Relatos De Terror Y Misterio

El experimento de la familia Favers

El sonido de esa radio dando el mismo mensaje todo el día en la casa de los Favers. Se sometieron a una prueba de investigación en la cual se determinaba el nivel de tolerancia en las personas a los sonidos, y las palabras. Era una habitación en su totalidad como un living sellado con una cámara de respiración. No hay ventanas, y solo una puerta cerrada; no comunicación de tipo alguno. Tampoco relojes con los que manifestar el tiempo. Las palabras del mensaje dividido en tres eran las siguiente: Buenos días, Tenga un bello día. Buenas tardes, tengan un bello día, Buenas noches tengan un buen descanso.

 

 

El primer aviso determinó la primera forma de ellos, quienes entablan su conversación como todo ser humano.

 

 

- ¿No podemos saber, aunque sea que hora es? – pregunta el hijo

 

 

- Ya sabes las reglas - manifiesta la madre

 

 

- No se preocupen. No importa el tiempo. Los mensajes se hacen detallar.

 

 

 

Pronto el alimento llegó por una abertura significativa. Les daban variados platos. Hoy eran pastas.

 

 

A la niña mayor no le gustaba.

 

 

- Debes comer, no hay otro alimento para ti – Le comenta la madre. –

 

 

- Estoy aburrido – confiesa el niño. –

 

 

 

Teniendo presente los muebles. No había otra actividad que realizar.

 

 

Pasado un momento. Se despliega el segundo mensaje, Buenas tardes, tengan un bello día,

 

 

- ¡Gracias! – expresa el padre –

 

 

 

A los niños nos les molestaba, en principio, ni a Jesica la esposa de Daniel.

 

 

De a instantes dormían plácidamente en sus camas. Luego despertaban de un sueño profundo.

 

 

- Buenas noches tengan un buen descanso – último mensaje del día.

 

 

 

 

 

Aparecer todo generaba una normalidad notoria. Luego de unos días comenzó a generarse la impaciencia de que las personas no podían realizar actividad alguna. Debían ingeniárselas para cada ciclo de los mensajes.

 

 

El padre estableció entonces un horario donde desarrollar las actividades. El primer mensaje lo delimitaría. Entonces a partir de allí, la actividad era desarrollada por la madre. Con movimientos que fueran precisos para el cuerpo humano. No tenía experiencia, así que utilizarían el método empírico. Realizar a prueba y error.

 

 

Los dolores no tardaron en venir en el cuerpo.

 

 

Para los casos de enfermedad, la habitación estaba totalmente sellada, por lo que no se produciría mayor desequilibrio.

 

 

El inconveniente fue con la comida, pues era desajustada a los tiempos de la actividad física. Sin tener un reloj que les exprese el horario, el padre tomo la botella de agua que le sobraba de los escasos víveres que se hacían llegar. Con un sistema básico de goteo milimétrico, calculo un tiempo determinado en que las gotas de agua caen en otra botella. Que está debajo. Era tan simple. Un agujero pequeño en la base de la primera botella.

 

 

Al tercer mensaje, pergeñaron que era la noche por referirse al descanso. Hicieron conclusión de que debían esperar con el alimento, pues este llegaba antes de lo pensado.

 

 

De esta forma lograron sobrellevar los siguientes acontecimientos. Habían creado un sistema de juego con papeles, parecido a las cartas. Era una familia inteligente.

 

 

Con el tiempo se abrió la puerta, y fueron traslados a otro sector con tres familias más. Hicieron uso de sus métodos sociales para la cuestiones de convivencia.

 

Los Peels, eran bien desordenados, e imponían ciertas ideas por ser los primeros en llegar. Su educación era endeble comparada con las demás familias.

 

 

Los Mc Kee, eran de cierta estirpe. Dibujaban estatus, verificaban por su capacidad intelectualidad mayoría en pensamientos.

 

 

La trágica formación se produjo cuando. Se formó de parte de la familia Peels, una contraposición con relación a las actividades, luego con relación a los bienes la familia Mc kee pretendía ciertas posiciones en relación a los alimentos. Los Favers eran de otra

 

 

 

 

 

estirpe. A ellos los movía otro sentimiento que no era tan usual, y estaba más escondido. Cuando el uso agresivo de algunos elementos produjo toxicidad, los favers asintieron la despiadada manía de liderar de los Peels.

 

 

Los mensajes se iban produciendo en el día como las discusiones. La amabilidad de la radio producía irritación. Una pelea por la actividad que genera Jesica, hizo uso desmedido de la agresión por parte de los Peels. Los Mc Kee, se abstenían de actuar. Le mensaje de buenas tardes los irritó, aún más, hasta las buenas noches.

 

 

Algo definitivamente no estaba acorde a los planes. Los Peels, fueron los primeros en recibir la comida, luego los Mc Kee. Con el pasar de los días, se gestó un clan entre las dos tribus, y los Favers estaban en desventaja. Recibían todas las sobras, y malos tratos. Limpieza de la gran habitación, como trabajo. Era pues una casta de ley del más fuerte. El golpe en la cabeza del niño Favers, produjo la actuación de Jesica, que recibió un balazo de parte de unos de los adolescentes de los Mc Kee. Intento apaciguar todo Daniel, hasta que comenzaron a golpearlo también.

 

 

Buenas días, buenas tardes, buenas noches.

 

 

El entumecimiento de Jesica le produjo un mareo. En uno de los muebles, una gaveta, sin querer lo abre, y un cuchillo. Todo estaba premeditado. Ella lo toma, y se acerca al adolecente que reía pateando a Daniel, con cierta delicadeza, lo pasa por su pescuezo. La sangre chorrea en el suelo. Daniel se corre, y ella con fuerza lo clava en el mayor de los Mc Kee. Lo aberrante comienza cuando Daniel con un respiro toma una silla y golpea hasta matar al líder de los Peels. Los niños toman lo que encuentran partiendo los platos de vidrio. La locura y el despotismo hicieron que la extraña maquinación de los Favers explotara. Los mensajes comenzaron a llegar desde la radio, una y otra vez.




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