Renegados: El As De Picas

#2 Convocatoria

Maldonado, Uruguay 🇺🇾, 12 de Junio de 2020, 7:26 A.M

El Capitán Javier Molina comienza a poner en marcha su plan de reunir un equipo especial. Con la ayuda de su hija Ana, quien interactuó con 2 de los individuos restantes de la lista y se hizo con información para contactarlos, el Capitán por si mismo hace el trabajo restante. Escribe personalmente un mensaje de convocatoria desde su celular con el Background y el logo de la D.E.S.U. El mensaje no es muy largo; solo dice lo necesario. Cuando termina lo cataloga como clasificado y solo para los ojos de un destinatario específico. Envía una copia al correo de Maldonado para que lo dirijan a la casa de Tommy, envía directamente 2 copias más a los celulares de Mike y Ray y otra copia al correo de Montevideo para que lo dirijan al Penthouse de Danny. Sally, que ya se había contactado con el Capitán Molina antes, sabe ya de antemano que tiene que ir y es el único que lo sabe.
Mike y Amanda, recién casados, pasan su primera noche juntos como matrimonio. Mike despierta temprano en su habitación oscura con luces apagadas y cortinas cerradas, toma su celular y ve el mensaje de citación de la D.E.S.U.

Amanda: ¿Está todo en orden? —Pregunta recién despertándose

Mike no le oculta ningún secreto a Amanda, así que ella ya sabe de la aventura de hace unos meses, sabe lo de Río y sabe también sobre la bomba y sobre su hermano y su padre siendo superhéroes. Mike solo desconecta su celular del cargador y le enseña el mensaje a su esposa.

Mike: Tengo que ir.

Amanda: ¿Tendrás que volver a vestirte de hombre de las nieves? —Haciendo referencia a su traje helado

Mike: Ojalá pudiera decir que no. Pero eso me temo. Volveré.

Amanda: Suerte. Te amo.

Mike: Y yo a ti. Nos espera una maravillosa luna de miel la próxima semana.

Amanda: Más te vale que vuelvas para eso —Bromea

Mike: Haré el desayuno. Ven cuando estés lista.

Amanda: Espera.

Mike: ¿Qué?

Amanda: Creo que tengo algo dentro del pantalón.

Mike: ¿Qué tienes?

Amanda: No lo se —Dice con un tono seductor—. ¿Por qué no me lo quitas y me inspeccionas? —Le guiña el ojo

Mike: ¿Tan temprano? —Dice con una enorme sonrisa

Amanda: Obvio, mi amor.

Mike: Pues yo digo que te voy a inspeccionar muy bien.

En la ciudad de Montevideo, a la misma hora, Ray está entrenando en gimnasio del garaje de su tío. Es un chico al que le gusta mantenerse en forma. En una pequeña pausa que hace para beber agua ve el mensaje de la citación. Viendo que es esa misma mañana piensa en voy alta "Voy a tener que apurarme si quiero llegar".
También en Montevideo, Danny prepara su desayuno. Pese a que su familia tuvo mayordomos toda su vida el siempre insistió en aprender a hacer las cosas por su cuenta. De modo que por si solo hace un rico licuado de frutas y unas tostadas con jamón y queso. Cuando mira su celular lee los mensajes de su primo, quien en su ausencia es sus ojos y oídos en Buenos Aires, además de ser quien lo ayuda en toda la parte tecnológica y armamentista. Aún no hay novedades de Kate, la hermana desaparecida de Danny. De repente suena el timbre de su puerta. Como ya está vestido, Danny se levanta de la silla y abre la puerta. Uno de los empleados del hotel le entrega un sobre diciendo que es un mensaje importante solo para sus ojos. El empleado se retira no sin que antes Danny, como habitualmente hace, le da una propina de unos 20 dólares. Al ver el mensaje Danny no pierde tiempo en terminar de desayunar, arreglarse e ir rumbo a Maldonado, a la D.E.S.U.
Tommy es el único que duerme a estas horas de la mañana. Su hija del futuro, Emily, está despierta desde las 6 A.M cocinando en su  pequeña cocina portátil que acaba de comprar. No solo cocina un nuevo pedido(Tiene su propio emprendimiento de comida casera, postres, etc, en esta época), sino que, además, prepara el desayuno para ella y para su padre. Tommy despierta. Cuando mira la hora en su reloj son las 7:50 A.M, así que, pese a que le cuesta, se levanta.

Emily: Buenos días ¿Cómo estás?

Tommy: Bien, eso creo. Mmm ¡Qué bien huele! —Exclama deleitándose en el olor de los panqueques que Emily está preparando—

Emily: Estarán listos en un minuto.

Tommy: No puedo esperar. ¿Hiciste el pedido?

Emily: Si. Un pastel de chocolate y dulce de leche para entregar antes de las 10 en el hipódromo.

Tommy: ¿En qué irás hasta allá? Son varios kilómetros.

Emily: Tomaré un bus. Oye —Cambia de tema—, llegó esto para ti.

Emily le enseña un mensaje de Instagram en la pantalla de la computadora. Es de la cuenta oficial de la División Especial de Seguridad del Uruguay y, por supuesto, contiene el mensaje de citación esa misma mañana.

Tommy: ¿Revisaste mi Instagram? —Pregunta con tono de estar molesto

Emily: Oye, no te...

Tommy: Descuida —Se ríe—. Solo bromeaba. Revisa todo lo que quieras. Total, no me escribe nadie por Instagram. Por ninguna red tampoco. Qué habré hecho para que me citen a la D.E.S.U.

Emily: ¿No es donde el Capitán Molina te reclutó?

Tommy: Si, pero tienen mis datos de contacto. Si me envían aquí, a mi Instagram, una citación como esta seguramente no sea nada bueno. Comeré esos panqueques, me arreglo y me iré. ¿Tienes dinero para el autobús?

Emily: Si, parte de lo recaudado de ayer.

Tommy: Genial. Bueno, ¿Qué estamos esperando? —Se frota las manos— ¡Buen provecho!

A la hora acordada, 11 A.M, todos los citados hacen acto de presencia en la sede de la D.E.S.U en Maldonado. Tommy es el último en llegar y un oficial lo manda al sótano, donde se encuentra el arsenal del edificio, el taller y los artículos de mantenimiento entre otras cosas. Cuando Tommy llega encuentra a Sally y a sus hijos, Mike y Ray, a quien por supuesto saluda. También se lleva la sorpresa de encontrarse con Danny. 




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