Capitulo 1114: ¿Convertirse en una broma?

Como Leng Shaoting estaba ausente, Gu Ning no quería regresar a su casa tan temprano, por lo que se fue a su compañía.

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Recibió la llamada de Yu Zi.

-"Jefa, ¿dónde estás ahora?", preguntó Yu Zi.

-"Estoy en la capital ahora", dijo Gu Ning.

-“¡Yo también!” Yu Zi se sorprendió y se sintió feliz.

-"¿Es por la rama de Charm?", preguntó Gu Ning.

-"Sí, trajimos algunos vestidos aquí y la tienda abrirá mañana", dijo Yu Zi.

Una vez que la tienda abra sus puertas podrán tener muchos pedidos de vestidos hechos a medida, por lo que Yu Zi tenía que estar en la tienda para administrar el trabajo como única diseñadora de Charm.

-"¿Estás libre esta tarde? ¿Podemos cenar juntas?", preguntó Gu Ning.

-“Claro, yo también quiero verte. De hecho, tengo algo de lo que hablar contigo y podemos hablar de ello durante la cena”, dijo Yu Zi.

-”Ahora estoy libre, así que puedo ir a encontrarme contigo en la tienda”, dijo Gu Ning.

-”Genial”, dijo Yu Zi, y luego colgó la llamada.

La sucursal de Charm en la capital estaba ubicada en el centro comercial más grande del centro. Era muy visible, lo que era bueno para su negocio.

Aunque el alquiler era muy alto, a Gu Ning no le importó porque creía que Charm era prometedor.

̶U̶n̶o̶s̶ ̶c̶u̶a̶r̶e̶n̶t̶a̶ ̶m̶i̶n̶u̶t̶o̶s̶ ̶d̶e̶s̶p̶u̶é̶s̶ ̶l̶l̶e̶g̶ó̶ ̶G̶u̶ ̶N̶i̶n̶g̶

Detuvo el coche en el parking subterráneo y se dirigió al primer piso del centro comercial.

La tienda de Charm tenía unos 100 metros cuadrados, pero tenía dos pisos, por lo que tenía alrededor de 200 metros cuadrados en total.

No era una tienda muy grande en el centro, pero tampoco pequeña. Además, su objetivo era colaborar con los empresarios de la confección, por lo que no era necesario que ocuparan un gran espacio.

Por ahora, poco a poco se fueron abriendo sucursales de Charm en diferentes grandes ciudades y eran populares entre los consumidores ricos.

Al colocar los vestidos en sus respectivas posiciones, muchas personas se sintieron atraídas por los hermosos vestidos.

-“¡Wow, los vestidos son tan hermosos!”.

-“Deben ser muy caros”.

-“Tengo curiosidad por saber su calidad”.

-“¿Charm? Nunca había oído hablar de esta marca. Seré el hazmerreír si la uso para ir a fiestas”.

-”No me importa. Creo que son muy bonitas y voy a entrar a echar un vistazo. ¿Me acompañas?”.

-"¡Por qué no!".

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Varias mujeres ricas entraron a la tienda.

Charm aún no estaba abierto, pero no impedirían que los clientes entrarán.

Aunque a algunas mujeres ricas no les gustaba Charm porque no era muy famoso, tenían que admitir que los vestidos de Charm eran muy atractivos.

Gu Ning notó que algunas personas la seguían después de que llegó a la sucursal de Charm, pero sabía que no eran malas personas. Incluso escuchó su conversación.

-"¿Es ella la diosa Gu?".

-“Me parece familiar, pero no estoy seguro”.

-"¿Por qué no vamos corriendo a echarle un vistazo a la cara?".

-“No creo que sea apropiado”.

-“¿Por qué? De todos modos, ella no nos conoce”.

Era obvio que eran fans de Gu Ning.

-“Podemos seguirla un rato más para ver si conviene entablar una conversación con ella”.

-"Seguro".

Claramente, estas dos chicas no tuvieron el coraje de interrumpir a Gu Ning.

Poco tiempo después, se dieron cuenta de Charm.

-“¿Charm? ¿No es la compañía de la Diosa Gu? ¡La chica debe ser la Diosa Gu!”.

-“Creo que es muy posible”.

-“Podemos entrar para ver si es verdad”.

Sin demora, las dos chicas siguieron a Gu Ning al interior.

Gu Ning se divirtió con su conversación. Aunque no los saludó por su propia voluntad, estaría dispuesta a hablar con ellos si la saludaran primero. Sin embargo, en el momento en que Gu Ning entró en la tienda, se encontró con algunas personas que discutían en voz alta.

-“¡Es demasiado caro! ¿Un vestido sencillo cuesta ochenta mil yuanes? ¿Crees que eres una marca internacional?”, dijo una mujer enfadada.

-“Señora, este vestido está hecho a mano y con los mejores materiales. No es peor que los de las marcas internacionales”, explicó Yu Zi con cortesía.

-“¿Y qué? ¿Quién es el diseñador de esta marca? ¿Es famoso en la industria?”, preguntó la mujer.

-“La diseñadora de esta marca soy yo y me llamo Yu Zi. Aunque no soy lo suficientemente famosa, puedo prometer que este vestido merece su precio”, dijo Yu Zi.