Regalos de Navidad

Capítulo 9

_Mis conos se alzan, no cuelgan jamás,

mi corteza se agrieta con el pasar.

Doy cobijo a aves y sombra al viajero

y mi madera perfuma el taller del carpintero_ lee Rud en voz alta, mientras que su ceño se frunce levemente.

_Otro árbol_ dice Blitzer con sospecha, por lo que la miro sin entender

_Que extraño, nunca colocan dos pistas por el mismo lugar.

_Bueno, pero quizás este año cambiaron. ¿Por qué no mejor resolvemos el acertijo, vamos al lugar y terminamos con esto?_ les digo, aún con malestar por todo lo visto y sobre todo deseoso de terminar con todo esto.

_Sí, talvez_ dice Rud finalmente, pero con dudas.

_Puede ser un Cedro_ afirma Donner

_ El acertijo dice “Mis conos se alzan, no cuelgan jamás", y los conos del cedro cuelgan_ replica Blitzer

_Entonces es un abeto, los conos de estos apuntando hacia arriba, a medida que crecen su corteza lista se vuelve más gruesa y se agrieta, son frondosos por lo que son óptimos para ser el hábitat de aves, y tienen un aroma resinoso característico.

_Vaya eres todo un experto en arboles de navidad_ escucho una voz un tanto conocida, seguida de aplausos.

_Que hacen aquí_ suelta Blitzen a la defensiva, al observar a los extraños, quienes resultan ser dos chicas y un chico de los seis que ví en la mañana temprano.

_Solo íbamos de camino a buscar nuestro regalo_ contesta el chico de ojos azules, ante la cara de enojo de mis acompañantes.

_Ustedes no pertenecen aquí, por lo que tampoco pueden participar en este juego_ replica Rud sorprendiendome por su tono tan agresivo.

_¿De qué se conocen?_ suelto intrigado recibiendo la mirada de todos en mi persona.

_Digamos que somos amigos desde hace mucho, mucho tiempo_responde la chica de cabello gris, haciendo énfasis en el mucho.

_Por cierto Jasper; ¿estás bien?, te ves inquieto e intranquilo_ dice la otra chica que conforma el pequeño grupo.

_Sí, estoy bien_ respondo de prisa_ Rud, porque no seguimos la pista_ le digo dirigiendo mi mirada a ésta, pero ella solo observa a los otros tres chicos, que le devuelven la mirada con burla.

_Estoy de acuerdo con el pequeño Jas, vamos a seguir con la búsqueda_ dice el chico de ojos azules haciendome tensar al instante ante el diminutivo.

En segundos comienzo a recordar todo lo que aluciné o yo qué sé qué pasó. Todo era tan real y removió en mí tantas cosas; cosas que quería mantener enterradas, pero que ahora quieren salir para atormentarme y recordarme lo solo que me siento.

_ Ay, ya cállate Kasper_ escucho decir a Rud

_Ustedes no vendrán con nosotros_ afirma Blitzen también enojada

_Chicas, tranquilícense; estamos perdiendo tiempo valioso, ¿por qué no mejor vamos a buscar ese abeto _dice Donner tratando de calmar las aguas.

Tras decir esto, Rud fue la primera en reaccionar. Me tomó del brazo y me jaló junto a ella para encaminarnos hacia la parte del bosque donde hay abetos, seguidos por Donner, Blitzen y los otros tres.

_¿Estás bien?_ pregunta Rud, luego de unos minutos caminando.

_Sí_ miento mientras disimulo mi malestar mental.

Al cabo de unos minutos caminando en completo silencio, llegamos a nuestro destino. Donner propuso dividirnos en parejas para buscar, a lo que las chicas se negaron. Sin embargo, él insistió, por lo que al final aceptaron. De inmediato, Rud dijo que seríamos pareja y nos alejamos del grupo.

_Es cosa mía o no quieres que me acerque a ellos_ le pregunto tras unos minutos buscando entre los arboles.

_Estas en lo correcto_ contesta sin más

_Pero, ¿por qué?_ pregunto confudido

_ Solo diré que no son buenos para tí_ contesta tras un suspiro

_¿Cómo se llaman?_ pregunto de la nada, luego de unos segundos en silencio, por lo que ella me mira con los ojos entrecerrados_ ¿Qué?, solo es curiosidad

_ El de ojos azules se llama Kasper, la de cabello gris Yule y su otra acompañante Bef. Su grupo se compone de seis; la otra chica se llama Bel, el que tiene cabello verde Grin y el castaño Ebenezer.

_Perdona si soy indiscreto; pero, ¿por qué se odian?

_Digamos que ellos no son de aquí, y por eso son muy diferentes a nosotros en muchos sentidos.

_Creo que me dejaste igual que antes, pero no preguntaré más_ respondo dando por cerrado el tema al ver su malestia, la cual es casi palpable.

Tras más de media hora de búsqueda, no encontramos nada, por lo que cada vez cobra más fuerza la idea de abandonar todo esto. Rud, por su parte, ha estado muy seria desde que terminamos de hablar; en este momento me gustaría leer mentes para saber qué pasa por su cabeza, pero como no tengo ese poder, me conformo con perder el tiempo tratando de adivinar qué piensa, y por supuesto, estoy seguro que sus pensamientos se asocia a la presencia de cierto grupo. De repente, escucho a Blitzen gritar; sorprendido, me levanto de inmediato y observo a Rud, la cual me mira, confirmándome que ha oído lo mismo que yo. Rápidamente, ambos corremos hacia donde escuchamos el grito. Al llegar a donde está, nos observa muy enojada junto a Donner.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.