Bien pareciera a veces ser imposible perdonar, porque el daño hecho a nosotros ha sido de tal magnitud que simplemente tenemos dudas que nuestro perdón incluso sirviera de algo, también el daño pudo recaer en alguien que queremos o simplemente a nuestro poblado o a nuestra nación.
Entonces dispongámonos a tener en cuenta lo siguiente, es necesario tener en cuenta que el perdón aparte de ser reparador para la persona que lo recibe, tiene un mayor significado en nosotros mismos, que somos quienes lo damos, y es aquí donde tenemos en cuenta lo mucho que nos brinda este maravilloso poder que nos ha regalado Dios.
Entonces tomar en cuenta que dicen las escrituras en este sentido. No obstante, es necesario, antes, explicar acerca de los designios de Dios originalmente.
Adán y Eva luego que fueron expulsados del paraíso tuvieron a su primer hijo Caín y luego a Abel. Caín era labrador de la tierra y Abel pastor de ovejas ambos llevaron sus ofrendas a Dios. La ofrenda de Abel fue bien vista por Dios y no la de Caín, por ende, este último se ensañó de gran manera con Abel. Dios trató de que entrara en razón, mas él no lo hizo.
Génesis 4, 8
Y dijo Caín a su hermano Abel: Salgamos al campo. Y aconteció que estando ellos en el campo, Caín se levantó contra su hermano Abel, y lo mató.
Entonces Dios explicó a Caín las consecuencias de su pecado (castigo consecuencia del pecado) y él dándose cuenta, de tanta desventura, de no poder soportar, tuvo miedo de morir. Es por eso que Dios actuó.
Génesis 4, 15
Y le respondió Yavé: Ciertamente cualquiera que matare a Caín, siete veces será castigado. Entonces Yavé puso señal en Caín, para que no lo matase cualquiera que le hallara.
Tuvo Caín descendencia y Dios grande de amor y de dicha no lo dejó morir.
Génesis 4, 23 - 24
Y dijo Lamec a sus mujeres: Ada y Zila, oíd mi voz; Mujeres de Lamec, escuchad mi dicho: Que un varón matare por mi herida, y un joven por mi golpe. Si siete veces será vengado Caín, Lamec en verdad setenta veces siete lo será.
Este es el principio del perdón de Dios que, aunque Caín mató a su hermano no permitiría que muriera a manos de alguien.
Esas últimas palabras de Lamec fueron dichas luego que naciera nuevamente un descendiente de Adán.
Génesis 4, 25 – 26
Y conoció de nuevo Adán a su mujer, la cual dio a luz un hijo, y llamó su nombre Set: Porque Dios (dijo ella) me ha sustituido otro hijo en lugar de Abel, a quien mató Caín. Y a Set también le nació un hijo, y llamó su nombre Enós. Entonces los hombres comenzaron a invocar el nombre de Yavé.
Como se ve Dios actúa en favor del hombre recompone, restituye, enmienda los caminos equivocados que pueda tomar, pero muchos piensan que nunca debemos equivocarnos y que nunca debemos pecar; ese es el camino único, pero Dios nos reprenderá en ese sentido. Jesús la plenitud de la revelación habla acerca de ello.
Mateo 18, 21 – 22
Entonces se le acercó Pedro y le dijo: Señor, ¿cuántas veces perdonaré a mi hermano que peque contra mí? ¿Hasta siete? Jesús le dijo: No te digo hasta siete, sino aun hasta setenta veces siete.
Guarda estrecha relación con lo que nos dice el Dios Padre en génesis, que le pone señal a Caín para que no lo maten y si lo hiciese será siete veces castigado. Y Lamec indica a sus mujeres Ada y Zila que Lamec setenta veces lo será “Que un varón mataré por mi herida, Y un joven por mi golpe. Si siete veces será vengado Caín, Lamec en verdad setenta veces siete lo será.”
Cuando esto dijo, Dios lo bendijo; le fue dado el retoño del nuevo Abel, el hijo de Lamec –indica conoció de nuevo Adán a su mujer– quien tuvo a su hijo Set –en sustitución de Abel que fue dado muerte por Caín–
Lamec tuvo dos mujeres Ada y Zila, de la generación de Ada salen los que viven en tiendas y crían ganados, también los que tocan arpa y flauta, de Zila nacen la generación artífice de toda obra de bronce y hierro.
Génesis 4, 22
Y Zila también dio a luz a Tubal-caín, artífice de toda obra de bronce y de hierro; y la hermana de Tubal-caín fue Naama.
También dijo Jesús.
Mateo 5, 22
Pero yo os digo que cualquiera que se enoje contra su hermano, será culpable de juicio; y cualquiera que diga: Necio, a su hermano, será culpable ante el concilio; y cualquiera que le diga: Fatuo, quedará expuesto al infierno de fuego.
Este dicho lo dice Jesús indicando.
Mateo 5, 17
No crean que yo vine a suprimir la Ley o los Profetas. No vine a suprimirla, sino para darle su forma definitiva.
Hasta acá se puede entender la real significancia del perdón, como que libera al hombre, que encamina, que restablece completamente su alma, porque desde el principio Dios así lo quiso, desde que Caín se apartó de Dios.
Desde el capítulo cinco de génesis, posterior a los textos expuestos arriba ya no se habla de la generación de Caín, sino la generación de Adán que continúa con la de Set –quien es el nuevo Abel–.