Capítulo 821: El hermano mayor de Pan Zirui sobrevive

Gu Ning inmediatamente usó su poder invisible para evitar que el médico se acercara. El médico se puso rígido por un momento y no pudo moverse.

Al ver que el médico no pudo detener a Gu Ning, otro médico caminó hacia adelante, pero se sintió extremadamente estresado cuando se acercó a Gu Ning.

Ambos quedaron impactados por la influencia invisible de la joven y pronto se quedaron sin respiración.

-”Si no quieren que muera, cierren la boca”, les dijo Gu Ning, luego caminó hacia el hombre herido que yacía en la cama de operaciones. Al poco tiempo, apareció un cristal de poder en su palma y ayudó al hombre a tomarlo. Mientras tanto, ella presionó sus dedos en sus sienes para secretamente poner su poder en su cuerpo. A los ojos de los demás, ella solo estaba masajeando al hombre herido.

-”Tú…”

 ̶U̶n̶a̶ ̶v̶e̶z̶ ̶q̶u̶e̶ ̶l̶o̶s̶ ̶m̶é̶d̶i̶c̶o̶s̶ ̶o̶ ̶e̶n̶f̶e̶r̶m̶e̶r̶a̶s̶ ̶q̶u̶e̶r̶í̶a̶n̶ ̶d̶e̶t̶e̶n̶e̶r̶l̶a̶

Gu Ning les daba una mirada fría y ellos cerraban la boca con miedo. Sin embargo, todavía intentaron ahuyentar a Gu Ning qué era una intrusa.

-”¡Mira, la línea de sus latidos está aumentando!”.

-”¿Qué?”.

ᴀʟ ᴇsᴄᴜᴄʜᴀʀ ᴇsᴏ

Todos los médicos y enfermeras se giraron para mirar la pantalla de la máquina cercana. Al ver que la línea de los latidos del corazón que estaba casi nivelada empezaba a aumentar y todos quedaron sorprendidos. Ninguno de ellos se atrevió a detener a Gu Ning ahora.

-”¡Terminen la cirugía ahora mismo!” Gu Ning dijo para recuperar su atención. No podía curar completamente al hombre herido en ese momento porque despertaría sospechas.

Varios médicos continuaron la cirugía a la vez y cuando vieron que las heridas dejaron de sangrar, no podían creer lo que veían.

Gu Ning quitó los dedos después de que la vida del hombre estuvo fuera de peligro, pero no se fue de inmediato, en caso de que necesitaran su ayuda.

La familia de Pan Zirui, sin embargo, estaba inquieta afuera. -”Zirui, ¿estás seguro de que ella puede ayudar?” Preguntó la señora Pan.

-”No creo que sea malo que se quede adentro por mucho tiempo”, dijo el Sr.Pan.

🅰🅿🆁🅾🆇🅸🅼🅰🅳🅰🅼🅴🅽🆃🅴 🅼🅴🅳🅸🅰 🅷🅾🆁🅰 🅳🅴🆂🅿🆄é🆂

Terminó la cirugía y los médicos empezaron a coser el corte.

αℓ ¢αвσ ∂є υη яαтσ

La puerta del quirófano se abrió de nuevo y la familia de Pan Zirui preguntó ansiosamente al médico. -”¿Cómo está?”.

-”La operación fue todo un éxito y el mérito es de la señorita”, dijo el médico.

-”¿Qué? ¿Fue un éxito?” La familia Pan se emocionó y lloró de alegría.

Gu Ning salió después y la familia Pan le agradeció repetidamente: -”¡Muchas gracias, señorita Gu! Muchas gracias por lo que has hecho por nuestra familia”.

La señora Pan casi se arrodilla, pero Gu Ning la detuvo.

-”Jefa, no sé como agradecerte…” Dijo Pan Zirui.

-”Está bien”, dijo Gu Ning y luego sacó una botella de porcelana. -”Hay dos pastillas dentro. Ayuda a tu hermano a tomar una cada tres días y estará bien”.

-”¡Gracias!” Pan Zirui cogió la botella. -”Cuanto es…”

Antes de que pudiera terminar Gu Ning lo interrumpió: -”Ya que somos amigos, estoy dispuesta a ayudarte y no necesitas darme dinero. Tengo que irme”.

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Gu Ning se fue.

Pan Zirui le gritó a su espalda. -”Gracias jefa! ¡Llámame cuando me necesites en el futuro!”.

-”¡Lo haré!” Dijo Gu Ning y luego se alejó más.

 ̶J̶u̶s̶t̶o̶ ̶c̶u̶a̶n̶d̶o̶ ̶G̶u̶ ̶N̶i̶n̶g̶ ̶d̶e̶s̶a̶p̶a̶r̶e̶c̶i̶ó̶ ̶a̶l̶ ̶f̶i̶n̶a̶l̶ ̶d̶e̶l̶ ̶p̶a̶s̶i̶l̶l̶o̶

Un médico atropelló al director del hospital. Fueron a buscar a la chica que salvó la vida del herido, pero ya era demasiado tarde, Gu Ning ya se había ido.

Aunque el camino en la cirugía los avergonzó como médicos profesionales, todavía querían aprender de Gu Ning.

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El director del hospital le pidió a Pan Zirui el número de teléfono de Gu Ning, pero Pan Zirui se negó porque primero necesitaba pedirle permiso a Gu Ning.

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Pan Zirui se hizo a un lado para llamar a Gu Ning.

Cuando Gu Ning recibió la llamada de Pan Zirui, ella acababa de salir del edificio. -”¿Qué pasa?” Ella pensó que el hermano mayor de Pan Zirui estaba nuevamente en peligro, así que se detuvo de inmediato.

-”Jefa, el director de este hospital quiere tu número de teléfono. ¿Te importa si se lo doy?” Dijo Pan Zirui.

Gu Ning se relajó cuando escuchó que no se trataba de su hermano. -”Dígale que es inútil que se comunique conmigo porque no sé nada sobre el medicamento. Alguien me dio las pastillas y un experto médico las analizó antes pero no encontró nada”.