Prólogo

El caliente líquido que se encontraba en sus manos caía lentamente al suelo. La tonalidad rojiza era tal que a primera vista parecía algún tipo de brillante, pero dada la situación; ese brillante le resultaba algo repulsivo. Aunque él no era alguien confiable en sí mismo, entendía a la perfección lo que sucedía en ese lugar. No era un sueño, no era alguna alucinación, era la realidad.

—Aaah… ghk.

La saliva no dejaba de acumularse dentro de su boca, el incentivo de querer vomitar se hallaba muy cerca suyo, tanto que con solo bajar la mirada podía observar cómo aquella persona que tanto quería ahora colocaba un rostro de dolor agudo. Tanto una pierna como uno de sus brazos se habían dislocado de una trágica manera, pareciendo que estos ya no podían volver a su lugar, la caída que tuvo fue tal que rompió parte de su cabeza, dejando ver pedazos de sesos esparcidos en el suelo, y al final, un clavo perforó uno de sus ojos llegando a sobresalir y haciendo que muriera al acto.

—¿Por qué…? ¿Por qué?¿Por qué?¿Por qué?¿Por qué?¿Por qué?¿Por qué?

Lamentable. La desesperación que sentía era algo incontrolable, la persona que había muerto de manera grotesca era su hermano menor. A pesar de que quería gritar no podía, las lagrimas salientes de sus ojos fueron tantas que llegaron a formar un tipo raro de líquido con toda la sangre que se encontraba alrededor del cadáver de su hermano.

¿Era esto acaso el fruto de sus convicciones?

Él no entendía la razón por la que todo acabó de tal manera, cada vez que intentaba mejorar las cosas, cada vez que realizaba un esfuerzo para hacer que las cosas no sean las mismas, fallaba; y fallaba cada vez de mal en peor. Esta no era la primera vez que sucedía tal hecho, tampoco la segunda o la tercera. Aun teniendo la posibilidad de poder volver a un punto del pasado no podía cambiar ese futuro.

—El fuego…

El cadáver de su hermano no era el único problema. El calor que sentía no dejaba de aumentar, las flamas gigantes de fuego crecían conforme avanzaban a las casas cercanas, el lugar donde se encontraba era un infierno debido a esto mismo y las posibilidades para poder escapar de aquel lugar tendían a cero conforme el tiempo transcurría. A pesar de tener todo ese conjunto de problemas, él no podía dejar las cosas como estaban. Intentando pararse notó que una de sus piernas se hallaba llena de pedazos de vidrio roto, por lo que presionando sus molares se levantó teniendo en sus brazos a su hermano. Sin embargo, la otra pierna había sido rozada por el cadáver su hermano, haciendo que ambos cayeron en el pavimento. Sus ojos no dejaban de mirar cómo el fuego se acercaba cada vez más, la muerte se encontraba tan de cerca que podía notar cómo venía a él.

Fue ahí que notó como el cadáver de una chica se estaba quemando a unos cuantos metros, el dolor, la impotencia y el remordimiento de no poder hacer nada surgían dentro suyo, esa chica era la que él quería salvar en primer lugar. 

¿Por qué…? ¡¿Cómo he llegado a este maldito final?! ¡¡¡MAAAAAAALDICIOOOOOONNNN!!!

Viendo como el fuego se acerca tanto el joven, Dylan, solo pudo cerrar sus ojos y————.