelos no vienen?_ pregunto de pronto, luego de unos minutos de silencio.

_Mis abuelos forman parte del equipo que organiza la actividad, junto a otros ancianos, así que no tendría sentido que participen.

_Por eso querías darles las flores rojas

_Exacto

_Y ¿cómo exactamente es el juego?_ pregunto genuinamente interesado

_Eso lo descubrirás en unos minutos_ contesta con una sonrisa

_ Jasper, esperame aquí unos segundos, ya vuelvo_ suelta Rud para después salir corriendo en dirección opuesta a la que ibamos caminando.

Al verme solo, observo hacia los lados contemplando las casas y la vasta naturaleza que se encuentra en el contorno del pueblo.

_Tu debes ser nuevo_ escucho una voz por lo que me giro de inmediato, encontrando a 3 chicos y 3 chicas observarme de una forma que no podría describir con exactitud. Todos se ven jovenes y visten con colores apagados especialmente el que habló

_ Sí_ contesto escuetamente, no gustandome su actitud_ ¿nos conocemos?_ se me hace imposible preguntar al parecerme familiar, especialmente sus ojos azules.