Mundo plagado de maravillas,
ni qué hablar del universo entero.
Tu belleza es inmensurable,
imposible ponerte precio.
La vida no me alcanzaría para admirarte,
y aunque así fuera, jamás me saciaría.
Las palabras no bastarían para describirte,
ni una cámara para capturar tu hermosura.
No deseo más que todos te conozcan,
así como lo he hecho yo.