Inhale aire por la nariz mirando hacia la habitación y mirando a Alex de hito en hito, quería hablar a solas con él pero raramente podría con todos ellos en la cabaña, dando vueltas, preguntando y necesitándonos para alguna cosa.
Ben me miro y suspiro antes de levantarse al lado del colchón donde ahora descansaba Javier.
-Deberías ir.
-¿Qué?.-Por primera vez no sabia que hacer, los miraba a todos decididos y yo no entendía que había pasado, como la voz de Javier de repente había cambiado y me había hablado de manera diferente.
-¿Quieres ir?.-Pregunto Alex nervioso pero serio, hablar con un poseído no era nada con lo que habíamos visto ese día.
Lo mire.-No se.
La voz era inconfundible, había sido Zenia hablándome desde el cuerpo de Javier, suave, delicada pero con un matiz de seriedad.
Ben suspiro pellizcándose el puente de la nariz.-¿Cómo que no sabes?.
-Ben.-Advirtió su amigo con una mirada fulminante y luego me miro preocupado.-¿Estas bien?.
No, no estaba bien, casi podría decir que tan solo oír la voz de mi hermana pequeña había abierto una herida que no había cicatrizado y le había puesto sal y limón para hacer que el dolor de culpa se haga mas profunda, insoportable.
Negué, me detuve y asentí sin tener la menos idea de que decir.
-¿Si quieres podemos ir a ver y, si no nos gusta, nos largamos?.-Dijo el muchacho a mi lado ante mis claras dudas. Negué y asentí casi al mismo tiempo. Me tomo de la mano.-Reb...
-No creo que tu debas ir.-Comento Amelia por fin hablando desde que su novio quedo inconsciente, no se la veía en absoluto preocupada por su estado lo que decía que era normal para ella, pero aun así su tranquilidad me aterraba.
-¿Que?¿Por que?.-No era la respuesta que debía darle, debería haber defendido a Alex, pero mi mente solo tenia espacio para la voz de Zenia y no procesaba del todo bien la conversación.
-Por que en las conexiones con el Limbo nosotros quedamos afectados por nuestras almas desprotegidas.-Hizo una mueca mirando a Javier antes de volver a mi mirada sorprendida por saber que ella era de afuera, como Alex.-Podemos perdernos en el espacio y... no volver.
No tengo idea a que se refería pero no me gustaba eso de perderlo.
Alex soltó una risa seca.-¿Perderme?¿O sea que no podre...?.
-Es mas difícil de explicar.-Dijo Amelia antes de sentarse en la silla de Ben con una mueca y la mano sobre su enorme estomago.-Pero si, básicamente no podrás acercarte a ella mientras esta en trance, por eso es mejor que no vayas.
-¿Y tu como sabes eso?.-Ben no parecía entender la seriedad o priorizar lo importante.
Lo ignore.
No me gustaba la idea que Alex no venga conmigo, no lo necesitaba pero lo quería a mi lado lo suficiente para armarme de valor y pedirle perdón por haber sido una tonta, pero de nuevo la voz de Zenia clamo atención en mi mente. Tenia que ir a verla.
Mire a mi prometido y suspire.-¿Podemos hablar afuera?.
Él me miro con escepticismo y asintió siguiéndome hasta la habitación donde cerramos la puerta y un ovalo negro y vació se abrió por si alguien quería interrumpir.
Me senté en la cama y coloque las manos sobre mi regazo.
-¿En serio estas pensando ir sola?.
-No se, Alex.-Admití.-La voz de Javier era... era de Zenia.
Se detuvo.-¿Tu hermana?.
Asentí mirando mis dedos aferrándose al pantalón de dormir.-Creo que quiere decirme algo importante y...
-Quieres que ir.-Concluyo con un suspiro y al mirarlo sabia que no le gustaba la idea que me vaya, que no pueda venir conmigo, aun así asintió con las manos en las caderas y miro la ventana.-Bien, nos iremos al amanecer.
Negue con la cabeza.
-Tu no vendrás.-Abrió la boca para decir algo que seguramente comenzaría una tonta discusión, pero me adelante con la voz calmada y tan relajada como podía.-Alex, escuchaste a Amelia, no me arriesgare a perderte.
-Ni siquiera sabes a que nos enfrentamos.-Bufo molesto por mi respuesta.
No, no lo sabía y tenia la ligera sospecha que tampoco seria bueno para mi ir a buscar a Meliza como dijo Zeni, pero tenia que hacerlo si quería saber por que tenia un alma pegada a mi y por que aparecía una sombra persiguiéndome por las noches.
Ignore su mirada.
-No, pero no quiero perderte.-Estaba siendo sincera.
-Dijiste que resolveríamos los problemas juntos.
Asentí con lentitud y me levante de la cama para tener algo que hacer y no ponerme triste.
-Si y me ayudas estando a salvo.
No me sentía bien, tenia un mal presentimiento y a la vez tenia la sensación de estar vacía por dentro, de no saber como reaccionar. Había un nudo de angustia en mi pecho y no sabia por que.
-¿Así quieres que sea Rey?-Estallo indignado.-¿Manteniéndome al margen mientras te pones en peligro?.
-Alex...
-Dijiste que seriamos un equipo y a la primera que me amenazan me mantienes al margen-Bufo y se volteó para pasar las manos por su cabello y su rostro con fastidiado.-, tu no cambias.
-Es diferente, fue mi hermana pequeña la que me hablo, la que me pidió ayuda, y esta muerta.-Decirlo fue peor aun que pensarlo pero ya no podía volver atrás.-Necesito hacer esto sola, despedirme de ella si tengo la oportunidad.
Me miro fijamente, bufo, inhalo aire por la nariz molesto y luego gruño frustrado antes de dejar caer los hombros.
-¿Soy una carga para ti?.-Murmuro de repente dándome la espalda.
Tenia tanto sueño que los ojos comenzaban a pesarme, por sin sentía el peso de pasar una noche despierta. Pero mas allá de eso estaba la sensación de desilusión que rondaba por mi pecho, el dolor de tener que discutir siempre con él.
-No pelearé ahora, Alex.-Murmuré con tristeza.-Creí que lo entenderías.
Sí capto el tono de mi voz, mi dolor y mi resignación al hablar, y de repente me miraba sorprendido y apenado desde al lado del ovalo.