Amber Santorini
"El diablo es diablo, pero Lilith es la que domina el infierno."
Camino tomada del brazo de Dimitri y me maldigo internamente al no pensar que el bastardo de Adel iba a estar aquí, y junto con él están los otros mosqueteros y Tabita. Está ultima lleva un vestido plateado que deja ver el valle de sus pechos junto con la espalda descubierta y veo como los ojos de Dimitri la repasan una y otra vez, me cae bien, si lo hace, pero negocios son negocios, le hago una seña a mi acompañante y este la entiende al momento que me suelta la mano y se acerca como todo un dios griego, aunque parece más un demonio recién salido de cualquier circulo del infierno. Sonrío al ver como Tabita con sus ojos grises repasa varias veces el atuendo de mi amigo, pantalón negro y camisa blanca que deja ver el tatuaje de la corona y un lobo en el cuello. Reparo la sala buscando mi objetivo José Black el hermano menor de Adrien bueno menor por cuatro o cinco años creo, está entrando en sus treinta años, y joder como le favorecen los años a este hombre, ¿Lo malo? Es el papá de Aron y puede que me odie después de lo que estoy por hacer pero no es como que me importe mucho.
Siento una pesada mirada en mi espalda y no tengo que voltear para saber de quien proviene, seria muy estúpido de mi parte voltear, de un momento a otro la música clásica cambia por un reguetón de los de ahora Mora x Jhay Cortez - 512 y se que es producto de Tabita porque a los minutos la veo bailando muy pegadita con mi amigo y este no pierde tiempo al sujetarla por las caderas y restregarle la notoria erección en el trasero, Adel le va a cortar la polla. Me muevo por el salón al ritmo de la música, en ciertas partes muevo mi cuerpo como solo yo se hacerlo, soy el pecado, la lujuria y la tentación echa persona. Siento una mirada el doble de pesada que la de Adel y cuando volteo a ver noto los ojos de José repasándome de pies a cabeza, me muerdo el labio y me agacho un poco y vuelvo a subir pasando mis manos ligeramente por mis pechos al momento que la canción cambia a una más movida Perreo en la luna Sech, t. Justin Quiles, Lenny Taváres y Feid
«Cuando suena el dembow, wow-wow-wow-wow
Ella prende otro blunt, wow-wow-wow-wow
Con la nota encendi'a, yah (Encendi'a, yah)
Baila hasta el otro día, yah-yah-yah
Y cuando suena el dembow, wow-wow-wow-wow
Ella prende otro blunt, wow-wow-wow-wow
Con la nota encendi'a, yah (Encendi'a, yah)
Baila hasta el otro día, yah-yah-yah.»
Siento unas manos en mi cintura y al ver sobre mi hombro puedo notar al hombre que mueve sus cuerpo al ritmo del mío, empiezo a mover mis caderas al ritmo de la música, no me importa lo que digan de mi, o lo que hablan el hombre enviudo hace dos años, está soltero y hoy me lo pienso follar, la canción vuelve a cambiar y es perfecta, no me contengo de bailar como solo eh bailando en los clubs de Italia, enredo mis manos en su cuello y empiezo bajando lentamente y vuelvo a subir rosando su entrepierna con mi trasero notando la erección que se empieza a formar, sonrió y sigo con mi baile, me doy vuelta y lo que me recibe es una mirada cargada de lujuria como la de su sobrino la única diferencia es que su piel está limpia de tinta, y en su labio inferior en cada esquina reposa un arito de metal, muerdo mi labio al imaginar como se sentirían esos dos aritos en mi coño, paso mi lengua por mis labio y su mirada se desvía hacia ellos y siento mi móvil vibrar, mi familia llego y es hora del show, estampo mis labios con los suyo no sintiendo una sino dos miradas que me taladran la nuca y se quienes son nos hago dar la vuelta poniendo a José de espaldas a su hijo y sobrino, le regalo una mirada de burla a Adel dejándole claro mi cometido «Me metiste mano, pero la polla que hoy me llena será la de tu tío.» Siento como aprieta mi trasero cuando nos separamos y siento la dureza contra mi abdomen, paso mi lengua por su labio inferior al momento que el tira de mi mano escaleras arriba y mi móvil vibra y lo saco viendo el mensaje de Dimitri:
Dimitri: Tienes cinco minutos si no quieres que tus hombres te vean en pelota. :v
Yo: Maldito idiota, mejor follate a Tabita y procura hacer bien lo que te dije.
Dimitri: Que se vea su cara y el tatuaje de tu familia, captado Reina.
Guardo el móvil cuando siento como me jalan y me meten en una habitación, cierra con pestillo y me tira a la cama, se quita el saco y la camisa tirandola por algún lado de la habitación , bajo los tirantes de mi vestido dándole vía libre a mis pechos para que el se prenda como un poseso, siento su lengua haciendo circulos en mis pezones duros como roca, se lo saca de la boca y sopla causando un espasmo en mi vientre hace lo mismo con el otro y siento como succiona.
¿¡UN MALDITO CHUPÓ!? Me abstengo de apartarlo porque a corrido mi vestido arremolinándolo en mi cintura dejando a la vista mis bragas, de por si ya mojadas por el beso de su sobrino y ahora por el, una sonrisa se extiende en mi rostro al verlo, arranca de un tirón mi ligero y no me molesto la lujuria me está nublando el juicio, mis bragas son arrancadas al momento que me sopla en el coño y gimo bajito, me pasa la lengua por mi entrada y me arqueo antes ese tacto, muerde mi clítoris sin hacerme daño y el gemido que sale de mi garganta se escucho hasta en china, chupa con su lengua todo mi coño mientras sus dedos juegan con mi clítoris que no me importa sonar desesperada al momento que lo jalo por el pelo y gruñe y eso solo me enciende más.
—Sera mejor que metas tu polla en mi coño de una buena vez.—Como si de una orden sagrada fuera se baja los pantalones junto con los bóxer mientras yo me sigo dando placer y soltando sonoros gemidos.
—Sus deseos son ordenes, Bellaquita.