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Stiles

–¿Crees que hicimos bien dejándolos solos? –Escuche la pregunta, pero me ignore el sentimiento de culpa al saber que estaba tal vez mandando a mi mejor amigo a algo que ya no quería.

–No lo sé, amor. –Susurre ignorando ese sentimiento y caminando hasta donde estaba sentando en su regazo.

–Tal vez podrías distraerme para no pensar que estamos haciendo mal. –Sonreí ante su sutil comentario.

–Tal vez... –Conteste sobre sus labios acercándome para besarlo.

El sonido de un teléfono nos tuvo a ambos gruñendo por la interrupción. Saque mi celular leyendo el mensaje que Deaton había enviado.

-Reunión en dos horas tenemos noticias. –Deaton

–¿Qué querrán? –Pregunte enseñándole el mensaje.

–No lo se, supongo sobre Ian. –Contesto Derek apretando el agarre en mi cintura.

–¿Qué hacen? –Pregunte sabiendo que mi pareja estaba escuchando lo que sucedió con mi mejor amigo.

–Hablan Liam no lo dejara ir. –Contesto viéndome al tiempo que me robaba un beso.

–Ellos lo lograran. –Aclare sabiendo que Liam no dejaría ir a mi mejor amigo.

–¿El qué? –Pregunte levantándose conmigo en brazos.

–Ser felices, ellos lograran la felicidad. –Susurré escuchando como Liam gritaba que amaba a mi amigo y sonreí.

Nos levantamos para ir detrás de los tortolos pues sabía de antemano por la sonrisa de Derek que al fin se había reconciliado.

Liam.

–Me rendiré ante ti, luchare por ti, contra quien sea. –Susurre en su oído convirtiéndome en lob sentí como se tensaba intentando que me alejara de él.

–Aléjate Liam. –Hablo intentando que me alejara negué acercándome a su cuello justo donde había visto que Stiles y Derek tenían su unión. Sentí el momento en que se tensaba mas al sentir mis dientes. –¿Qué haces?

El pánico en su voz me dolió, pero no aminoro mis ganas de hacer lo que tenia pensando pues cuando estaba dormido había decidido marcarlo para que esa estúpida cazadora no se creyera más inteligente que yo.

–Marcarte. –Confesé para después enterar mis dientes en su cuello al mismo tiempo que sentía su mano apretar mi cintura para después sentir sus dientes me vi siendo girado y arrojado en la cama.

–¿Sabes lo que estas haciendo? –Me aleje viéndolo pues se había convertido dejándome ver sus ojos rojos.

–No dejare que ninguna cazadora lleve la marca que es mía por derecho. –Aquello provoco un estremecimiento en el pues lo siguiente que tuve fueron sus labios sobre los míos besándome.

–Ya no hay marcha atrás, Liam. –Escuche su susurro sintiendo como sus dientes se enterraban más en mi cuello.

–Soy tuyo. –Susurre acercándolo a mí. –Te amo, Scott.

–Eres mío, Liam. Solo mío. –Con aquello dicho supe que Scott era oficialmente mío y que ahora no había nada que nos separara.

Nos separamos solo lo suficiente para vernos y sonreímos.

–¿Por qué lo hiciste? –Pregunto viéndome fijamente.

–Intente negarlo Scott, pero no podía seguir ocultando con un dedo la verdad que estaba ante mis ojos. –Confesé viéndolo sonriéndome.

–¿Qué verdad? –Pregunto dándome un ligero beso en los labios.

–Que caí rendido a ti desde hace mucho tiempo.