Relatos de un cerebro caótico.

Demonios encadenados.

Aunque los demonios físicos ya vivan conmigo, si existen otros demonios que son los psicológicos… esos desgraciados que no me dejan avanzar, esos inútiles que impiden que la felicidad aparezca en mi vida.

Quisiera ser capaz de poder luchar contra ellos y vencerlos sin miedo a fracasar una vez más, llegar a derrotarles sin importar los daños causados.

Dejar de ser alguien solitarie y dejarme llevar por lo que sucede ahora o mañana quizás, no aferrarme al pasado como si fuese lo único que me quedara.

Demonios que dan más dolor que paz, demonios que no me dejan soñar, demonios que me matan lentamente sin importar el llegar a mi muerte.

Quiero que mi calma regrese, que se evadan de mi mente, que me dejen vivir, soñar, luchar, reír, llorar, gritar, amar…

Quiero ganarles la batalla, quiero amarme a mi misme.

Quiero… matarlos por siempre.

 



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En el texto hay: lagrimas, dolor, pasión.

Editado: 13.12.2019

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